provocatio: kiuli

capitulo 5: pesadillas

narrador

- donde está Fuli? - se preguntaba el joven líder de la guardia del león.

todos estaban presentes menos la felina.

- aquí estoy! - gritó la chita llegando, pero todos la miraron sorprendidos. las ojeras que la joven tenía eran muy notorias

- otra vez no pudiste dormir? - preguntó su líder comenzando a preocuparse.

- no, son solo pesadillas. no hay problema. - aseguró la felina soltando un largo vostezo debido al cansancio que aun estaba en su cuerpo.

- pues a mí no me parece que esté muy bien. - dijo Ono aterrizando junto a su líder. - y si mejor vas con rafiki. -

- es una buena idea. - apoyó Kion.

- que estoy bien. totalmente bien. - aseguró testaruda.

- no, no lo estas, fuli. - dijo Besthe. - por favor, tómate el día y ve con rafiki. -

- pero... - iba a objetar otra vez.

- sin peros. - ordenó el joven león. - ve con Rafiki. ahora. - con ese tono serio le dejó claro que no habría objección.

todos se fueron dejando a la felina.

esta suspiró con fastidio y se encaminó hacia el árbol de rafiki.

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las praderas habían sido recorridas y todo estaba en orden.

el jiven líder y el resto de su equipo se encontraba descanzando en la guarida mientras que Ono estaba con Duli donde rafiki. un aletro se escuchó en la cueva y todos se percataron que era Ono.

este llegó acompañado de una felina que se encontraba mejor que antes.

- problema resuelto? -

- eso creemos. - dijo Ono.

- yo... yo iré a correr, hasta luego... - dijo la felina volviendo a salí de la cueva sin motivo aparente.

el joven león creía que algo raro sucedía, por lo que se hacercó a la garza y preguntó - por qué fuli no logra dormir bien? -

Ono, que se picoteaba las alas, dejó de hacerlo y respondió - ni idea. rafiki no sabe. solo la dejó dormir en su arbol, -

- esto es serio. - dijo Kion preocupandose. fuli era una parte importante de la guardia, si ocurría algo grave ella no podría dar el 100% y eso sería riesgoso para ella y para el equipo.

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kion

caminé por las praderas.

- hey, Kion... - esas fueron tiifu y Zuri.

miré a ambas. no se encontraban muy lejos, estaban cerca de un árbol frutal.

- puedes ayudarnos? -

yo me acerqué a ellas y dije. - claro, pero... qué necesitan? -

- es temporada de nueces. puede sir por algunas? - dijo Zuri

yo sonreí sabiendo que no escalaría debido a sus delicadas garras. - por que no. - dije acercándome al árbol para subir por el tronco para intentar tomar algunas nueces.

sacudí las ramas y en seguida comenzaron a caer algunas. fue deficil pero cuando hubo suficientes, las chica dijera. - // gracias, Kion // -

- no fue nada. - dije listo para bajar, pero a lo lejos distinguí a cierta felina observándonos, o eso me pareció.