provocatio: kiuli

capitulo 8: bajo la máscara

Fuli

- Makini! - grité buscando a la mandril en el árbol de rafiki.

tardó en salir. pero al hacerlo estaba llena de pintura por todos lados.

la miré curiosa *sin duda tuvo trabajo*

- ya se estan preparando para la fiesta? tan temprano? - ya que el sol acababa de salir.

- sabes todas las felinas que debo pintar? - se quejó Makini saliendo del árbol con un semblante que demostraba que las leonas la hicieron levantarse temprano. - todas las aves que debo colorear? llevo una semana sin dormir haciendo las máscaras! - se quejó.

- lo siento, lo siento. - dije intentando consolar a mi amiga tan trabajadora. - pero... quedó algo para mí? - dije ante la idea de poder ir, y sobretodo, ocultarme.

- aun no creo que esto sea buena idea. - dijo Makini rascando su cabeza con nerviosismo, ya que intentar escabullirme en una celebración para hablar con el príncipe de las tierras no era la mejor idea de todas. pero no me quedaba de otra si quería conseguir mi objetivo.

- solo tengo un color que me sobre lo suficiente para cubrirte de pies a cabezas, y además poder ocultar tus manchas. - dijo señalando mi pelaje. - es fácil saber quien eres con ese  patrón. - asentí sabiendo que tenía razón.

- bien, aceptaré tus ideas... pero necesito ir. - dice decidida a encontrarme con el león aunque fuera por una noche.

kion

comencé a bajar de la roca del rey, solo tenía pintada algunas franjas en mi rostro, sobretodo un diseño en rojo en mi frente, y un antifás de hojas pintado con negro en mi rostro.

- kion. -

me detuve al ver a mi padre, quien me llamó antes de alejarme de la roca del rey.

- vendrán las mejores felinas, y todas las leonas. - me recordó, por lo que intenté ocultar mi inconformismo por el tema. - prometiste elegir hoy. -

- lo sé, padre. - dije y continué mi camino a la celebración. iba a buena hora para recibir a todas las invitadas. si, escucharon bien: todas. porque la mayoría serían chicas.

para ser más precisos; felinas.

bueno, intentaría disfrutarlo. después de todo, es mi fiesta.

Fuli

- esto... - dije insegura - paresco una pantera. - mi pelaje estaba oculto totalmente pero podría fácilmente pasar desapercibida con esto. tampoco era la idea.

- prefieres que te pinte toda de rojo y que parescas un escarabajo? - se quejó Makini. - además, ya no hay tiempo.

trajo un antifaz del mismo color. ahora si es verdad que no llamaría la atención de Kion ni jugando.

- no. - sentencié dando un paso atrás. - necesito un color más llamativo. no usaré un antifaz negro. -

- Fuli! deja de ser exigente! - se quejó.

- no usaré un antifaz negro y punto. - sentencié.

- ARRR! - se quejó la mandril llendo rápido al árbol, el cual estaba muy atrás de nosotros. yo me ocultaba en los arbustos tratando de no ser vistas por las leonas que iban a arreglarse.

una de ella se acercó a la mandril tratando de persuadirla para que la ayude, pero al final Makini se negó y se alejó apresuradamente.

- nunca había sido tan solicitada en mi vida! - dijo ella llevando su mano a su cabeza, ya que esta fiesta sobrepasaría a todas las demás si esto continuaba.