Su Destino | Kagome & Tomoe

06. Marca

Nota: Una disculpa de antemano, lo había publicado por accidente sin completar.

"El resultado de reprimir las emociones nacientes había sido algo caótico"

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|Segundo Acto: Barreras del Tiempo|

"Me pregunto que sucederá cuando ella regrese a su época" Comentaba la voz afeminada.

"Eventualmente él la buscará" Fueron las palabras de la voz suave.

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En el preciso momento en el que sus pequeños brazos rodearon al kitsune, la situación solo empeoró considerablemente ya que él profundizó aún más la mordida.

La miko se aferraba desesperadamente al cuerpo sobre ella, su mente estaba hecha un caos por todo el dolor que estaba sintiendo. Solía tener una gran resistencia al dolor pero en ese momento era demasiado.

Su cerebro aún procesaba lentamente toda la situación.

Unos segundos después la azabache se estremeció soltando un suave pero sutil jadeo al sentir cómo el hombre retiraba los colmillos. Todo el dolor pareció desvanecerse en ese momento y había sido un gran alivio para la joven.

Pero lo siguiente que sucedió fue que él deslizó su lengua por el lugar afectado, sacándole un dulce gemido a la de orbes azules. Lamiendo todos los residuos de sangre y sellando la herida.

Ese gemido hizo que la excitación del zorro creciera.

Luego de culminar su labor el hombre observó con detenimiento la marca, encantado ante el hecho de que ningún demonio se acercaría a ella puesto que ahora le pertenecía.

Claro que aún no estaba completa, para eso requeriría que la tomara de una vez por todas. El solo pensamiento de hacerla suya le emocionó, excitándolo aún más de lo que ya estaba.

Así que siendo dominado por sus instintos se alzó levemente dando una inspección cercana a la bonita joven debajo de su cuerpo. Tenía un leve aroma a excitación, sus orbes azules expresaban confusión y su respiración era errática.

Una sonrisa ladeada apareció en su rostro.

Kagome le miró consternada, debía admitir que aún estaba algo confundida.

— ¿Que estás... — intentó preguntar pero fue interrumpida cuando unos labios se estamparon de manera abrupta contra los suyos.

La de cabellos negros amplió sus ojos con suma sorpresa cuando su cerebro logró procesar todo lo que estaba sucediendo.

La comprensión cayó sobre ella como si de un gran balde de agua fría se tratase.

El kitsune la estaba besando de manera suave mientras presionaba su cuerpo sobre ella, pero no solo eso si no que también la había marcado.

Ese hecho la hizo estremecerse con horror al recordar lo que significaba tal acto.

Según lo que sabía, los youkais marcaban a la persona con la que deseaban pasar el resto de sus vidas. Algo que más allá de ser una simple mordida, simbolizaba lo más cercano a un matrimonio entre demonios.