Había una vez... Vete al carajo y ten una buena noche.
-Jin.
-Umh- Murmuré sin querer voltearme en la cama para mirarlo.
-Bésame.
-No.
-Entonces follemos.
-No quiero.
- ¿Por qué?
-No me jodas, tengo sueño.
-Y yo tengo ganas de coger.
-Pues ve y coge por ahí.
- ¿Cómo me puedes decir eso si supuestamente me amas?
-Aunque te ame no somos nada, puedes acostarte con toda la ciudad y a mí no me da derecho ninguno de exigirte.
- ¿Y si te doy el derecho?
-No quieres asumir esa responsabilidad.
- ¿Y si te doy el derecho de exigirme? - Volvió a preguntar ignorando lo que dije.
-No lo quiero. - Respondí para cerrar mis ojos y tratar de dormir.
-Entonces... ¿Salgo a coger? - Preguntó y esta vez me hizo la pregunta cuando estuvo frente a mí rostro. Se había subido a mi cama.
-No me tienes que preguntar. En serio quiero dormir Oriol, así que para de joderme.
- ¿Coges con alguien más?
-Oriol.
-Coges con alguien más, ¿Cierto?
-Oriol, te dije que quiero dormir. Si vas a buscar quién te folle, pues ve y hazlo. No es como si no pudiera sobrevivir si lo haces.
-Supongo que sí, llevas tiempo observando cómo salgo y entro de alguna relación, pero... ¿Coges con alguien más?
Ok.
O. k.
Joder, como molesta este tipo.
Irritado me incorporé en la cama y en un rápido movimiento estaba apresando su cuerpo entre el colchón y el mío. Su rostro mostró sorpresa y lo sentí estremecerse cuando soplé suavemente sobre sus labios.
Oriol cerró sus ojos y me fue inevitable no querer hacer algo más así que presioné nuestros cuerpos para que quedara menos espacio entre nosotros y lamí un poco desde su mandíbula hasta el contorno de su oreja y le susurré: -No tienes porqué saber nada de mi vida sexual, Oriol. El si tengo sexo o no con alguien más es enteramente problema mío.
-Es sólo una pregunta...
-Ya obtuviste una respuesta. - Dije para quitarme de encima suyo y volver a acomodarme como peso muerto en la cama. - Ahora, por favor déjame dormir.
-Si el amor es como dicen que es, no parece que estés enamorado, Jin. ¿Puedes tener sexo con alguien aún si amas a otra persona? ¿Es eso posible?
-Las personas tienen sexo sin amor ¿No es eso de lo que vives? - Pregunté y su expresión se volvió seria.
-Si estás enamorado de mi por qué no quieres follarme, ¿No es eso lo que una persona normal querría de su "crush"?
-Estas siendo grosero, Oriol. Si quieres coger pues simplemente vete con alguien y punto. Deja de joderme.
- ¿Y si quiero coger contigo? Puede sonar insensible lo que digo, pero carajos, Jin. Pido que me folles, no entiendo por qué complicas tanto las cosas si sabes que sé que estas enamorado de mí.
- ¿Quieres saber si cojo con alguien más? Bien, si cojo con alguien más. Estoy enamorado de ti y eso me tiene sin cuidado. Eres un maldito adulto y el hecho de que lo supieras y me estuvieras manipulando me toca las malditas pelotas. Para ser sincero contigo la última persona de la que me quería enamorar eres tú, pero ya está. Podrás pensar lo que quieras, pero si te follo o no es mi maldito asunto.
-Inesperadamente eso dolió, Jin.
-Eso es bueno, supongo. ¿Me dejarás dormir ahora?
-No, bésame, Jin.
- ¿Me dejaras dormir si lo hago?
-Sí.
- ¿Lo prometes?
-Sí.
-Bien.
Volví a incorporarme en la cama y como si fuera un niño bueno Oriol esperó a que lo besara.
Seré honesto conmigo mismo; siempre he deseado hacerlo.
Siempre he querido besarlo ya sea de forma lenta o ruda, pero hacerlo. Lástima que Oriol tuvo que joder mucho mis sentimientos como para que no quiera ceder a sus berrinches...
Así que, como todo un hombre de palabra, lo besé. En la frente sí, pero lo besé.
- ¡¿Qué demonios?! ¡Jin!
-Dijiste que te besara y lo hice. Ahora para tus mierdas y déjame dormir.
-Pero-
-Pero nada. - Finalicé la discusión y gracias a la vida que no siguió jodiendo y como si se tratara de una jodida broma de mal gusto escucho como la puerta es tocada.
Oriol va a abrir y tan pronto abre cierra la puerta. Con pereza lo miro extrañado, pero antes de siquiera pensar en decir algo mi celular empieza a sonar y lo tomo.
-"Estoy en la puerta, abre por favor. Tu compañero sigue siendo un niñato."
-Entiendo. - Con pocas ganas de hasta vivir me pongo de pie y abro la puerta. - Pasa, puedes tirarte en mi cama en lo que recojo mis cosas y nos vamos.
- ¿No íbamos a follar? - Me pregunta de la nada y lo miro como si le fuera a salir un tercer ojo en la frente.
-Oh cariño, tendrás que esperar tu turno. Yo ya vine a recoger ese paquete que tiene entre las piernas. - Le responde Lucas y los observé a los dos.
Lucas tenía cara de suficiencia mientras Oriol esperaba a que se carcajeara de esa "broma".
- ¿Eres siempre así de horrible para contar chistes?
-Usualmente soy muy bueno cuando suelo hacerlo, pero en esta ocasión no espero que te rías.
Definitivamente si las miradas matarán ya Lucas hubiese muerto.
Yo por mi parte cuando ya había tomado lo que quería me giré hacia ellos. - Ya estoy listo, Lucas. Oriol no me esperes despierto, y si vas a hacer un desastre en la habitación asegúrate de que no toquen mis cosas.
- ¿En serio te irás con él? - Pregunta notablemente molesto.
Sin mucho cuidado me acerco a Oriol y este no cambia su rostro molesto por nada, así que con una pequeña sonrisa burlona le doy un beso en los labios. – Sí iré y no regresaré esta noche.
- ¿Van a follar?
-Sí. - Le responde Lucas. - Puedes darlo por hecho. Yo follare con él por ti, Oriol.
-No lo necesito- Siseo entre dientes y por poco me río de ello.
-Sabes, para que no te sientas mal le diré a Jin que puede mencionar tu nombre cuando llegue al orgasmo. - El cinismo de Lucas me arranca una carcajada.
-Buenas noches, Oriol.
-Buenas noches, Jin.
Podré ser cruel, pero justo.
Oh sí señor.