Dogan decide ir con Kiraz, su hermano y Kerime con sus suegros.
- Ya vienen papi.
A Besim le entra sangre en los ojos y mira la correa que cuelga de la pared.
- No hacer nada en presencia de Ahrra, Besim.
Tan pronto como los chicos abren la puerta, los cuatro entran a la habitación.
- Buenas tardes.
Dogan y Gani los saludan cuando llegan y Kiraz y Kerime miran la correa que cuelga y se asustan.
- Oh, ¿ustedes dos la están mirando?
- Papá, sólo tienes que entender que ya no soy un niño al que hay que golpear.
- Piénsalo antes de desobedecerme Kiraz. Soy el jefe de esta casa y me debes obediencia.
- No te falté el respeto papi, pero no puedes interferir con mis sueños y mis deseos. Que, por cierto, soy dueño y de nadie más.
- Te mostraré quién es el dueño de tu testamento.
En un momento de furia, Besin agarra la correa y cuando estaba a punto de golpear a Kiraz con ella, la mano de Dogan agarra con fuerza la suya.
- No te atrevas a levantar eso por ella.
Dogan suelta con fuerza la mano de Besim y la pone delante de Kiraz.
- Ella me respondió mal Dogan. Es deber de mi padre corregirla.
- Ni modo, la tocas.
- Lo siento Ahrra las hijas son mías y las corregiré, te guste o no.
- Entonces pago para ver esto. Intenta tocar un cabello de Kiraz o Kerime para ver qué hago por ti.
- No te atreverías, ni siquiera siendo Ahrra.
- ¿No? Pruébalo, a ver si no me echan de Denizli.
Los hermanos Kerem y Kalil miran a su madre con preocupación.
- Entonces seré expulsado Ahrra, pero cumpliré lo que ya dije.
Dogan iba a perseguir a su suegro, pero Gani lo detiene.
- Cálmate hermano.
¿Qué tan tranquilo Gani? ¿No escuchaste lo que dijo?
- Tenemos que intentar convencerlo, no vayas perdiendo la cabeza.
Gani le habla en voz baja a su hermano.
- Puedes hacer conmigo lo que quieras padre mío, pero eso no cambiará mi forma de pensar.
- Te demostraré que estás equivocado. Asegúrate de eso.
- No será una paliza lo que hará eso, señor Besim.
Gani intenta intervenir.
- Lo siento Gani, pero Kiraz y Kerime cruzaron todos los límites. Kiraz incluso podría haber sido asesinado.
- Tu padre tiene razón. Podrías haber sido asesinada por mi honor, hija.
- Yo nunca permitiría eso, señora Tulay.
- Quiero saber algo señor Besim. ¿Has cambiado de opinión o voy a tener que sacar a las niñas de aquí hoy para que no las toques?
El padre de Kiraz, todavía muy nervioso, no acepta negociaciones.
- Como les dije antes, incluso pueden expulsarme de la ciudad de Dogan, pero tan pronto como ustedes dos se vayan de aquí, cada uno de ellos recibirá una paliza hasta arrancarles la piel.
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Matrimonio forzado con una Ahrra
Roman d'amourEn la ciudad de Denizli en Turquía, hay una sociedad que sigue patrones tra! dicionales, siendo x,dirigida por un Ahrra de un Cla:n.≠: Estos Ahrras son descendientes de un pueblo kurdo, que en el pasado vivió de manera muy estricta, aceptando los a...