Práctica

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Al día siguiente, como tokijiro dijo Yuki se fue a la habitación de Keiji.
-Esta es la última caja,¿No? - preguntó Keiji.
-Sí, gracias por ayudarme - dijo Yuki.
-No es nada, además, el lado positivo de todo esto es que vas a poder estar en mi habitación como dos semanas- dijo Keiji sonriendo.
-Tienes razón - dijo Yuki.
Yuki terminó de colocar sus cosas en la habitación de keiji.
-¿Te apetece hacer algo? - preguntó Keiji.
-¿Comer cuenta? - preguntó Yuki.
-Eres de lo que no hay - respondió Keiji sonriendo - vamos a la cafetería anda -
-Vale- dijo Yuki sonriendo
En la cafetería ambos ordenaron su comida y se fueron a una mesa que había libre.
-¿Quieres que vayamos al centro comercial más tarde? - preguntó Keiji
-Vale, puedo preguntar el por qué quieres ir al centro comercial- dijo Yuki.
-No -dijo Keiji con su típica sonrisa burlona.
Ambos terminaron y se fueron a la habitación.
Yuki se encontraba recostado en la cama de Keiji, ahora también suya, y Keiji puso sus brazos rodeando la cintura de Yuki, se acostó arriba suya y Yuki empezó a acariciarle el cabello.
-Keiji - lo Llamó Yuki, recibiendo por respuesta un gruñido del otro.
-Cuéntame sobre tu familia, solo si quieres, nunca me has dicho nada sobre tu familia- dijo Yuki.
-Bueno- Keiji cerró los ojos sintiendo la mano de Yuki acariciar su cabeza- ¿Qué quieres saber? - preguntó Keiji.
-¿Te llevas bien con tu familia? - preguntó Yuki aún con Keiji acostado encima suya.
-Tengo dos hermanos mayores, mi madre murió a causa de una enfermedad mortal, mi padre también murió, pero a él lo asesinaron en casa, solo estábamos él y yo, me protegió con su vida, eso pasó cuando tenía seis años, desde ahí mis hermanos se meten conmigo por la muerte de mi padre, diciendo que si yo hubiese sido más fuerte, mi padre no habría muerto, desde la muerte de mi padre mis hermanos y yo nos hemos criado con mi abuela, pero ella también murió, estaba muy mayor y hace dos años falleció, desde entonces perdí contacto con mis hermanos, ellos son más fuertes que yo y este año se han convertido en héroes, pero no importa, pienso superarlos y ser el número uno- dijo Keiji aún con los ojos cerrados, notó como Yuki lo abrazaba.
-Siento lo de tus padres y tu abuela -dijo Yuki.
-Tranquilo, ya lo superé - dijo Keiji aún acostado sobre Yuki.
-Te gusta que te den mimitos a pesar de ser un perro rabioso que muerde y maldice a todo el que se le acerca - dijo Yuki sonriendo y volviendo a acariciar a Keiji.
-Y a ti te encanta estar conmigo a pesar de ser una persona demasiado fría y borde - dijo Keiji.
-¿Quieres saber algo más? - preguntó Keiji.
-Sí, yo... ¿yo solo t-te atraigo? -preguntó sonrojándose Yuki.
-No, ¿por? - preguntó Keiji aún sobre Yuki.
-C-curiosidad- respondió.
-Te dije que a mí no me engañas, ¿Qué pasa? - preguntó Keiji sentándose en frente de Yuki.
-N-nada - dijo Yuki apartando la vista mientras escondía su cara en sus piernas.
-Yuki - lo llamó
Yuki solo levantó un poco la cabeza, lo suficiente para mirarlo por encima de su pierna, Keiji estaba serio, más de lo normal.
-Dime -dijo Yuki
-¿Te ha pasado algo? ¿He hecho algo yo? - preguntó Keiji.
Yuki no habló
-He sido yo entonces, ¿Qué he hecho? - preguntó Keiji con una cara un tanto triste.
-¡No! Tú no has sido, soy yo - dijo Yuki con los ojos cristalinos y se tiró encima de Keiji abrazándolo escondiendo su cabeza en el pecho de Keiji.
-Entonces qué es, dímelo de una vez, sino no podré ayudarte -dijo Keiji acariciando la espalda de Yuki.
-Es qué haces tan buena pareja con Luka, su don es mejor que el mío y más para luchar a tu lado, además de que es más guapo y alto que yo, ver como luchasteis juntos y veros sonreír me causó una inseguridad muy grande, es que tiene lógica, ¿has visto mi cuerpo? , está lleno de moratones, cicatrices -dijo susurrando lo último mientras lloraba pero Keiji lo escuchó.
Keiji separó a Yuki de él, le miró a los ojos y limpió sus lágrimas.
-Prométeme que me dirás todos los problemas que tengas, sobre tus inseguridades, eres hermoso y Luka no se te compara en nada, además de que no lo aguanto, es un imbécil que solo sabe presumir, hay que empezar a valorarse más, ¿vale? - dijo Keiji dándole un besito en la frente a Yuki.
-Yuki- lo llamó Keiji.
-¿Qué? - preguntó
Keiji cerró los ojos suspirando - ¿Quieres ser mi pareja? - preguntó Keiji nervioso, pero disimulando muy bien.
-Sí- dijo Yuki siendo besado por Keiji, este de levantó, subió a Yuki encima del escritorio, el beso fue aumentando cada vez más.
Durante el beso la habitación se congeló la mitad y la otra mitad ardía en llamas, pero el hielo y fuego se detuvieron, los portadores de esos dones no se dieron cuenta hasta que la puerta se abrió, dejando ver a un Tokijiro serio y a una Reggina dando saltitos de alegría.
Ambos chicos se separaron sonrojados al oír la puerta y miraron hacia ella con los labios rojos.
-Ahora qué - preguntó Keiji aun con las manos en la cintura de Yuki y este encima del escritorio, se dio cuenta del estado en el que se encontraba la habitación -Mierda - dijo Keiji bajando a Yuki al suelo.
-Parece que ya habéis cerrado el pacto de ser paladines y por lo que veo ha sido por amor - dijo dando saltitos de felicidad Reggina.
Yuki y Keiji se miraron y se dieron cuenta que habían aceptado ser paladines con la pregunta que él más alto le hizo al portador del hielo.
-Y qué si es así - dijo Keiji
-Pues qué deberéis entrenar como paladines - dijo Tokijiro - En dos horas al campo de batalla, irá toda la clase - dijo Tokijiro.

Bajo la luz de la LunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora