Paris:
-Paris, Paris despierta tenemos que ir a la escuela-me decía Scott, pero tenía demasiado sueño para levantarme-Vamos Paris, levántate, llegaremos tarde.
-Ahh no importa, no quiero ir-dije apenas sin abrir los ojos y metiéndome más entre las sábanas.
-Vamos arriba-me dijo cargándome en sus brazos, me llevaba a algún lugar del departamento, yo tenía demasiado sueño como para detenerlo. Me puso de pie en algún lugar, no se que lugar sea, se sentía que estaba en un lugar húmedo olía al Shampooo que Scott siempre usa, al instante sentí que algo muy frio caía sobre mi cabeza, comenzó a caer cada vez más, agua, estaba en la ducha, comencé a despertar, estaba empapada de agua fría-tu no querías ir a la ducha así que yo te traje, así que ahora dúchate porque yo no te duchare si eso es lo que piensas.
-Ja-Ja, muy gracioso, es la peor manera aparte de todas con las que me has despertado-le dije ya despierta, el solo se limito a reír y salió de la ducha.
Al terminar mi rutina de la mañana me dirigí a la cocina para desayunar
-No hay tiempo para desayunar Paris-me dijo Scott llevándome de la mano hasta el coche.
-P-Pero mi mochila-le dije mientras Scott subía al auto.
-Aquí esta tu mochila, las llaves, tu collar favorito y tu pulsera, un peine y todo lo necesario para peinarte-me dijo colocando cada cosa en mis piernas.
-¿Para que los materiales para peinar?-pregunte.
-Para que te peines en el colegio-me dijo por lo que me vi en el espejo del auto y no me había peinado, el encendió el auto y nos dirigimos al colegio.
Llegamos al colegio.
-Mi estomago ruge de hambre-le dije sentada en una mesa.
-por eso le pedí a uno de mis amigos que de camino acá te comprara algo. Mira allá viene-me dijo señalando a la dirección del chico que venia caminando hacia nosotros, el le entrego mi desayuno, Scott le pago y me entrego mi desayuno, panques con jalea de fresa y un capuchino. -¿Esta buena?-se refería a la comida
-Si, aunque el capuchino que hacemos en la cafetería es mejor que este pero gracias-le dije, yo desayunaba mientras Scott me peinaba.
Faltaban 5 minutos para entrar a clases y ya me había despedido de Scott y estaba en mi casillero sacando y metiendo libros para luego del timbre ir a clase de literatura y después a educación física (E.F.).
-Hola angelito-me saludo Dylan caminando a mi lado.
-Hola Dylan-le dije.
-¿Y eso? ¿No me dirás que no te diga angelito porque tu nombre es Paris?-reí
-No quiero discutir contigo, no estoy de humor.
-¿Porque?
-Scott me despertó con agua.
-¿Te tiro agua mientras dormías?
-No, me llevo a la ducha y encendió la regadera y luego baje a desayunar pero no quiero ya que vendríamos tarde en el instituto, así que no desayune hasta llegar aquí y la verdad no estoy acostumbrada a comer panques, cereal, tostadas o esas cosas, casi siempre desayuno fruta.
-¿Fruta?
-Si, me encanta la fruta.
-Que bien, oye... y ayer ¿Por qué no quisiste que te llevara a tu casa?
-No quería molestarte.
-No era ninguna molestia, yo me ofrecí a llevarte, no tenía porque molestarme.
ESTÁS LEYENDO
Si no te hubiese conocido.
Teen FictionParís Evans es una chica de 16 años que vive en un departamento en Nueva York, ella no tiene padres, ni tíos, ni abuelos, solo a su hermano mayor de 18 años llama do Scott y sus amigos y compañeros de trabajo, su padre murió hace 11 meses y ahora, s...