Crowley

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********** Antes del inicio *******

En la inmensidad de la nada un ángel de cabellos rojos, presenciaba el nacimiento del universo, sus ojos llenos de esperanza, iluminados por el brillo de las explosiones provocadas por el nacimiento de las nuevas estrellas.

Miro a su lado derecho y el ángel a su lado de cabellos blancos disfrutaba del espectáculo, agradecía compartir ese momento con él.

Recordando y agradeciendo este momento a la todo poderosa,

"Dios, quiero pedirte un favor, deja que el pequeño ángel Aziraphel este presente en el nacimiento del universo"

"enserio quieres pedirme solo eso, ángel mío, tu puedes pedir lo que quieras y lo tendrás, más en cambio solo pides la compañía de un hermano tuyo"

"no es solo un hermano dios, pero, si me lo permites, quiero que el este a mi lado en el inicio"

"todo por ti, mi ángel"

Desde el principio de los tiempos Baraquiel se mostro interesado en aquel ángel, distraído y nervioso, algo tímido pero amable y cariñoso, su mirada lo atrajo al momento de conectar con la suya, bastaron unos segundos para caer ante él.

Era el primer favor que le pedía a dios, nunca antes tuvo la necesidad de pedir alguno, pero, él lo Valia.

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-solo quiero saber, cual es el propósito de crear un universo, si después ya no existirá, trabaje muy duro en su creación, no quiero que mi trabajo solo sea un cuadro para que la gente lo observe desde su ventana

-Baraquiel, todo tiene un propósito, o se hace por algo, acaso crees que yo, haría las cosas solo porque si

-no quise decir eso, solo quiero saber ¿Por qué?

-preguntar es algo que no deberías hacer

-pero...

-ahora ve y has lo que se te ha asignado

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- ¿qué está pasando Miguel?

-Samael ha enfrentado a dios, creo una revolución y ahora va a caer

- ¿caer? ¿A dónde?

-al infierno, dios lo ha creado para que el y sus cómplices vivan el resto de la eternidad.

-pero como, Samael es el favorito de dios, es el ángel más bello.

-su avaricia de poder lo arillo a esto, no hay nada que se pueda hacer.

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-Samael, tienes que recapacitar, ¿Cómo vivirás desterrado en el infierno?

-Baraquiel, solo quiero respuestas, no estoy de acuerdo con la todo poderosa, no me gustan sus formas de hacer las cosas, ¿acaso tu nunca te has preguntado el porqué de sus acciones?

-bueno, sí, pero...

-Ten cuidado Baraquiel, la duda te traerá muchos problemas, me dolería ver que tomaras el mismo destino que el mío.

-no, yo no puedo irme de aquí, hay alguien a quien quiero proteger

-cuídalo, como si fuera tu más grande tesoro, el cielo puede ser un lugar lleno de luz, pero, también es el lugar más oscuro que existe.

Samael cayo junto con los ángeles que pensaban como el, Baraquiel, por su lado, observaba como cientos de ángeles caían siendo recibidos por una especie de líquido negro, el cual, quemaba sus hermosas alas blancas para condenarlos a una eternidad en las sombras.

De pronto una mano fría se posó en su espalda y de un segundo a otro el caía también.

- ¿Qué? ¡No!, ¡yo no he hecho nada malo, dios por favor ayúdame!, ¡por favor!

Su cuerpo se sentía cada vez más pesado, sus alas ya no le respondían, estaba cayendo y ya no había salvación "Aziraphel", en lo único que podía pensar era en su ángel, estaría solo y no habría quien lo protegiera.

Cuando al fin se encontró en la oscuridad, salió del charco de azufre, pensó que tal vez sus alas al igual que las de los demás ángeles, se quemarían, pero, las suyas seguían ahí, ya no tenían la misma fuerza, pero sin duda, seguían ahí, su color había cambiado, "negro" pensó.

Se poso sobre sus rodillas y empezó a rezar "porque dios, yo siempre estuve contigo, ¿acaso mi pecado fue solo dudar sobre el destino de mi creación?" "por favor, déjame volver", "mi ángel, quiero estar con el" "déjame volver con el" implorando por regresar, las lágrimas salieron de sus ojos.

Ojos que se volvían cada vez más amarillos, acortando su vista, volteo su cabeza al cielo, viendo su creación, sus estrellas, sus adoradas estrellas, conforme sus ojos se volvían más y más amarillos dejo de verlas.

Su castigo no fue perder sus alas, su castigo fue perder su visión, para no ver jamás su adorada creación.

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-tienes que subir, dios ha creado un jardín y ha puesto dentro de el a dos humanos, sube y causa problemas

Odiaba el infierno, era peor que el cielo, solo se dedicaban a ser malos y quejarse de sus desgracias "haber pensado eso antes de revelarse"

Siguiendo las ordenes, tomo su forma de serpiente y se dispuso a causar problemas.

Al subir, se acercó a Eva no quería que dios la causticara así que solo le sugirió comer una manzana, total, que problema habría por comer solo una.

"mala idea" dios los había castigado, desterrándolos fuera del jardín del edén, "que tienes tu con desterrar a la gente" pensó "porque no simplemente romperles una pierna o algo.

-Necesito ver a dónde irán, de algún modo, tengo la culpa de que los estén sacando de aquí.

Subió hasta lo más alto por la puerta del este y al llegar no lo podía creer, su ángel, su adorado ángel estaba ahí.

"tal vez dios escucho mis suplicas y lo puso en mi camino" ....... "no, no lo creo"


y asi empezo todo.




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