¿A Donde Vamos?

°12° ¿¡Solos!?.

Solo su nombre me puede hacer sentir mal...

 Melody Jelene Evans.

 Es el nombre de ella de mi hermana, era mayor que yo por solo 4 años, tenía las mejores calificaciones, era tan buena, con todo, era la mejor porrista que hubo en su facultad, pero un día de repente ella se marchó llevándose su alegría con ella. Dominaba el inglés a la perfección, no tenía problemas con las personas, pero sí consigo misma... 

La carta:

 Una pequeña carta para mi hermanita pequeña Nazli, será mi orgullo hermana está comenzando la secundaria, te amo... 

Nos vemos en el viejo árbol como todos los años Naz... 

Me di cuenta más abajo que había una letra diferente a la de Melody fruncí un poco el ceño y trate de leerla, ya que no se podía leer... 

Pronuncie en voz alta—Ella fue lo más preciado para ti, nos vemos el viejo árbol, tengo más carta—. Me asusto un poco, pero a la vez me dio curiosidad, siento una mano el mi hombro y volteo de golpe.

—Joder tengo una hora llamándote ¿te sucede algo?—quiso saber Sule, pero la ignoré y comencé a perderme en mi mente a caminar sin sentido algunos como si me fuera perdido me balanceaba un poco como si fuera a caer, pero no me mantenía firme aún mi pecho bajaba y subía un poco rápido, ya que no sentía que me estaba cortando la respiración.

—Naz deberías sentarte está un poco pálida— hablo Susan en voz alta.

me agarre de marco de la puerta para volver a tener el equilibrio, solo quería ir al viejo árbol donde solía encontrarme con ella cuando no teníamos nada que hacer. Saque mi teléfono para llamar a Milán, ya que el conocer donde queda en viejo árbol y sabe lo que sucedió con mi hermana mayor me lleve el teléfono al oído...

—Milán ven, por favor, necesito tu ayuda... Es muy importante.— pronuncié poco a poco porque tenía un nudo en la garganta cuál trataba que no me quebrara la voz.

—De acuerdo Naz esperarme... 

Fue lo único que me dijo ante que me colgara la llamada, me apoye de la pared pegando mi espalda de ella y respirando con calma para no llorar delante de mi madre, no quería preocuparla, no quería que me quitara el privilegio saber la verdad de la muerte de Melody. No sabe como destrozo, no haber sabido quién fue el culpable porque jamás fui capaz de matarse así misma.

****

El viejo árbol era su lugar preferido, un árbol que es grande, el cual tiene un columpio de madera, el que papa había puesto para nosotras aunque habíamos nacido en Barcelona teníamos una historia en Madrid, pero quedaron tantas hojas blancas sin llenar...

—Estrelladisa te llevaré a tu departamento para que descanse un poco— anuncio Milán poniendo su mano en mi hombro.

 Deslice mi mano por el árbol donde se encontraba una M y una N que significaba Melody y Naz era un silencio que había mientras la brisa hacía que mi cuerpo se remeciera con ella, solo quería sentir un abrazo de ella y preguntarle ¿por qué nos dejó?... Me giré en mi propio eje y abracé a Milán para sentir su calor, tenía ganas de llorar, pero no lloraba, era un vacío que tenía por la falta que me hacía ella.

—No sabe cuanto extrañaba tus abrazos estrelladisa—menciono Milán.

—Yulia se molestara contigo por no estar con ella...

—Naz te recuerdo lo que te dije— soltó el mientras yo me separaba de él.

 Agache la cabeza, ya que no podía mirarlo a la cara— No quiero estar con alguien en este momento y mucho menos con mi amigo de la infancia—. Intento tomar mi mano, pero retrocedí para evitarlo, él se acercó un poco, al mismo tiempo retrocedí hasta queda pegada del árbol.