ONE-SHOTS

•15• 🌸OMEGAVERSE 🌸1/2

La temporada del 2011 recién arrancaba para el Real Madrid, todo el equipo se encontraba concentrando en un hotel ya que en 3 días disputarían un partido con el Sevilla.
Ya estaban todos instalados en el lugar, por errores de administración se decidió que las habitaciones se compartan entre dos, tanto jugadores como entrenadores.
A Mourinho y a Karanka les había tocado juntos, para desgracia de los dos, ya que en secreto gustaban del otro pero no tenían el valor de admitirlo o hacer algo.

Mourinho era de los alfas más cotizados en el mundo del fútbol, por su atractivo, su carácter y su fuerte aroma a vino y café que le daba una airé de elegancia, haciendo que cualquiera se enamoré o se sienta amenazado.
Mientras que Aitor era un Omega de gran atractivo y con un dulce aroma a caramelo y vino dulce que en su etapa de futbolista fue de los más pretendidos, tanto por su belleza como por ser de los pocos omegas que llegaban al fútbol de élite.
Los dos eran solteros, Jose había estado con una gran cantidad de omegas en su vida pero nunca se involucró sentimentalmente con alguno y Aitor había tenido pocas relaciones y siempre con mujeres omegas que nunca lo quisieron lo suficiente.
El alfa y él omega desde que se conocieron sintieron una fuerte atracción pero nunca habían hecho algo al respecto porque no pensaban que el otro lo veía con ojos que no fueran de amigos.
Jose había dejado sus cosas en la habitación y luego salió a caminar por el lugar, no podía estar tanto tiempo encerrado solo con el vasco porque sabía que no se podría controlar. Aitor por su lado se había quedado viendo televisión, no tenía ganas de hacer mucho y que el alfa lo evitara lo desanimaba.
Llegada la noche todo seguía igual, Jose no volvía y Aitor se estaba por bañar, pero algo que no esperaba paso, su caótico celo había llegado mucho antes de lo esperado, sensibilizando su cuerpo, haciendo que se ponga nervioso. No era el mejor lugar para estar así y al parecer sus píldoras inhibidoras ya no funcionaban por lo que no tenía escapatoria. Rápidamente empezó a soltar fuertes feromonas dejándolo al descubierto con cualquier alfa que pasara por el lugar, sería su perdición si alguno lo olía.
Inquieto en su lugar daba vueltas en la habitación, sintiendo como su temperatura subía y cada vez estaba más lubricado, su ereccion también era evidente y terriblemente dolorosa, por eso se la acariciaba por encima de la ropa, deseando que todo esto termine.
Trataba de pensar en otra cosa pero su celo era cada vez peor y su alrededor que estaba lleno de pertenencias de Mourinho con sus feromonas impregnadas y eso no ayudaba, se excitaba cada vez más, soltando pequeños gemidos al sentir escalofríos en su polla.

Por los pasillos del hotel caminaba Jose cuando frenó en seco, habían detectado las fuertes feromonas de algún omega en celo. Era tan exquisito el aroma a caramelo y vino dulce que sus instintos no tardaron en aparecer, llevándolo a buscar el lugar de donde eso provenía.
Quedó sorprendido cuando se dio cuenta que las feromonas salían del interior de su habitación ¿Serían las de Aitor? La respuesta la sabía perfectamente, conocía su aroma más que nadie pero nunca lo había percibido de una manera tan fuerte.
Sin dudar abrió la puerta y se dispuso a encontrar al omega, no tardó mucho ya que el olor le indicaba que estaba en la habitación. Al llegar se topó con Aitor de frente, este evidentemente en celo, se asustó e instintivamente tapó su miembro con su mano.
- Jo-jose ¿qué haces aquí? - dijo temblorosamente, tenía mucha vergüenza de que su entrenador lo vea en celo.
Jose no respondió y en cambio soltó feromonas, ver al omega así y tratando de taparse lo volvió loco, oscureciendo su mirada.
- ¿Qué pasa Aitor? - dijo mientras lo miraba de pies a cabeza.
- Jo-Jose y-yo, disculpa - dijo avergonzado - Mi celo se adelantó - estaba demasiado nervioso, sentía como las feromonas del mayor lo embriagaban, volviéndolo más sensible y necesitado de un alfa.
Las hormonas no lo dejaban pensar y desde que había entrado Jose no hacía más que dilatarse.

Y Mourinho que no pensaba en nada más que hacerlo suyo desde que lo conoció, se aproximó - déjame que te ayude entonces - le ronroneo en el oído, para luego alejarse y darle un suave beso en la comisura de los labios, sorprendiendo al vasco.
Jose lo comenzó a besar mientras le metía la mano en los pantalones, generando que Aitor tiemble y pose las manos en sus hombros para no caer.
Lo tocaba y se escondía en su cuello para olfatear el dulce aroma que lo extasiaba, no recordaba alguna vez haber olido algo tan delicioso, las feromonas que soltaba el vasco lo embriagaban tanto que no se contuvo y en un rápido movimiento lo dio vuelta y se pegó a su cuerpo, recorriéndolo con sus manos para después bajarle los pantalones y ponerse un condon.
Aitor, estaba cada vez más caliente y al sentir que Mou frotaba su ereccion en su entrada, se encorvó hacia atrás para apurar la penetracion, tomando el miembro por la punta antes que Jose lo agarrara de la cintura y lo penetrara fuerte, llenándolo por completo.
Aitor gimio bastante alto y cerró los ojos, era la primera vez que lo penetraban. Con las yemas de los dedos toco delicadamente su vientre, dándose cuenta del pequeño bulto que se le había formado y que se movia cuando Jose empezó con un vaivén lento, era su miembro que le empujaba el interior.
Jose con los segundos no aguanto y aumento el ritmo, moviéndose incontrolablemente ya que los gemidos sutiles del omega lo ponían como loco igual que la manera en la que este cruzaba sus piernas, aparentando sus muslos cada vez que lo embestía con dureza. Lo agarro de la cintura y lo embistió una y otra vez, chocando sus cuerpos tanto que Aitor no aguanto más el placer y masturbando su miembro resbalaloso lentamente, se vino manchando el suelo, gimiendo el nombre del portugués, que lo abrazó y no paro de moverse teniendo al omega con sus piernas temblando.
Lo llevo hasta la cama sin salir de su interior, lo acostó boca abajo y lo siguió follando por varios minutos, tomándole el cabello y bajando a besarle el cuello, viendo como sus embestidas hacían que el más alto tuviese espasmos y se removiera, gimiendo su nombre .
Casi llegando lo volteo dejándolo de costado y se acosto sobre el, uniendo sus rostros para besarlo y tomarlo suavemente por el pelo largo. Aitor lloriqueaba en su boca pidiéndole piedad pero Jose seguía dándole en su lugar sensible hasta sintió llegar su orgasmo y se vino, embistiendo muy rápido y sin parar, acabando en su condon. Luego de bombear salió del interior del omega, que había acabado otra vez manchándose las piernas.
Aitor había quedado exhausto y rendido en la cama, con su líquido chorreando por sus piernas y Jose empezó a observarlo, se veía tan vulnerable que no quería hacer otra cosa más que protegerlo y acariciarlo, así que tomo una manta y lo cubrió. El vasco casi dormido se acurrucó en la tela, sintiendo como las feromonas del portugués lo embriagaban.
Jose después de limpiarse volvió a la habitación, no podría ser tan mal educado e irse, así que sin despertar al otro se subió a la cama y lo tomo entre sus brazos, aún envuelto en la manta y lo acostó sobre su pecho, abrazándolo. Quien diría que terminaría en esa situación con su asistente favorito, no lo podía creer pero lo que habia pasado más el amor que siempre sintió por el vasco lo hicieron estar seguro de que quería que fuera su omega.

A la mañana siguiente Jose se levantaba olfateando las ligeras y dulces feromonas del omega, este estaba dormido profundamente y se abrazaba al alfa, pasándole una de sus piernas por su cuerpo y apoyaba su cabeza en el. Ninguno de los dos podía evitar soltar feromonas en presencia del otro, sin imaginárselo se estaban enamorando, más que nada Jose que desde que lo vio solo quería cuidarlo y protegerlo como su omega.
Al parecer Aitor tenía cero ganas de levantarse pero Mou tenía hambre así que después de acariciarlo lo despertó.
- mmm - se estiraba el vasco sobre el.
- Aitor hay que levantarse - dijo Mou acariciandole el cabello.
Aitor sentía que Jose era su alfa y no quería soltarlo entonces subió su cabeza para besarlo, era lenta la succión que hacía con boca sobre el labio inferior de Jose, para luego pasar al superior sacando un poco su lengua para unirla a la del portugués, que le correspondió al instante de la misma manera lenta.
Estuvieron un rato besándose, ahora solo quedaba saber que iban a hacer con los 3 días de celo que le quedaban al omega.

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Holiiii, nunca había escrito un Alfa x Omega 👉👈 disculpen si no se mucho del tema.

Comenten si les gusto❤️

Acá esperando que Aitor cumpla los 50 el lunes🥹🫶🏻