Teen Romance [Ryusei Satou]

Trece

A Hayashi le habría encantado usar un yukata para el festival al que iría con Ryusei, pero lamentablemente no tenía uno. Así que optó por ponerse una falda de mezclilla azul, una blusa negra con un estampado y unos calentadores. Se recogió el cabello en dos rodetes y se dejó un par de cabellos sueltos.

Tomo su bolso y comenzó a bajar las escaleras, pues Ryusei la esperaba afuera. Apenas lo vio quedó impactada, pues venía en su motocicleta y si sus padres los veían iban a matarla.

—Idiota—susurró ella para si misma.

—¿Idiota?—le preguntó el chico cuando finalmente estuvo cerca de ella.

—No es nada, vámonos—dijo en un resoplido.

El chico se levanto de la moto, la tomo de las mejillas y comenzó a besarla suavemente, para luego abrazarla.

—Yo también te extrañe, Hayashi—luego se acercó a su oído para susurrarle un—Te ves hermosa—

El leve sonrojo se hizo presente en su rostro, sonrió y volvió a besar a su novio.

—Esperaba verte en yukata—admitió el chico.

—No tengo uno—dijo la chica haciendo un puchero.

—El próximo año será—

La chica solo asintió y sonrió, pues no se podía creer que el chico se viera a futuro con ella. Ambos se montaron en la motocicleta y comenzaron a andar.

La brisa del aire les pegaba en el rostro, la chica tenía las manos alrededor del torso de Ryusei y la cabeza pegada a su espalda. No tardaron demasiado tiempo en llegar, cuando estuvieran ahí finalmente se reunirían con Baji, Chifuyu y Cho.

Se bajaron de la motocicleta y comenzaron a caminar un poco alrededor mientras se tomaban de las manos.

—Comamos helado—dijo el pelirosa emocionado.

La chica solo asintió y comenzó a perseguir a su novio quien la estiraba del brazo y caminaba rápidamente al puesto de helados.

—¿No deberíamos buscar a tus amigos?—

—Hay prioridades—aclaró.

La chica solo soltó una leve risita y siguieron andando hasta que finalmente pararon en el puesto de helados, compraron uno solo para compartirlo entre los dos y se sentaron en una de las pocas bancas que estaban disponibles.

—Me preguntaba que planes tendremos juntos para el verano—dijo el chico.

—Deberíamos de ir a la playa, o tal vez tener un pic nic —sugirió la chica.

—Te cocinaré—dijo este con una sonrisa.

—¿Sabes cocinar?—

—¡Claro!—respondió con una sonrisa—Cuando era pequeño mamá casi nunca estaba en casa—dijo para luego probar un poco del helado—Así que tenía que arreglármelas yo solo—

—Ya veo—dijo la chica quitándole la cuchara para luego probar el helado. Se sonrojó al darse cuenta que se habían besado indirectamente, cómo si nunca antes se hubieran besado.

Ryusei se percato de esto y comenzó a reírse a carcajadas.

—No es gracioso—se quejo la pelinegra.

—Claro que lo es—

La chica tomó un poco de helado y se lo acercó a la boca al chico, quien apenado lo comió y no pudo evitar no sonrojarse, nunca antes le habían dado de comer en la boca, cosa que si había visto hacer a Hayashi con sus amigas. La pelinegra sonrío burlonamente e intento contener una carcajada.