Apostemos... (Dakaretai Otoko)

CAPÍTULO 11

"Salida"
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El mayor despues de ducharse se estaba yendo del departamento del menor en un uber tal como le prometió, al principio quiso negarse pero al final ahí estaba, miró por la ventana con ojos perdidos.

-(Finalmente.. lo hice con Azumaya..)

Apretó uno de sus puños, algo nervioso al recordar lo intenso que fue el rubio con el, sus toques y su voz..

-(Perdí mi virginidad con el.. bueno.. no es como que haya afectado a mi "pureza" o una de las estupideces que dicen por eso, pero.. jamás creí que lo hubiera hecho con un tipo como el, en estas circunstancias.)

Una vez llegó a su casa dejo su mochila y sus zapatos en la entrada como de costumbre, se fue a su habitación y se tiro a la cama boca abajo.

-(Mi corazón estaba latiendo como loco, mis manos sudaban y no podía parar de temblar.. esto es verdadera adrenalina, ¿no? Ni en peleas me sentí tan agitado.)

Vio su celular y entre sus contactos estaba el rubio, volvió a leer la pequeña conversación que habían tenido hoy, en realidad no hablaban casi nada por ahí ¿Qué iban a hablar, de todos modos? En persona hablaban apenas un poco más y solo para encuentros.. salió de contactos con una mirada algo molesta.

-(Es un imbécil.. pero.. creo que yo también me estoy comportando como uno.. ¿Qué estoy haciendo si quiera? ¿Por qué simplemente no detengo esto ya?..)

Volvió a encender su celular y comenzó a escribir.

Mensajes.

Borrador: Junta, quiero acabar con toda esta tontería, ya debe ser ridículo a este punto probar algo teniendo sexo, solo te estas burlando de mi y..

Borro el mensaje antes de enviarlo, estaba enojado consigo mismo.

-(¿Qué mierda me pasa?)

Tiro el celular en su mesita de noche y oculto su rostro en las almohadas.

-(La apuesta básicamente es que no caiga ante el, debo seguir firme.
No tengo que rogarle, una vez pase el mes completo ganaré y no volveré a lidiar con el, mi vida seguirá tranquila como siempre... pero.. por qué eso es tan..?)

Finalmente se quedó dormido sin terminar las preguntas en su cabeza hasta llegar al día siguiente..

Era horario de almuerzo y justo iban a salir todos a comer, Takato sintió como alguien tocaba su espalda y se volteo, esperando a alguien aleatorio pero..

-¿Hana?

-Takato-san.. como estás? ¿Todo bien?

Pregunto la menor con una sonrisa preocupada, el mayor le sonrió un poco.

-Estoy mucho mejor, gracias.

-¡Me alegro..!

Bajo la mirada, pensando en que quizás quien pudiera haber tocado su espalda fuera el.. ¡No! Ya estaba comenzando a hartarse de pensar en tonterías.