Levemente abrí los ojos, escanee la habitación por alguna razón ahora la notaba más alta de lo habitual; levemente talle mis ojos y levante la cara, seque con el ante brazo la saliva que estaba escurriendo de mi boca; al parecer la almohada no era una almohada, era el cuerpo de Miguel. Mis mejillas se sonrojaron al recordar lo que había pasado, mire el reloj de la mesilla eran las 12:14 de la madrugada, Miguel seguía recostado se veía increíblemente bien mientras dormía.
Me acerque un poco a su cara y el abrió los ojos, me sonroje de forma rápida cuando sentí como me tomaba de la cadera para acercarme a el.
—Vuélvete a dormir con un carajo.—Miguel dejo un leve beso sobre mis labios.—Hazlo porque no me estoy aguantando las ganas de volver a hacerte mía.
Sentía como mis ojos se abrían de par en par por su comentario, al igual que por su leve beso, sonreí para recostarme de nuevo, el no soltó mi cadera mientras escuche como se acomodaba para seguir durmiendo.
Miguel merecía descansar, usualmente no lo hacía porque en sus horas de descanso prefería ir a visitar las distintas tierras, para ver si no había alguna anomalía, pero cuando en verdad el cansancio lo vencía dormía durante doce horas enteras, el problema era que dormia en mi cama, teniendo su propia habitación y había veces en que yo tenía que irme a su habitación a dormir, pero si me encontraba a mi en la cama me obligaba a quedarme con el.
Mientras volvía a tratar de dormir; ese sueño que más bien era una pesadilla dejaba sus tintes sobre mi, era extraño pero soñaba con mi hermoso universo en el cual estaba tan tranquila pero así como la tranquilidad recorría mi cabeza también lo hacía la desgracia; primero veía a mi familia morir, después miraba mis manos llenas de sangre con Norman frente a mis ojos y detrás de mi estaba Harry con una soga en su cuello, el me estaba pidiendo ayuda pero yo no hacía nada porque era como tener mis manos atadas; después de todo eso estaba yo sola, en una habitación mientras miraba todo el exterior comenzaba a desaparecer frente a mis ojos, como si se estuviera borrando.
Ese sueño me preocupaba sobre todo porque no sabía exactamente que había pasado con mi tierra, no sabía porque no la podía visitar aunque fuera simplemente para dejar flores a mis seres queridos.La calma me invadió al sentir la fría mano de Miguel en mi espalda, en mi sueño todo cambiaba y ahora estaba con el besándome levemente de forma cariñosa, de una forma a tan tranquila en la que me hacía olvidar por un momento trágico de mi vida, pero solo era un sueño, nada más que eso, porque nunca lo olvidaría por más que lo intentara no lo haría.
Al volver a abrir los ojos mi mirada se dirigió al reloj ahora era las 6:50 de la mañana, me levante rápidamente mareandome un poco por la forma en que lo hacía; Miguel se despertó al ya no tenerme en sus brazos, a tientas comenzó a buscarme hasta que abrió bien sus ojos, me miro de pie dirigiéndome al baño.
—¿A donde vas?—Pregunto mientras se sentaba tallado sus ojos.
—Pues a bañarme.
—Esperame.
—¡¿Qué?!—Miguel se acercó a mi tomándome de la cintura.
Abrió la puerta del baño para entrar ambos, con su cuerpo me empujó hacia dentro de este, yo solte un suspiro de resignación cuando vi que cerro la puerta con seguro. Tome mi cepillo de dientes para comenzar a cepillarme, el sabor de la pasta era refrescante sobre todo porque en verdad lo necesitaba después de lo que había echo; al escupir y enjuagar mi boca con un poco de agua abrí las llaves para que comenzará a caer el agua caliente. Miguel me miro después de que terminará de cepillarse, su cabello estaba desordenado totalmente, en verdad se notaba que acababa de dormir.
Al entrar en la regadera y sentir el agua sobre mi cara solte un suspiro de tranquilidad, Miguel me tomo de la cintura por detrás, levemente comenzó a besar mi cuello de una forma tierna, ladee un poco la cabeza intentando que dejara de besarme pero el simplemente hizo que lo mirara a los ojos dándome una vuelta, sentí como casi resbalaba por el agua que seguía cayendo. Sus ojos había sido cubiertos por su cabello, yo aparte un poco su cabello para mirarlo a los ojos, sonreí levemente cuando me acerco un poco más a él.
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Kirmizi
FanfictionKirmizi, significa rojo en turco, es curioso, porque ese color representa tantas cosas en esta vida, pero también representa a ese amigable vecino que se columpia entre edificios. Quizá si el deseo que siento por ti se convirtiera en otra cosa sería...