Spider-man: Web of feelings

4.Una araña contra tres monstruos

El criminal calvo de ojos oscurecidos corrió tan rápido como pudo con el maletín en sus manos, el sudor caía por su frente a la vez que sufría espasmos con cada paso que daba. Un sonido distintivo de "TWIP" hizo a su corazón latir más rápido por el miedo.

—(¡Acaba de enfrentarse a cuatro sujetos armados, como me encontró tan rapi-).

Una telaraña paso por su costado, rozando su piel por apenas 7 centímetros.

Por mucho que su cuerpo le indicara que no volteara, el lo hizo, detrás de el se pudo ver la figura enmascarada en un traje con demasiados agujeros, productos de balas, cuchillos y el propio uso extremo de la flexibilidad que su cuerpo le daba. Las lentes blancas se entrecerraron hacia el criminal y el supo que debía correr aún más, dando una última vuelta antes de meterse por una puerta que lo conducía a la bodega central.

Al entrar le puso seguro a la puerta y miro a los demás en la habitación, los criminales estaban cargando cajas en una camioneta, todos parecían comunes y corrientes salvó tres, siendo uno de ellos rubio con una máscara quirúrgica, otro con ojos negros y un saco cubriendo su cabeza por completo a excepción de dichos ojos, y finalmente el último siendo un hombre de ojos grises con cabello largo negro que vestía un cubrebocas.

—¿Que sucede?.

—¡EL CHICO ARAÑA ESTA AQUI! —exclamo el criminal, mirando con terror a sus compañeros—. ¡Intentamos detenerlo pero el seguía levantándose, le dispare con una escopeta al pecho y el maldito lunático se levanto con solo un moretón!.

—Terminen de cargar las cajas, tienen que irse de inmediato —Le dijo el rubio a los esbirros, quienes se apresuraron a subir las últimas cajas que quedaban.

Los ojos del rubio viajaron hacia el criminal que venía asustado, se encontraron con el maletín que llevaba en manos y levanto una ceja con curiosidad.

—No recuerdo que fuera parte del cargamento.

—¡N-No es nada importante! —El criminal apretó el maletín contra su pecho, sin embargo eso solo levanto más sospechas.

—¡¿A quien le importa lo que tenga?! ¡Ese insecto está aquí! —El tipo del cabello largo sonrió y levanto su mano, su puño lentamente brillando—. ¡Si logramos matarlo, finalmente subiremos de ni-.

Una poderosa patada mando a volar la puerta, seguida de ella dos telarañas aparecieron y tomaron del cuello de la camisa a dos criminales para que se movieron hacia un par de patadas que los dejaron inconscientes en el suelo. Spider-man uso a uno de ellos como impulso para salir disparado y pegarse en el techo del lugar, mirando con sus lentes entrecerradas al grupo criminal.

—Muy bien señores, alguien tuvo la brillante idea de dispararme con una escopeta —El arácnido miro directamente al hombre con el maletín, quien retrocedió asustado—. No tengo la más mínima idea de cómo estoy vivo, ni tampoco como sigo de pie con solo 1 hora de sueño, lo único que se es que voy a romperme otro par de huesos golpeándolos uno por uno, o dos por dos si no son idiotas.

—¡¡COMETE ÉSTO ARAÑA!!.

El criminal de cabello largo disparo una ola de fuego de sus puños hacia el aracnido alertando a todo el lugar. El arácnido esquivo la llamarada y agarró al tipo con una red, pateando su rostro y enviándolo a volar contra una pared.

—¿Si sabes que eso puede quemar todo el almacén verdad? ¿Mama no te enseño a no jugar con fósforos?.

—¡Maldito bastardo! —el criminal se levantó listo para incinerar a Spider-man, pero su compañero rubio lo detuvo.

—Estas siendo demasiado impulsivo, no puedes pelear con la araña así.

—Vaya, uno de ustedes tiene cerebro.