¿𝗦𝗼𝗹𝗼 𝘂𝗻𝗮 𝘃𝗲𝘇? |𝘗𝘦𝘥𝘳𝘪| +18

11. Cumpleaños •

Mar

-Diego basta, si - hable caminando hacia la cocina por vaso de agua cansada de la discusión con el - ya te expliqué no te contesté porque me dormí temprano

- ¿¡Y en la mañana!?, ¡el otro día después!¿¡por que no contestaste!?

- ¡Por que estaba ocupada Diego! - di la vuelta para tranquilizarme

- ¡Joder!, ¿¡pero te costó mucho contestar el puto móvil Mar!? - grito mientras gesticulando con las

- ¡ Lo siento!, ¿vale? Pero tenía cosas de la universidad, de el trabajo estaba muy ocupada y ya te expliqué pero no entiendes

Rodeo la Isla me tomo la cara y me miró sus ojos azules clavándose en lo míos.

- Me preocupe por ti, no me contestaba los mensajes ni mis llamadas - dijo con voz calmada apesar de todo el escándalo que no montamos hace unos minutos

- Diego, te fuiste dos días no un año- respire y me solté de su agarre, que me resulta incómodo - lo iba a hacer pero lo olvidé, tengo muchas cosas en mente

Y a cosas ¿te refieres al canario de ojos marrones, alto y muy, muy guapo?

No empieces

- Lo siento ¿si?- dije con voz cansada.

- Vale- medio un beso corto en los labios - te extrañe¿sabes?- volvió a besar mis labios, le correspondí el beso, hasta que bajo a mi cuello.

Porque aún tengo un poco rojo del chupetón que me dejó Pedri, lo empuje rápidamente y coloque mi mano en el cuello tratando de taparlo, aún que lo me había cubierto con maquillaje en la mañana.

Diego me miró confundido así que hable

- Tengo que ir a casa de Nina, y mi auto está en el taller, ¿ me llevas? - solté una risa nerviosa.

*

Vamos camino a casa de Nina, vamos en silencio uno bastantes incómodo, a diferencia de cuando fui con Pedri al mirador, aquellas vez.

Niña vas con tu prometido, espabila.

Hice caso a mi conciencia, y deje de pensar en el.

- Hanna dijo, que todo va bien con lo de la fiesta de compromiso, - dije para cortar el incómodo silencio - Diego solo asintió mire mis manos nerviosa, tratando de formular otra cosa que decir- las chicas, se emocionaron, mucho cuando les dijes que serían, mis damas de honor, tus hermanas también.

Diego siguió, sin decir nada, y cuando yo me decidí a hacerlo de vuelta, hablo por fin.

- Fausto y los chicos igual- dijo una sonrisa se asomó por sus labios, y la culpa me lleno por completo

- ¿Cuales chicos?.

- Fer y Pedri se los pedí y aceptaron con gusto.

-¿Pedri acepto?- solte la pregunta antes de pensarla Diego, me miró un momento, y volví la visita a la frente.

- ¿Por que no lo haría?- pregunto curioso.

Me miros manos nerviosa, y tratado de ganar tiempo para reponer.

- No... no le se pensaba que no eran tan unidos como Fer, o Fausto