Capítulo 27
Enero pasa en un abrir y cerrar de ojos, con mucha nieve y frío; ver ropitas para los bebés y deleitarnos en como serán, (estamos muy ansiosos que hasta hicimos un calendario marcando los días hasta la fecha que probablemente puede ser la primera o segunda semana de mayo), me la paso dibujando y pintando, editando fotos y videos para personas que me contactan, y Nick con sus negocios. Las citas prenatales correspondientes, así que todo bien hasta los momentos. Tomar hierro, es lo peor del mundo, porque las pastillas saben espantoso, y me dan ganas de vomitar.
Febrero sigue igual el invierno, comenzamos a remodelar un poco el departamento, para las habitaciones de los bebés; armo un dibujo de como puede ser según las ideas de ambos y un arquitecto que Nick conoce, nos ayuda a hacerlo real. Aún no hemos escogido los nombres, y, por lo tanto, aun no podemos añadir iniciales hasta que lo tengamos claro. Más vitaminas, más exámenes, ¡Dios!, pero voy cumpliendo con todo.
En marzo hacemos la sesión de fotos, mis amigas han escogido todo lo que me pondré, el set y demás, le pedimos el favor a Maggie para usar su estudio y ella encantada. Menos mal somos puras mujeres, porque me sentiría re incómoda si Nick estuviera aquí, porque siempre que me mira me pongo nerviosa, por las ropas que estoy usando y la desnudez, pero forma parte de lo que las chicas desean hacer. Después de las fotos, Nick me pasa buscando y vamos a la casa, en el camino dos nombres se me vienen a la mente (no sé si es porque lo leí en algún lado o alguien grito esos nombres).
—Nick, tengo dos nombres para los bebés —le digo y menos mal que estamos en semáforo.
—¿Cuáles? —pregunta mientras arranca hacia la autopista.
—Austin, Andras —los menciono.
—¡Vaya!, me gustan, están interesantes, ¿solo primer nombre?
—No lo sé.
Llegamos al departamento, ha habido un avance significativo. Nos tumbamos en el sofá.
—Okey, Austin, András, creo que esos nombres solos me gustan, sin segundo nombre —dice mientras ando acostada en sus piernas—. Sí, sí, me encantan.
—Bueno, ahora a ver mis fotos de embarazada, ¿listo? —si lo digo normal, igual se emociona, y alza las cejas mientras conecta mi cel al televisor. Cuando él fue más atrevido el año pasado, con sus calzoncillos que me dejaron sin aliento por semanas.
—Nunca estoy listo, pero vamos.
—No digas, porque yo tampoco cuando saliste con esos bóxer y fingir delante de las chicas esas que te comían con los ojos.
—Pero soy solo tuyo, así que soporten. Igual estamos a mano.
Voy pasando las fotos, y va haciendo comentarios:
—No puede ser posible eso, ¿no había chicos, verdad?
—No.
—¡DIOS MÍO! ¡TE PASAS! ¡LO PONDRÉ DE FONDO DE PANTALLA EN MI TELÉFONO Y LE AÑADIRÉ UNA CLAVE MUY DIFÍCIL PARA QUE NADIE TE VEA! ¡LÁSTIMA QUE NO PUEDO COMERTE COMO EN MI MENTE LO IMAGINO!
Terminamos de ver las fotos, y nos besamos con intensidad sin llegar a ser nada, luego nos acostamos en la cama para ver alguna peli y quedarnos dormidos a la mitad. Hemos estado muy cansados últimamente, entre los trabajos, pintar, la remodelación, compras, reuniones, siento que el poco tiempo que tenemos es para dormir, y los fines de semana entretenernos con películas.
»«
Casi finalizando marzo, vamos comprando cositas que vemos para los bebés, y no puedo morir más de ternura en ver mini zapaticos que combinan perfecto con unos overoles. Aprovechamos de comprar pintura naranja y azul, para la habitación de los niños. De solo pensarlo quiero llorar, la insensible Alex se fue justo cuando me embaracé y conocí a Nick, a veces digo si mi antigua yo estará por ahí queriendo salir, pero no, la deje atrás, no es que sea la persona más sensible del planeta, pero me he abierto mucho y es lindo sentirse así. Además, siento que todo lo que había pasado meses atrás del acoso, fue un proceso de aprendizaje que tuve que ser fuerte, y el Polo Norte me brindo esa esperanza, esa sencillez, y sus paisajes me motivaron a no rendirme.
Mi barriga va en aumento, como son dos, duele el doble, y más ahora con seis meses siento que ya no puedo más, así que camino muy poco, y usualmente me quedo en casa trabajando sin salir tanto al campo como los chicos; pero todo sea para no extralimitarme demasiado, los bebés patean durísimo que el dolor lo siento en todo mi cuerpo y cuando eso pasa, pues les pongo música suave y se calman.
Modo zen, con música tranquilizante voy revisando el email, tengo varios sin abrir y le doy clic al primero. Es una invitación (quieren publicidad con mi embarazado, cuando ellos mismos fueron los que me hicieron daño el año pasado), eliminar de una vez, paso a la siguiente, es una galería solo de dibujos y desean que exponga en una exhibición la próxima semana, porque han visto mis redes y les encanta lo que hago. Reviso mi agenda y ando full, pero puede que haga un espacio, igual tengo hasta mañana para darles la confirmación.
Los demás emails son solo para publicidad, no me interesan, así que eliminar a todos. Voy a Instagram por si tengo algunos pedidos de postres, y de servicio de producción y hay un montón. La gente solo quiere hacerme famoso a costilla de uno, pero no les daré de que hablar, así que los que son spam los elimino; los otros sí los respondo y voy verificando los días ocupados y los que tengo libres para cuadrar con las personas.
"¿Revisaron lo que les envíe?" -envío al chat grupal del negocio, el cual aun no tenemos un nombre definido.
"Sí, justo estaba abriendo
el documento. Lo vamos a tener super movido,
y lo del festival de danza, suena tentador. A ver si consigo a
mi bailarina. Ya, en serio, creo que nos da chance
de hacerlos todos. Lo que sí podemos es buscar más personas.
"-responde Zack de primero.
"Aún no, ando comprando unas flores.
Quiero darle una sorpresa a Rosa por nuestro
cumple mes. Lo abro apenas llegue a casa"
-dice Justin en una nota de voz.
"Sí, concuerdo con Zack
Conozco varios compañeros, a ver si se quieren unir y por
cierto hay que buscar un nombre todo cool para el negocio"
-de último Mathias.
"Sí, diles a ver y me avisas, Mati.
Justin recuerda que Rosa es alérgica a las que son amarillas,
lo demás lo que quieras. Y las de danza son
niñas pequeñas jajaja, igual en algún
momento conseguirás tu crush, Zacky,
no te apresures, llegará cuando menos
lo esperes" - les respondo a todos de una vez.
Nick llega con un pie de limón grande. Tenía meses sin comerlo, porque me aburrí del mío y lo que venden en el sitio que me gusta, cerró hace varios meses.
—Lo hace la mamá de una amiga, pruébalo. No desamerito el tuyo, porque es la gloria. —Al probarlo, el sabor perfecto de limón, de dulce, lo crujiente de la galleta—. ¿Está bueno?
—Buenísimo, es el mejor que he probado y espero no decírselo a mi papá o me mata. —Cada sabor, textura, es una delicia—. Jamás pensé que pudiera reemplazar el chocolate por el momento, pero cuando los niños nazcan, me compraré un pote de Nutella grande, y muchos chocolates.
Me encanta comer saludable, en serio que sí, pero a veces me provoca una pizza, o algo que me empalague demasiado; pero cuando los pruebo o huelo, las náuseas aumentan y termino rechazándolos. Lo bueno es que he visto videos de embarazos y los bebés salen limpios si tu alimentación es sana a base de vegetales y frutas, así que tan mal no estoy, y que todo es bajo en azúcar, si le agrego más, lo melado me repugna y no gracias.
—Te amo, Nick —se me sale de la nada y se sobresalta como si fuese un acontecimiento histórico.
—Me harás llorar como marica, puedes repetirlo, princesa, por favor. Déjame grabarlo porque no se cuando me lo volverás a decir de nuevo. —Apunta la cámara a mi rostro y me da risa lo infantil que es.
—Que te amo, Nick —vuelvo a decirlo y se derrite de amor. Me va besando la boca, la barriga, el cuello.
—Yo te amo más, princesa.
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Embarazada de Santa Claus © (BORRADOR)
RomanceCreemos en Santa Claus como un gordito, con barba blanca y traje peculiar. ¿Y si cambiamos la historia y ahora resulta que el nuevo Santa Claus es irresistiblemente sexy y está dispuesto a darte un buen regalo de navidad? Alex Chambers estará invo...