La joven Aidana comenzaba a abrir lentamente sus ojos, la cabeza le dolía pero ya se acostumbro a ese dolor, el techo blanco de donde estaba respondió su pregunta de donde esta, recuerda muy bien ese color y forma, es el hospital de la Isla. La ausencia de la voz de Matt hizo que ella se sentara en la camilla, ya sentada vio al joven en una silla durmiendo,esa es la primera vez que ella lo ve así porque en las otras veces el estaba despierto, como deseaba tener una cámara ahora, se ve muy tierno durmiendo en una sillita incómoda de madera solo por alguien. La muchacha se levanto y camino hacia el pasillo, deben ser las 3 a.m. ya que no hay nadie caminando, se dio la vuelta para ver si Matt dormía aún, y todavía lo sigue haciende, recorrió todos los corredores hasta llegar a su pieza. Entro y todo esta igual,se saco su traje anti-fuego, agarró ropa limpia y se fue a bañar en su baño privado.El agua recorriendo en su cuerpo la relajaba mucho, la refrescaba, tanto mental como físicamente.
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Matt abrió sus ojos, estos fueron a parar en su reloj, 4 a.m., se estiró de una forma escandalosa, luego de eso miro hacia la cama donde se supone que Aidana dormía, al no verla ahí le agarro un ataque. Se levantó de su silla, saco las sábanas de la camilla, miro abajo de esta, nada. Pensó un largo tiempo, "su habitación", corrió como si el mundo se acabará hacia aquel lugar, toco la puerta y nadie le respondió, no le quedo otra que abrir la puerta a la fuerza, entró y no había ninguna señal de ella, fue al baño y nada, solo unas gotas en el cerámico de la pared "estuvo aquí", miró por una ventana de la pieza, el amanecer estaba cerca, y ella con el despertar del sol.
Él salió del bunquer, se dirigió a las estatuas de la isla, en el borde de los megalitos se hallaba una figura de mujer sentada, despacio Matt se sentó junto a ella,la joven miraba hacia la orilla esperando el amanecer como lo hacía cuando se tensaba.
-Falta poco-dijo Matt
-Si, ya lo siento llegar-le respondió.
Volvieron a quedar en silencio, el amanecer ya se hizo presente tocando la cara de los dos jóvenes, ella cerró sus ojos mientras una brisa movía despacio sus mechones sueltos, él imitó lo a la chica.
-Es hermoso- habló la muchacha, el abrió los ojos para observarla
-Lo se-los dos se miraron, ambos querían acotar la distancia que hay entre ellos, pero no saben como reaccionara el otro, como ninguno se acercaba, volvieron su vista a la costa, pasaron como media hora mirando la escena.
-¿Por qué te fuiste?- le pregunto a la joven
-No tenía nada más que hacer- le respondió
-Aidana, sabes que debes esperar a que los doctores te vean-la reto
-Y estar dos horas esperando, si claro-
-Pudiste despertarme-
-No lo haría, duermes poco...-Matt la interrumpió
-¿Y qué?, no eres mi madre, no necesito que te preocupes por mi-
-Matt, no me preocupo...-él la volvió a interrumpir
-Cierto, me olvide. Tu solo te preocupas por ti misma, no te importan las demás personas, ni siquiera si se preocupan por ti-
-Pues ese es mi problema-respondió fría.Aidana ya se enojo,se levanto del suelo dispuesta a macharse,Matt se percato de lo que dijo, se levanto y corrió hacia ella, agarró su brazo provocando que ella se de vuelta pero no lo miro-¿ahora qué quieres?-su voz sonaba media ahogada.
-Ai, lo siento, en serio- él estaba muy arrepentido, no le gusta que las personas se preocuparan por el, en especial Aidana, ella tiene muchas cosas para preocupase más importante que el, pero se equivoca, para ella el es muy importante, más si están por destruir el mundo.
-Pues, es muy tarde para eso- la dotada levanto su cara para que Matt vea que sus ojos amenazaban con sacar lágrimas, además de las que ya caían.
-Perdóname, por favor-él agarro las dos manos de ella
-No soy Edward Cullen para saber si es verdad o mentira- al recordar al nombre del vampiro de la pelicula que vieron los dos, las lágrimas comenzaron a recorrer su rostro más rápido, ella odia discutir con él.
-Es verdad-
-Entonces dame una razón para creerte-
-No quiero que te preocupes por mi porque tienes cosas más importantes para pensar que yo-el agacho la cabeza
-No, tu eres mucho más importante para mi, no se lo que haría sin ti- Matt levanto su cara, la observo un tiempo corto, alzo sus manos hacia las mejillas de ella, seco con ellas las lágrimas. Cuando termino de hacerlo, dejo sus manos ahí, a Aidana no le importaba, le gusta sentir el tacto de su piel con la de el. El joven empezó a romper el espacio de ellos, se detuvo cuando sus respiraciones chocaban, ahora ella se acercaba.
-¡Oigan tórtolos!-los dos se separaron rápidamente ocultando sus rostros sonrojados, miraron hacia donde venía las voz. Braulio- ¡El jefe nos llama!-dijo él y se dio vuelta caminando hacia el ascensor. Los dos se miraron, Matt rascó su nuca.
-Yo, este...em-tartamudeo en señal de que estaba nervioso por lo que sucedió y por lo que iba a suceder
-Mejor vamos, ya lo conoces cuando llegamos tarde- el sonrió y se fueron hacia donde estaba Braulio. En toda la bajada, el no dejaba de verlos con cara de "los cache". El ascensor se detuvo, los tres caminaron por un largo pasillo, el moreno iba adelante de ellos, él se detuvo.
-Me olvide, chica fuego, el jefe quiere que vayas a que te vean los doctores-dijo el
-Yo la acompañare- dijo Matt
-No,lo haré yo, el jefe quiere verte antes que a los demás-él joven asintió y se fue hacia la oficina del recién nombrado, los dos se miraron- ¿sabes donde esta la enfermería?, yo soy nuevo aquí-
-Si, por aquí- le contesto la "chica fuego" al moreno entrando en una puerta de ese corredor.
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Elementary
FantasyAgua, un poder precioso que da vida. Tierra, un poder un poco sucio pero que da vida. Aire, un poder valeroso que ayuda a dar vida. Fuego, un poder temible, poderoso y peligroso que quita la vida. Aunque nadie lo sepa, en todo el mundo hay 4 pe...