Viaje

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 Leer letra negra abajo.

  Dos horas después...

 Midori se esta terminando de poner su traje que el Gobierno mismo le preparo, era igual que el de la chica fuego, solo que este tiene como de símbolo la tierra, termino de ponerse la ropa y escucha un ruido de algo que choca con algo de madera, su puerta. Ella lo abre  y se encuentra con unos ojos grises que la observan.

-¿Sucede algo?-pregunto la asiática.

-Matt dijo que les diga a todos que en media hora estemos en el sector principal preparados-respondió el joven moreno, este bajo su mirada para ver a la muchacha con el traje-Te queda bien-dijo guiñándole el ojo para irse a su habitación.La joven quedó algo sonrojada por lo que él le acabo de decir e hizo, volvió a adentro para terminar de prepararse, agarró su mochila que trajo desde el primer día, empacó algo de ropa, un libro y cosas femeninas. Puso el bolso sobre sus hombros, se hizo una coleta con su poco cabello, salió de su habitación y se iba a dirigir a donde antes su amigo le dijo pero fue primero a la pieza de la chica fuego.Toco un par de veces y la puerta se abrió mostrando a una joven con su traje que tiene el símbolo fuego, una coleta alta y unas botas militares.

-¿Qué?-pregunto ella de mala gana.

-Quería ver si estas bien-contestó la japonesa.

-Pues estoy viva-dijo fría.

-Ya basta-

-¿Con qué?-

-De tratar a todos así, que Sam y tu se hayan reencontrado y luego peleados no significa que debes ser mala, fría con todo el mundo-respondió.

-Antes les dije que no me hablen porque saben que le contestare así, por lo cual, tu hiciste lo que anteriormente advertí así que no me lo vengas a decir si lo se, aparte de decírselos como cien veces-

-Ai...-

-No me llames así, no eres nada mío como para llamarme así, solo una compañera de misión que dentro de una semana te iras al igual que los otros-la interrumpió, cerró la puerta delante de su nariz pero esta no llegó al marco, un pie lo interrumpe a que se cierra.-Saca tu pie-

-No hasta que me escuches-

-Tienes un minuto-dijo volviendo abrir la puerta y mirando el reloj.

-Han pasado muchos años desde que no se ven, se ven y pelean.No creo que él halla querido eso si no que intenta volver a ser tu amigo, seguro se esta lamentando por decir eso, deben hablar-

-No eres mi madre para decirme que hacer, además si él quiere disculparse ¿por qué no lo ha hecho?-la asiática abrió su boca pero la cerró al escuchar una voz masculina.

-Estaba a punto de hacerlo-dijo la voz.

-Los dejo solo-la joven de pelo corto se fue hacia el sector principal dejando solos a los dos chicos.

-Lo siento-dijo este.

-Creo que es tarde para eso-replicó, volvió a su habitación pero antes de cerrar la puerta de esta, el joven entro por si mismo.-¿Qué haces?-le pregunto y cerro la puerta con la traba.-Abre la puerta-le ordeno.

-Quiero que me escuches primero-se acerco a ella-por favor-susurro, ella vio en sus ojos tristeza y lamento pero lo que más le llamo la atención fue que estuvieran un poco hinchados y rojos.

-Bien, dime-dijo sentándose  en su cama.

-Hace unos días estaba en Rusia-imitó la acción de la joven-te estaba buscando-ella abrió los ojos-no quería que te hagan daño, allí no encontré ninguna pista en donde podías estar y la locura por no encontrarte y la promesa que te hice de niños provocó que no controle mis poderes haciendo una gran destrucción en aquella ciudad, el Pentágono me halló rápidamente por eso. La B.M.K. dijo un trato, yo la ayudo a ella y ella me dice donde estas.-

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