Elementary

Memorias de una mente perturbada 4/5

Maratón 4/5.

Mientras que a Aidana le enseñan nuevas cosas y la tortura...

 Sam nunca dejo de pensar en Ai, tenía miedo de lo que le harían,les hacían pruebas pero tarde o temprano empeorarían, él está encerrado en una habitación sin ventanas, ni puertas, ni iluminación, ni siquiera le llevaban comida, la única comida que le dieron fue cuando lo encerraron por salvar a su mejor amiga, la guardo en raciones pero tarde o temprano se acabaría. La primera vez que la vio, le pareció tímida e intimidante con esos ojos rojos que ahora le estaban pareciendo bonitos por acostumbrarse a verlos en todas las mañanas cuando duermen juntos en la noche sin que nadie lo sepa, ahora le esta siendo mucha falta el no poder ver sus ojos y oír de nuevo su voz, si algo tiene miedo es de perderle, ella se convirtió en su mejor amiga, su hermana y tal ves en algo más. García tenía razón, los dos crecen al igual que sus sentimientos, él comenzó a amarla pero no de una forma de hermanos o amigos, sino de otra cosa pero no sabía que. 

 Él esta muerto de hambre, le queda solo un pedazo de comida y muy pequeño pero aún así no se rinde, le hizo una promesa a ella y nunca la va a romper. La puerta se abrió y la habitación se ilumino por completo, tubo que parpadear varias veces para acostumbrarse, tantas veces que no se dio cuenta que esta siendo llevados por soldados a una sala. Los militares lo dejaron en aquel recibidor provocando que quedara de rodillas contra el suelo, levanto la mirada y vio comida, correría hacia ella pero algo le decía que no lo haga.

-Descuida, la comida no esta envenenada-dijo un hombre que esta mirando una ventana."¿Como demonios supo que yo pensé eso?" se pregunto Sam-Lenguaje niño, es fácil como lo se, soy como tu pero con un don diferente, no como los elementos-

-¿A qué te refieres?-

-Mira-dijo el hombre y se sentó en una silla,su cara tenía apenas algunas arrugas y unas grandes ojeras-Come algo y te lo diré-el niño se quedo pensando, pero su panza eligió por él una enorme milanesa-Hace mucho tiempo, no se cuanto, nacieron cuatro niños, dos mujeres y dos hombre, ellos tenían el poder de los elementos, solo un elemento, aire, agua, tierra y fuego, tu amiga tiene el del fuego por lo cual la convierte una Elementary, los demás como ella no están aquí o en algún lugar así-

-Son libres-lo interrumpió Sam-por que no son peligrosos, no tanto como ella-

-No, son peligrosos como ella pero tienen más control. Tu y yo tenemos poderes que provinieron de los hijos de esos cuatros, de distinta forma, yo tengo la telepatía y tu tienes la telequinesis, el Chi y como estas teniendo ahora, la absorción de poderes-

-¿Absorción de poderes?-

-Si, con tocar a tu enemigo o un roce y ya tienes parte de su poder en forma temporal-

-¿Por qué me dices eso?-

-Porque cada vez se están localizando a más personas con poderes de los hijos de los hijos de los Elementary, pero lo único que te pido es que no se lo cuentes a Aidana-

-¿Por qué?-

-Ella no lo puede saber, no ahora-Sam iba a decir otra cosa pero un grito hizo que cerrara su boca y se dirigió a la ventana donde el señor miraba antes y vio lo que nunca espero ver. Allí abajo esta su amiga siendo torturada por los científicos, y esta es la parte del electrochoque, el niño se estaba preparando para la explosión que ella causaría pero nunca sucedió "¿que demonios...?"-Lo hacen para que controle su don, porque llegará el momento en que ella necesitará controlarlo ya que todo se revelará y eso será en lo que se convertirá pero peor-el chico volvió a mirar la ventana y cuando cinco científicos la tocaron para sacarle los parches de la máquina salieron volando de la habitación chocando contra las paredes, uno de ellos levanto su rostro y lo tiene quemado. La científica Kantos se acercó a la joven quien sonreía, el joven desde su lugar pudo observar que ella se puso algo en las manos, eran nudillos de acero, la mujer comenzó a pegarle en la cara a la niña, escupió sangre a partir del quinto golpe, luego del décimo-sexto se desmayó pero aún así no paro de golpearle.

-¡BASTA!-gritó Samuel desde su lugar y un cuchillo salió volando hacia la oreja izquierda de la mujer, no se la clavó pero la rozo hiriéndola.

-Sorprendente-susurró el hombre-tanto poder en dos niños que están bajo mi poder, a ti no te haremos daño pero a ella, lo siento-

-Lo entiendo, ¿pero que haré mientras ustedes le hacen eso?-

-Estarás con migo, te enseñare todo lo que debes saber-

-¿No la dañaran?-

-Te lo prometo-

  Y así fue como él acepto ser aprendiz de quien se enteró luego que es el Mayor Torres, cada día veía como la lastiman pero según ella, cuando hablan, ya se acostumbró. Él aveces era sometido a los mismo tratamientos que ella: electrochoque, recordar tu peor recuerdo o lo que quieres olvidar, golpes donde aveces quedan inconscientes y cortes. A petición de él, el Mayor hizo que le retirarán el microchip que aveces le produce corrientes eléctricas. Algo que odio de todo ese tiempo fue en mentirle sobre de que lo torturaban siempre al igual que ella cuando en realidad aprendía todo sobre sus poderes, los Elementary y los hijos de ellos.