12 Horas

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 12 horas antes de la historia de la chica fuego.

 Sam no lo podía creer, paso mucho tiempo buscándola,cinco años en cada lugar del mundo, torturando y matando gente por el solo hecho de volver a verla viva, aunque sea un segundo podría descansar en paz. Moscú, Rusia, fue el último lugar donde la última pista de ella era ahí, al no encontrar donde más pudo ir la joven, la desesperación lo ataco. Una gran catástrofe se hizo presente en la ciudad, gente muerta y aún siguen los desaparecidos, cuando el poder se apodera de uno mismo, no se puede controlar. La Mayor Kantos lo halló inmediatamente, claro que para llevárselo lo tubo que someter. Al estar despierto destruyo casi toda la habitación en la que se encontraba, la Mayor lo hizo calmar al decirle que sabe donde esta ella, el único trato que trabaje con ellos y la podrá ver. Sam no sabía si aceptar, pero luego de ver un vídeo de la que antes para él era una niña decidió sin pensarlo dos veces, acepto.

 Se quedo en el helicóptero al llegar a la Isla de Pascua, estuvo ahí durante veinte horas esperando a que la Mayor le dijeran que bajaran. La señal llegó, los soldados lo agarraron de los brazos y los de atrás lo apuntaban con las armas. Llegó al piso del laboratorio,se encontró con muchas personas viendo una habitación, todos con caras sorprendidas y algo asustados, los militares lo hicieron entrar a la sala de experimentos,al entrar se quedo atónito, ella tenía razón, su mejor amiga esta viva.

 Su boca se abrió, la Mayor sonreía, la joven con el pelo rubio se dio vuelta y se quedaron mirando fijamente, él quería ir a abrazarla pero sus piernas no respondían,la muchacha cayó al frío suelo de cerámica blanca, en eso un soldado se le acerca y la noquea con su arma. Eso no le gusto, el joven al verla desmayada hizo lo peor con el hombre, uso su poder para levitar al hombre, las venas que pasan por el cuello del señor se hincharon, los demás miraron esperando la orden de Kantos pero ella solo sonríe, las venas del individuo explotaron salpicando sangra alrededor, el joven dotado bajo su mirada, iba a ir hacia donde yace su amiga sin embargo, los militares le ganaron y se la llevaron, volvería a atacar sino estuviese cansado.

 Lo trasladaron a la oficina principal, la del jefe.Allí se encuentra la Mayor Kantos, el Mayor Torres, Matt, Morgan, Luis, Chian, Rose y él. 

-¡¿Qué demonios fue eso?!-grito preguntando el moreno jefe a los Mayores.

-Creí que sabías como actuamos nosotros-respondió de lo más calmo el Mayor.

-Claro que lo se, pero eso-señalo al joven-no estaba en el trato- dijo él.

-Genial, ahora soy eso en vez de esto-susurró el joven.

-¿Quién eres tu?-lo interrogo el encargado de la joven de fuego.

-¿Tu quién eres?-contesto preguntando el muchacho.

-Matt, ¿recuerdas cuando te dije sobre los otros dotados?-habló Rose, la encargada de Braulio.

-¿Los hijos de los Elementary?-quiso saber y la mujer asintió.

-Él es uno- respondió- conoció a Aidana hace ocho años,crecieron casi todo el tiempo juntos hasta que los separaron y...-bajo la mirada al momento en que su rostro se ensombreció.

-¿Y?-

-Conoció a tu madre-finalizó, el joven medio rubio medio morocho abrió los ojos en plato.

-¿Eres el hijo de la Sargento García?-pregunto el muchacho.

-Si-contesto bajando la mirada al suelo.

-Como sea, necesitamos saber que fue eso-dijo Luis.

-Eso fue una prevención, dentro unas horas se irán a las catacumbas, si lo hacen mal esto lo esperaran-explico la Mayor.

-¿Como sabes que entendieron el mensaje?-cuestiono Chian, el encarado de la chica tierra.

-Lo harán cuando 1 despierte-dijo refiriéndose a la muchacha con el don fuego.

-¡Deja de llamarla así!-grito Sam-¡Ella no es un número, es una persona!-la defendió el joven.

-¿Y tu que sabes sobre ella?-dijo Matt.

-Pues mucho-se levanto el rubio del sillón de golpe quedando enfrente del soldado.

-¿Así?, pasaste muchos años sin verla y aún así piensas que sabes todo sobre ella, sus gustos cambiaron, no es la misma que antes-el otro muchacho bajo la mirada.

-¿Y tu que sabes de ella?-cuestionó.

-Pues todo, yo la cuide desde que Morgan la trajo aquí, yo la apoye en sus momentos difíciles, yo le enseñe todo lo bueno de este mundo, aunque sea poco lo bueno, lo hice. Su color favorito es el negro y el azul, ama dibujar y ver películas, su favorita es "Soy el Número 4", su canción favorita es "Somewhere I belong"  de Linkin Park, ¿quieres qué siga?-le contesto, el joven negó con la cabeza.

-N...no-tartamudeó volviendo a su antiguo lugar, "¿y si ella cambio de verdad?""¿y si no es la misma que conoció hace ocho años?""¿Qué habrá cambiado?" se pregunta mentalmente.

-Si ya dejaron de pelear les diremos el trato que hicimos cuando ustedes hablaban-dijo Morgan, los dos asintieron.-Bien, el Pentágono se irá, Sam se quedará e ira con ellos a la catacumba pero lo único que piden a cambio es que no uses tus poderes-el joven asintió- ni le cuentes algo a Aidana, aún no pueden saber sobre los hijos de los Elementary, cuando estén listos, tanto físicamente como mentalmente lo sabrán. Cuando terminen de trabajar en la cripta, una semana después volverán para ver el progreso de los cuatro ¿quedó claro?-

-Si Señor-dijeron los encargados.

-Supongo que ahora los acompañare a la salida- dijo el jefe-Chian dale la 595 a Samuel, será nuestro invitado por un tiempo-ordeno, el asiático le hizo una seña con la cabeza al muchacho para que lo siga que fue lo que hizo, caminaron por varios pasillos hasta llegar al sector de las habitaciones, el hombre le entrego la llave, el adolescente la acepto y entro, cerró la puerta y dejo en la cama el bolso, que anteriormente agarro donde contiene algunas cosas de él y ropa, recorrió todo el cuarto,luego se acostó en la cama mirando el techo, se sentó y de la bolsa saco una foto donde esta él a los diez años junto a Aidana de ocho años, una lágrima se escapo de su ojo izquierdo.

 Se levanto de la cama y fue al baño de la misma habitación, abrió la ducha, se saco la ropa y quedo un momento frente el espejo observando sus cicatrices en el torso de su cuerpo, algunas viejas y otras nuevas, se metió en la bañera y dejo que cayera sobre él, el agua caliente que tanto lo relaja, no aguanto más y las lágrimas salieron de sus ojos. Mucho tiempo paso en el que no la veía y cuando lo hicieron, ella lo miro como un completo desconocido aunque supiera muy bien de quien se trata. 

ElementaryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora