Sálvame

V

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🌟 Capítulo 5: Un favor🌟
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"No podré pintar colores en un mundo de invidentes"

🌑🌒🌓🌔🌕

Iono: "Por favor, ayúdame con esto"

Ash: "De ninguna manera"

A lo lejos, en lo alto de la colina, pudo apreciar la universidad y supo que llegando hasta allá podría evitar de una vez por todas a la chica. Mientras corría, no pudo evitar pensar en todo lo que los llevó a estar en esta situación.

*UN DÍA ANTES*

Iono se estaba preparando para partir, temporalmente, de Alola. En dos días se llevaría a cabo, en la región de Sinnoh, una serie de batallas contra dos grandes entrenadores de la región para seguir escalando puestos en el ranking mundial de entrenadores. Este evento, como muchos otros que se estaban llevando a cabo, constaría de una batalla doble, por lo que solo las parejas se podrían inscribir.

En un principio pensó en inscribirse junto a Liko, pero esta ya había sido reclamada por Roy, el chico del cual estaba enamorada su amiga. En cambio, Iono, logró emparejarse junto a otra de sus amigas, Mencía, una completa aficionada a las batallas.

Tenía pensado en tomar el Ferry de medianoche para llegar a Sinnoh en la tarde del día siguiente y así tener tiempo para entrenar un poco que, desde que llegó a las paradisiacas islas, no había tenido tiempo suficiente para hacerlo.

Pronto, un mensaje en su celular llamó su atención, y esta solo aumentó cuando vio que la remitente no era otra que su amiga. El primer mensaje no era más que una foto, pero fue suficiente para que su ánimo disminuyera drásticamente. La foto era de Mencía, internada en un hospital de Paldea, con una pierna rota.

✔✔. 10:30pm. Me lo ocasioné cuando estaba escalando

una montaña...

✔✔. 10:31pm. Lo siento, no creo que pueda viajar

hasta Sinnoh...

Iono dejó su celular en la mesa de noche que tenía en su habitación y se echó en la cama, sin importarle todo el desastre que tuviera allí. No quería admitirlo, pero las cosas no le estaban saliendo muy bien en las rondas clasificatorias, una de las razones para venir a Alola a desestresarse, pero creyó que todo podría cambiar derrotando a Volkner, quien estaba posicionado muy alto en la clasificación.

Cerró los ojos buscando calmar su estado de ánimo, cosa que no logró hacer. Pronto, se encontró dándole golpes a la almohada por la frustración que sentía de perder una oportunidad como esta.

10:50pm: No te preocupes... ✔

Unos cuantos minutos después, Liko entró a su habitación para que ambas se fueran juntas hasta el ferry. Iono, sin embargo, corrió directo a sus brazos para desahogarse y contar todo lo que pasó solo unos minutos atrás.

La pelinegra la consoló durante un buen rato, aunque sabía que esto era un reto casi imposible. Ella, más que nadie, sabía la ilusión que Iono tenía por competir y demostrar que, compitiendo con sus Pokémon favoritos y no con los recomendados, podía ganar a cualquiera. También conocía mejor que nadie, toda la frustración, rabia y sufrimiento de su amiga por la racha de resultados negativos que estaba teniendo últimamente.