Super Dragón Ball Af. El ARMAGEDÓN

Inmortalidad frágil.

Zaiko había cambiado su semblante habitual, ya no era ese guerrero arrogante de potencial casi ilimitado que presumía de ello, ahora estaba realmente muy enfocado en lo que estaba pasando.
Alí se percató de que el motivo era claramente lo que sea que Kaarat le había mostrado en su cabeza, sea lo que sea que haya sido, le motivó a destruir en varias maneras a su enemigo.

Alí: A ver... ¿Cuál es tu magnífico plan?- preguntó con algo de molestia.

Zaiko: .... Solo déjate sorprender...

Kaarat y Cell trataron de levantarse, pero la mano de Zaiko apuntó hacia ellos, expulsando una cantidad de ki en forma de viento que generó un enorme agujero en la corteza de la tierra hundiendo también a los dos guerreros oscuros.

Zaiko: Esto será rápido y sencillo, pero quiero que te mantengas lista.

Alí: ¿Lista para qué, si se puede saber?

Zaiko no dijo nada, simplemente se quedó callado, mientras lo único que se escuchaba era el sonido de la brisa soplando levemente. Era curioso, pero Zaiko se estaba calmando cada vez más.
El viento movía lentamente su melena dorada, pero Alí, al contrario de su compañero, estaba un poco más nerviosa.

Zaiko: .... NO HACE FALTA NI SIQUIERA UNA PELEA... AHORA VERÁN.

Zaiko, apenas vio que sus enemigos emergieron del suelo, comenzó a moverse a gran velocidad esquivando todo tipo de ráfagas de ki que ambos le lanzaban con mucha ira.

Cell: -UGH- ¡T-TE MATARÉ!

El bioandroide no lo dudó ni un solo segundo y cargó un poderoso Kamehameha con sus máximos poderes con el fin de matar a Zaiko lo antes posible, sabiendo que era todo o nada en un último ataque.