Izuku y Helena regresaron al ARK después de descansar en el arco azul. Estaban felices y enamorados, y decidieron vivir juntos en una cabaña que habían construido cerca de la playa. Allí, compartían sus días y sus noches, disfrutando de su compañía y de su amor.
Pero Izuku y Helena no se olvidaron de su objetivo: descubrir el secreto del ARK y escapar de ese lugar. Por eso, siguieron explorando el mapa y buscando los artefactos que les permitirían acceder al arco rojo, donde había otro jefe que había que derrotar.
Para ello, necesitaban mejorar sus equipos y sus habilidades. Así que se dedicaron a recolectar recursos, fabricar objetos y domesticar criaturas con más eficacia. Usaron el terminal de su cabaña para acceder a los dossiers de Helena y a otras informaciones útiles sobre el ARK y sus habitantes.
Gracias a eso, consiguieron nuevos crafteos y monturas que les facilitaron su aventura. Algunos de los crafteos que obtuvieron fueron:
- Una **motosierra**, que les permitía cortar árboles y obtener madera más rápido.
- Un **rifle de asalto**, que les daba más potencia de fuego contra los enemigos.
- Un **paracaídas**, que les permitía saltar desde lugares altos sin sufrir daño.
- Un **silbato**, que les permitía comunicarse con sus animales a distancia.
Algunas de las monturas que domesticaron fueron:
- Un **rex**, un dinosaurio carnívoro y poderoso, capaz de aplastar a sus rivales con sus mandíbulas y sus garras.
- Un **quetzal**, un ave gigante y majestuosa, capaz de volar por los cielos y transportar objetos pesados.
- Un **sabertooth**, un felino ágil y feroz, capaz de correr por el terreno y saltar sobre sus presas.
- Un **ankylosaurus**, un dinosaurio herbívoro y blindado, capaz de romper rocas y metales con su cola.
Con estos nuevos crafteos y monturas, Izuku y Helena se sintieron más preparados para enfrentarse al siguiente jefe del ARK: el megapithecus. El megapithecus era una criatura parecida a un gorila gigante, capaz de lanzar rocas y golpear con sus puños.
Para entrar al arco rojo, necesitaban unos objetos especiales llamados tributos, que se obtenían al matar a ciertos animales o al completar ciertas misiones. Izuku y Helena se pusieron a buscar los tributos que les faltaban, mientras se cuidaban el uno al otro.
Así fue como Izuku Midoriya y Helena Walker profundizaron su relación y consiguieron nuevos crafteos y monturas para enfrentarse al siguiente jefe del ARK: el megapithecus.
