Neteyam y Lo'ak ayudaban a la Mit'kante a caminar mientras que Tsireya los seguía a sus espaldas en total silencio, escuchaba como los quejidos de dolor de su amiga salían con cada pisada haciendo que el mayor de los hermanos la mirara con orejas bajas. Lo'ak trataba de animarla a continuar pese a estar triste y sentir responsabilidad por lo ocurrido pues fue su idea llevarla al lugar donde todo había ocurrido. Le dolía ver a su amiga así, sufriendo, tan solo hace pocas horas estaba feliz por su embarazo, por saber que tendrían hijos casi al mismo tiempo y ahora toda esta alegría e ilusión se había esfumado.
Ambos ayudaron a Aleia a recostarse en la cama, esta solo se dejaba manipular con una mirada perdida, solo se movió para darles la espalda y evitar que alguno le dirigiera ciertas palabras. La pareja compuesta por el Omaticaya y la Metkayina miraron con tristeza la escena, Aleia recostada en el lugar de descanso con orejas deprimidas mostrando solo su zona posterior mientras que Neteyam la veía de pie en el borde de la cama con una angustia gigante.
-Bro- llamo con voz delicada captando la atención del mayor quien suspiro antes de aproximarse a la pareja que se encontraba cerca de la entrada- nos vamos
-Si, gracias por la ayuda- dijo cabizbajo y sin muchos ánimos
-Si necesitan algo o pasa cualquier situación- hablo Tsireya tocando su brazo haciendo que la mirada aguada del Omaticaya subiera hasta ella- no dudes en llamarnos, sabes donde vivimos
-Gracias- contesto haciendo que la Metkayina le diera una ultima mirada antes de dar media vuelta, Lo'ak se acerco a el y le dio unos subes golpes en su brazo mientras ambos se miraron por leves segundos. Fue entonces que el menor bajo sus orejas y no espero mas para lanzarse a el en un abrazo, abrazo que fue muy bien recibido por su hermano quien cerro sus ojos y se dejo caer en su hombro derramando algunas lagrimas
-Lo siento tanto- susurro con pena el menor en su oreja mientras acariciaba la cabeza del mayor- fue mi culpa
-No- contesto débil- no fuiste tu- lentamente se alejo de el para regalarle una sonrisa triste- tu la quieres- le recordó haciendo que Lo'ak le devuelva esa misma sonrisa- ya ve con tu esposa- le dijo haciendo que su hermano finalmente saliera del lugar
Neteyam borro esa sonrisa que tenia para girarse en dirección a donde su esposa se encontraba, lenta y cuidadosamente se dirigió hasta la cama y se recostó a su lado, paso sus manos alrededor del cuerpo de la Mit'kante para darle un abrazo brindándole apoyo, contención y seguridad.
-Estoy aquí corazón- dijo sobre su oreja tratando de sonar fuerte- justo aquí
-¿Darek?- logro pronunciar con voz frágil debido a todo el llanto que había salido de ella desde muy temprano
-Con mis padres, será mejor que se quede con ellos por un tiempo- informo Neteyam ya en un tonto triste
-Lo siento- sollozo Aleia haciendo que el hombre apretara mas su abrazo- debí ser mas fuerte y todo esto no estuviera pasando- continúo diciendo haciendo que Neteyam apretada sus dientes y cerrara sus ojos sintiendo rabia y pena al saber que su esposa se estaba responsabilizando por un hecho que los humanos había ocasionado, nuevamente- Darek no tendría que...
-No es tu culpa mi amor- interrumpió- tu no creaste esa nave y dictaste ordenes para que te ataquen- sintió como su llanto comenzó a tranquilizarse debido a sus palabras- los únicos responsables de esto son los demonios- su voz transmitía cierta rabia y dolor- pero no es tu culpa, nada de esto lo es- luego de cierto segundos en silencio Aleia suspiro fuerte cerrando sus ojos liberando esa pequeña lagrima que estaba amenazando con salir, sintiendo aun los brazos de Neteyam rodearla dio media vuelta para tenerlo frente a su rostro
-La Tsahík- comenzó diciendo con su mirada sobre su cuello, no era capaz de mirarlo y no entendía el porqué, quizás porque se sentía de cierta forma culpable por lo sucedido o porque no le dijo sobre su embarazo cuando debía hacerlo ¿Qué hubiese sucedido si no aceptaba la salida a Lo'ak? ¿Qué hubiera sucedido si iba en busca de Darek en vez de ir a buscarlo a el? ¿Qué hubiera sucedido si le decía a Neteyam sobre su embarazo cuando estaba festejando con su nuevo grupo de amigos? Hubo tantas opciones, tantos caminos y solo fue por uno, el del tormento, el camino del desastre y la destrucción, el de las penas y descontento ¿Por qué Eywa no le había mandado una señal? ¿Por qué hacerla pasar por estos momentos si era su fiel servidora? ¿Acaso era su karma por haberle deseado la muerte a alguien que si murió?- La Tsahík dijo que percibió el tiempo que tenía y la energía que nuestro bebe emitía le daban cierta sospecha para saber su sexo- comento llevando lentamente su mirada hasta el rostro de su pareja, noto como una cara curiosa con ojos tristes la observaban con mucha atención- una niña- dijo con voz quebrada- iba a ser una niña- repitió soltando lágrimas, Neteyam la abrazo fuerte colocando su cabeza entre su cuello, trataba de mantenerse fuerte para darle toda la contención y estabilidad posible
-Ya paso- decía acariciando sus cabellos- ya paso, ya paso- continúo diciendo tratando de convencerse así mismo, fue ahí cuando sintió que no podía mantenerse fuerte, apretó mas a su esposa mientras lágrimas y sollozos salían de el combinándose con el llanto de su mujer- estaremos bien- dijo con dificultad casi en un suspiro- estaremos bien- repitió
Aleia parecía haber caído en una depresión, pues los días siguientes no quiso levantarse de la cama manteniendo solo una postura. Era comprensible, después de haber pasado por todo eso, ella tenia todo el derecho de deprimirse. En cambio, Neteyam quien tenia el corazón destrozado fue el que se dispuso a no dejarlos morir, decidió suspender su asistencia a los entrenamientos para ser el quien se levantara y preparara el desayuno para los dos, aunque ninguno tuviera ganas de alimentarse, obligaba a ambos a comer y tratar de recuperarse pues aun estaba Darek y no quería estar tanto tiempo lejos de él, Darek necesitaba a sus padres, los necesitaba bien y estables.
Los días fueron pasando, cuando Neteyam considero que estaba mejor fue en busca de su hijo, a diferencia de Aleia el se movía y realizaba actividades para despejar esos pensamientos que lo atormentaron en un principio, de vez en cuando se acordaba del suceso, pero prefería considerarlo un hecho de superación que seguir deprimiéndose por ello. No así, la Mit'kante prefería no hacer nada mas que llorar, su esposo le daba agua y alimento para evitar una deshidratación o algo peor. Cuando Darek volvió un cambio notorio apareció en ella, por fin presentaba movimiento, solo iba de su cama a su cuna y viceversa, pero era movimiento, al fin y al cabo, era un avance.
Las primeras sonrisas comenzaron a aparecer cuando jugaban con su hijo, Neteyam se ponía feliz al verlos pues eran las únicas veces en la que la veía sonreír después de varios días. Cuando su hijo dormía, la actitud depresiva regresaba y su mirada perdida y cansada se presentaban, el hombre peleaba cada vez mas con esto, trataba de hacerla hablar de otras cosas, le proponía hacer actividades dentro del hogar o darles masajes relajantes mientras él le decía cosas que le subieran el ánimo, pero nada parecía funcionar, ella no quería ayuda.
Un día que él estaba preparando el almuerzo le propuso que sea su acompañante y ambos cocinaran, como todos los días le ofrecía siendo siempre rechazado. Para su sorpresa, esta vez acepto, pudo decir que fue uno de los mejores momentos luego de un largo tiempo, hablaban de lo que harían y como se dividirían las cosas, se movían de un lado a otro haciendo sus debidas labores. No fue hasta que Aleia sin querer mancho con puré el pectoral del hombre quien sonrió para tomar un poco de la masa y manchar su nariz, comenzando así una guerra de papilla. Se lanzaban el alimento que iba a ser para el menor que dormía plácidamente en su cuna, entre el jugueteo y las risas se acercaron para mancharse mas sus cuerpos, no fue hasta que Neteyam tomo las muñecas de la mujer para mirarse por varios segundos y tener ese acercamiento que hace mucho no tenían, el primer beso después de todo este tiempo, después de esos estados depresivos, después de esa tan tormentosa situación, finalmente había ocurrido. Una sonrisa apareció en sus rostros luego de alejarse para ordenar todo y preparar otra papilla a su hijo.
Aleia parecía mejorar con el tiempo, ya no lloraba tanto, solo cuando el tema volvía a su cabeza. Ahora era ella quien se despertaba antes que su pareja y preparaba el desayuno, hacia el almuerzo y la cena. Su vida comenzaba a volver, a tomar ese brillo que había tenido, a recuperar esa relación con su esposa e hijo, incluso planeaban regresar a sus labores.
-¡Aleia! ¡Darek!- entro gritando Neteyam a la carpa haciendo que ambos voltearan a verlo- ¡Tienen que salir!
-¿Por qué? ¿Qué sucede?- cuestiono Aleia con preocupación cargando a su bebe entre sus brazos, noto como su pareja se acerco tomo sus brazos y le sonrió ampliamente
-¡Los Tulkun han regresado!- exclamo alegre- están todo allá- dijo apuntando hacia el afuera- disfrutando, hay que ir, Darek debe conocerlos- Aleia sonrió ante la noticia y proposición de su esposo
-Vamos- contesto antes de caminar fuera del lugar, una maravillosa tarde los esperaba como familia, al fin algo precioso iba a ocurrir luego de momentos tan malos y estaba ansiosa por disfrutar cada segundo
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La Nueva Na'vi 2 | Neteyam Sully
FanfictionContinuación de la historia "La Nueva Na'vi | Neteyam Sully" Para entender esta historia debes leer la primera parte pues trae nuevos personajes y viene de una historia algo complicada entre nuestra principal pareja En esta historia se verá como Net...