Calla y bésame

1. A miles de Kilómetros

POV ALEX

- Cielo, llámanos en cuanto llegues y te instales - me dijo mi madre mientras me acariciaba las mejillas.

- Te echaremos de menos Alex - confesó mi hermano Lluis dándome un abrazo - estoy orgulloso de ti, de que hayas podido cumplir tu sueño a pesar de lo del abuelo.

Al oír eso corrieron pensamientos melancólicos por mi mente que se desvanecieron al oír la voz de papá.

- Veo que ya no eres la pequeña Alex. Te has convertido en una gran persona, estoy orgulloso. - papá me dio un beso en la frente y me envolvió con sus brazos como me hacía desde pequeña, yo no era muy grande, ni mucho menos. Era muy bajita. Y mi padre muy alto. Solía burlarse de eso.

Belén se tiró encima de mí a abrazarme provocando que  acabáramos de en el suelo. Me revolvió el pelo y soltó esa risa tan peculiar que tenía .

- Como en este tiempo que estés fuera te hagas mejor amiga de una de esas americanas pijas iré yo misma y te traeré aquí a España de la oreja. Et queda clar? - dijo muy seria

- Entendido mi comandante - bromeé

- Me alegro por ti Alex, disfruta de esta experiencia - me aconsejó Adrián y se despidió de mí con un abrazo.

Y como no, allí estaba él, mirándome como un cachorrito triste.
- No t'oblidis de mi

- Com vaig a oblidarme de tú Marc?

- T'estimo Alex, i com se t'ocurrixca reemplaçar-me per un americà pijo d'aquests vaig a Florida i te'n trac jo mateix, m'has entès?

- No diguis bobades Marc. Cuida'ls val? - marc se acercó a mi y me besó apasionadamente, con uno de esos besos que tanto me gustan.

Me despedí de ellos y embarqué en el avión. Había estado trabajando en la cafetería de mis padres (una de las mejores cafeterías de Barcelona) desde los 14 años con un buen sueldo para poder permitirme varios caprichos. Algo que me encantaba.

Subí a los compartimentos superiores de la cabina la maleta de mano y mi mochila de Vans, que sería la que llevaría a clase, donde llevaba los cascos, chuches que me había comprado en el aeropuerto, un bocadillo... Si, por si no os habéis dado cuenta me encanta comer, mis amigos me tienen envidia porque como como dos leones pero no engordo, qué se le va a hacer.

Me pasé todo el viaje viendo películas y series que tenía descargadas en el portátil y escuchando música. La verdad es que me alegraba de haber cogido el vuelo en primera clase.

Hasta que aterricemos voy a contaros un poco sobre mí.

Mi nombre es Alexandra Capdevila, pero todos me llaman Alex. Mi mejor amiga es Belén, no nos conocemos de hace mucho tiempo pero es como de toda la vida. Mis padres Arnau y Carme y tienen una de las cafeterías más famosas de toda Barcelona, donde vivo yo. Tengo un hermano 2 años mayor que yo, Lluis, siempre he tenido muy buena relación con él, pero eso no significa que no estemos todo el día picándonos y haciéndonos rabiar. Me gusta mucho la ropa, y mucho es mucho. Mi novio se llama Marc, llevamos 2 años juntos, y como no mi mejor amigo Adrián es el novio de Belén. Tengo 17 años, y desde que a los 6 años mi tía me contó cómo había sido su viaje a Estados Unidos con una host family con 17 años lo tuve claro, iba a hacer todo lo posible por seguir sus pasos.

La idea de vivir con una familia que me tratase la mitad de bien que la trataron a ella, todas esas casas tan grandes y lujosas, los bailes de instituto, absolutamente todo era una experiencia que nunca olvidaria.
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Unos minutos después de aterrizar nos dieron permiso para bajar del avión. Cogí la mochila , mi guitarra y una bolsa de deporte con lo esencial que había dejado en la cabina de equipaje y me puse detrás de un hombre corpulento de mediana edad.