𝐒𝐞𝐫𝐞𝐧𝐝𝐢𝐩𝐢𝐭𝐲 (Fred Weasley)

《23》

Narra Alice:

- Papá... que grata sorpresa... verte -Dije al voltear, y ver a mi padre sentado en el sofá.

- También me alegro de verte hija -Se puso de pie, y me abrazó.

A pesar de su ausencia, mi padre es bastante afectivo, lo cual agradezco. Lo único malo es que se deja influenciar bastante por mi madre y sus ideas conservadoras.

- ¿Cuándo llegaste? -Dije luego de corresponder su abrazo y apartarnos.

- Esta mañana y me di con la sorpresa de que nadie estaba en casa -Suspiró.-

- Mamá fue a Francia, creo que regresará en unos días -Lo miré.-

- Y ¿Tú? ¿A dónde fuiste? -Me miró intrigado.- No es común que salgas de casa, a menos que sea por Hogwarts -Comenzó a caminar en dirección a la cocina.

- Ah... mis amigos me invitaron a desayunar en su casa -Dije hablando con tranquilidad.

- ¿Qué amigos? No creo que sea esa mestiza de apellido Wright -Me miró seriamente.- ¿O me equivoco?

- No Padre.... mis amigos son Sangres Puras -Me mordí el labio con molestia, por la situación.

- Me alegra oír eso -Sonrió mientras tomaba una fruta.- Ya sabes que el apellido Lougthy es muy bien visto y no hay que manchar su reputación... no como tus hermanas -Se acercó a mí.

- Lo sé Padre... no te preocupes -Desvíe la mirada.

- Me alegra oír eso -Dio unas palmadas en mi hombro.- Eso diría si tu madre estuviera aquí -Comenzó a reír.- Tranquila, no le diré nada... pero en la cena quiero más detalles de tu salida

Suspire aliviada, a veces padre podia ser muy bueno fingiendo o mejor dicho actuando. Supongo que son habilidades que se obtienen al trabajar tantos años como Auror, y encubierto.

En la cena, tal como lo dijo me interrogó sobre mí pequeña visita a mis amigos. Le conté a grandes rasgos lo sucedido, evitando varios detalles como el hecho de que Beth se emborrachó y que me había presentado oficialmente ante mis suegros. Puesto que, no le he contado sobre mí relación con Fred, no creo que sea momento aún.

Días más tarde...

Hoy era el día en que acordamos reunirnos en el Callejón Diagon, y así comprar lo necesario para el respectivo año escolar. Ya tenía todo lo necesario, es decir, la carta de Hogwarts, un pequeño bolso para cargar todo. Aunque, faltaba lo más importante, el dinero y de eso se encargaría mi Padre.

- ¿Padre? -Dije al ingresar en su despacho, pero no se encontraba allí.

Al regresar por el corredor, me lo encontré saliendo de su cuarto con ropa de salir.

- ¿Debes ir al Ministerio? -Dije curiosa, aunque normalmente va con su uniforme.

- Por suerte no -Dijo acomodando su saco.- Te acompañaré en tus compras -Sonrió.- Como en tu primer año

No me disgustaba la idea, porque casi no paso tiempo con él. Pero ya había quedado con mis amigos y también esta el detalle de que Fred estará presente; y puede revelar nuestra relación.

- No te molestes Padre -Dije intranquila.- Te aburrirás con ello ¿Por qué no mejor descansas? Acabas de volver de una peligrosa misión

- Tienes razón sobre lo de la misión -Comencé a bajar la guardia.- Pero prefiero que pasemos tiempo de calidad -Sonrió.- O acaso... -Me miró con el ceño entre fruncido.- ¿Te avergüenza que te vean con tu padre? -Fingió dolor.