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Pov Becky

Y lo hizo.

Vaya que lo hizo.

Santa mierda.

¿podía existir algo mas sexy que Freen cuando se corría? La visión de ella arqueando la espala alzando los pechos de esa manera y sus ojos oscuros y llenos de lujuria era increíble, ademas de sus gemidos y grititos de placer eran música para mi. -Ahhhh...mi...mi amor.... -murmure entre dientes mientras nuestros cuerpo se sacudían en espasmos ligeros y regularizábamos nuestra respiración conmigo aun entre sus piernas.

-wow eso fue.....tan bueno- susurró con un toque de diversión en su voz, nuestra respiración regreso a la normalidad y ahora estábamos relajándonos en los brazos de la otra, su cabeza estaba en mi pecho y sus dedos acariciaban mi abdomen suavemente, mis manos en su espalda desnuda la acariciaban superficialmente como si fuera una muñeca de porcelana que no quisiera romper. -¿siempre es así?

-No. Nunca fue así para mi- y no mentía, siempre fue como instintivo, el placer era momentáneo.- Hacer el amor es diferente y ahora lo entiendo, no se compara a nada de lo que he sentido antes....es especial.-ella asintió distraída y una largo bostezo se hizo presente en ella, le sonreí y apreté mas su cuerpo al mio. -Duerme amor...mañana sera un nuevo día.

-Uhmmm si...Buenas noches. -murmuro y dejo un beso en mi pecho sobre mi corazón. -Te amo...

-Te amo conejita más de lo que te imaginas. -bese su frente con un ternura infinita, nada se iguala a la emoción que siento al escuchar ese te amo de sus labios. Nada.

Encontré a la mujer de mi vida sin buscarla y no la dejare ir.

Mi mujer.

Mía.

A la mañana siguiente

Buenos días Señorita Armstrong
                       
-Buenos días. -salude cordialmente a las cinco mujeres que envío la mejor floristería de Bangkok -¿Tienen todo listo como ordene?

                             

-Si señorita. -afirmo la que parecía la jefa del grupo, una señora mayor y muy amable, las otras chicas me miraban con un brillo de lujuria en sus ojos.- Esta todo tal cual lo dispuso y aquí están los contratados de confidencialidad.                           

Fui muy especifica con la dueña de "El Jardín de los tulipanes" el personal tenían  que ser mujeres y debían firman el acuerdo para evitar que alguna fuera con el chisme a la prensa. Ademas cada una fue investigada y se les solicito dejar sus móviles en la entrada para que no se les ocurriera sacar fotografías.  Habia ordenado 200 tulipanes blancos, 100 tulipanes rosados y una de color rojo, las chicas se encargarían de ordenar en jarros los tulipanes por toda la habitación donde aun se encontraba mi conejita dormida, por ello era necesario el acuerdo y que fueran todas chicas las que hicieran este trabajo, nunca dejaría que ningún hombre admirara la desnudes de Freen
                             
-Muy bien. -asentí y le pase los contratos a cada una de ellas. Los chicos de seguridad habían ayudado a subir los tulipanes y ahora el Departamente era inundado por un delicioso aroma. El hermoso tulipán rojo de tallo largo estaba guardada en una delicada caja, era un tulipán único y muy especial en ella estaría la otra sorpresa que había llegado el día de ayer. -La habitación esta por aquí.                             

Nunca imagine la experiencia surrealista que seria hacer el amor con Freen, sin duda fue la mejor noche de mi vida y hoy quise darle el mejor despertar para que tenga presente cuanto la amo y lo que significo para mi este acto de amor.
Me desperté temprano para arreglar todo.                           

Cambiarías Por MiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora