7-. ¡Cangrejos, no!

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Pascal—. ¿Es necesario que entre ahí?

Rose—. Muy necesario

Rigs—. No tienes ni idea de lo que estamos haciendo por ti, te estamos dando el trabajo más fácil, subir hasta arriba y encender el faro

Pascal—. Pero y- —Fue interrumpido por su compañera.

Rose—. Tú eres bueno escalando, así que haz lo tuyo

Rigs—. ¡Adelante! —Abrió la puerta y sin escuchar ni una palabra más de Pascal lo empujó hacia el interior.

Rose—. Ah, el faro cangrejo... Seguro que saldrá con unas abismales ganas de de golpearme

Rigs—. Tranquila, no lo permitiré —Mencionó desinteresadamente mientras rodeaba el faro.

Rose—. Eh, si, bueno je je —Su típico sonrojo aumentó ligeramente, aunque no se notaba.

Rigs—. Dime, ¿por qué se llama el Faro Cangrejo?

Rose—. Oh, buena pregunta, bien verás, este faro está infestado, está repleto de cimientos a punta de cangrejos, aquí es donde habita el 80% de la población de cangrejos del Mar de Zafiro, y eso, es mucho, aunque por las noches no son muy activos y apenas el 1% lo está

Rigs—. Así que infestado de cangrejos... —Se tomó un momento para visualizar el pavor y el pánico que estaba sufriendo Pascal ahí dentro —. Pascal debería estar chillando ahora mismo

Rose, soltando un suspiro se acomodó entre las rocas para recostarse y esperar a Pascal—. Sí, lo sé, debe estar desesperado, pero es por su bien, así al menos tendrá más valor

Rigs—. ¿Así que por eso lo obligaste a luchar contra Mesa?

Rose—. Así es, quiero que deje de ser tímido y tenga más autoconfianza, aunque eso signifique forzarlo a enfrentar sus mayores miedos...

Adentro, Pascal estaba siendo invadido por el miedo absoluto, corría de un lado a otro escalando y saltando a diestra y siniestra sin detenerse a razonar hacia donde se estaba dirigiendo.

Cada tres pasos se veía un cangrejo y eso lo alteraba, corrió y corrió, atravesó una puerta, observó plataformas, trampolines, trampas de fuego y demás, al escuchar que un jabalí estaba intentando romper la puerta no le quedó de otra que cruzar.

Lo más desesperante era que él no podía atacar de frente a ni una sola criatura de ahí, ya que los jabalíes tienen por naturaleza colmillos en el hocico, pero éstos tenían cuernos también.

Y ya ni hablar de los cangrejos y sus grandes pinzas, el gato atravesó la sala rápidamente, evitando caer al vacío del cual, él apostaba que se encontraba repleto de esos crustáceos rojos.

Al pasar al otro lado encontró cierta calma al caer debajo del suelo, al frente se veía un gigante engranaje que rodaba, tenía cuatro plataformas verdes por las cuales avanzar, y en el centro una palanca.

Pero decidió permanecer en ese espacio alejado de todo, un montón de cajas, cinco monedas, y por delante un abismo obscuro, era ideal para tranquilizarse.

Sin darse cuenta que la calavera que estaba al frente estaba temblando, cuando él se encontró tranquilo se paró, observó el movimiento de las plataformas y espero pacientemente.

Pascal—. Vamos... Sólo... Saltas, aterrizas, después saltas hacia la palanca, la activas y sigues tu camino... Sencillo...

Se acercó más al borde cuando una plataforma estaba por ponerse en posición, pero ésto sólo hizo que la calavera se despertara y de forma rápida corriera de un lado a otro, chocando con Pascal antes de que él siquiera haya saltado.

Este golpe le descontroló e hizo que casi cayera por el borde, el miedo hizo que Pascal reaccionara en milésimas de segundo y se agarrara del borde antes de caer.

Maldiciendo su suerte escaló hasta regresar a dónde estaba momentos antes y lo intentó nuevamente.

Varios minutos más tarde en los que avanzaba cuidadosamente llegó hasta una puerta secreta al tener ese arranque de pánico al ver muchos cangrejos intentando rodearle.

Resultó que esa puerta escondida llevaba hacia el foco del faro por lo tanto no perdió más tiempo y comenzó a subir esa escalera de oruga que estaba, hasta cierto punto, en mal estado.

Al subir encontró que lo que faltaba era bajar una palanca...

Rigs—. Ya se está tardando rojitas

Rose—. ¿Oye por qué lo llamas así?

Rigs—. Lleva a todos lados ese estúpido pañuelo rojo como si fuese parte de su vida, si se la quitas comienza a hacer un puñetero y cuando se enoja es lo más tierno del mundo por lo mismo

Rose—. ... Mejor no pregunto por lo demás...

Rigs—. ¿Lo demás?

Rose—. Ay...

Del faro emanó una luz potente que iluminaba todo el mar a su alcance, a la lejanía se encontraba un barco varado en medio de un montón de rocas que sobresalían al mar.

Este no se podía mover ya que iba a chocar con las rocas en la oscuridad, pero al ser iluminado momentáneamente por la luz del faro recibió su luz de esperanza.

???—. ¡Ahoy marineros! ¡Al fin se hizo la luz! ¡Levántense mis camaradas que ésta gata quiere puerto!

Y como si se tratara de un rodeo, soltó un grito de vaquero mientras empujaba a fondo la palanca de velocidades haciendo que el motor se viera obligado a trabajar de 0 a su máxima capacidad dando la vuelta en un perfecto drift y dirigiéndose a Portobello.

De regreso con Pascal, él no la estaba pasando muy bien, habia regresado hacia el interior del faro, subiendo hasta la última puerta que había al subir entre caja y caja.

Del otro lado se encontró con un pasillo largo que atravesó en cuestión de segundos, pero hubiera deseado no hacerlo de saber lo que venía.

Al entrar en una sala que conectaba el pasillo con otro pasillo se topó con que del extremo opuesto se aproximaba un cangrejo gigante, que al entrar en contacto visual se estremeció para posteriormente sacar unos pinchos por todos lados.

Pascal—. ¿¡QUÉ MIERDA!?

El terror se apoderó de Pascal, y aumentó exponencialmente al ver a la criatura correr hacía él, y seguro era para darle las buenas noches, pero pa'siempre.

Pascal quiso regresar por dónde vino pero se encontró con que la compuerta estaba cerrada, así que maldijo nuevamente su suerte para después saltar hacia una plataforma que estaba del lado opuesto en el aire.

Pascal—. A ver, llega hasta acá bestia inmunda...

El cangrejo se volvió a estremecer y corrió el doble de rápido, trepando la pared, corriendo por el techo, bajando y repitiendo el ciclo, corriendo por las seis paredes que había en la sala, esto dejó petrificado a Pascal.

Después, al estar en el techo se dejó caer cayendo en la plataforma junto a Pascal, aún conservando la misma agresividad y los pinchos.

Inmediatamente el gato saltó y el cangrejo por poco lo agarra. El combate finalizó cuando el animal se despojó de sus pinchos y Pascal vió la oportunidad de golpearla con todas sus fuerzas.

El golpe fue tan fuerte que la compuerta se abrió, dejándole la salida libre a Pascal, quien, luego de unos minutos salió vivo del faro.

Rose—. ¡Hey Pascal! ¿Cómo te fu-?

Dicho y hecho, Pascal lleno de rencor la tomó del cuello, la levantó y la azotó contra el suelo partiendo una de las rocas que se encontraban ahí.

Si bien consiguió su venganza, Rigs se encargó de la represalia, mandando a dormir al gato haciendo uso de un pedazo de concreto que arrancó de la estructura del faro y que sin dudarlo lo estampó entero en el rostro del gato.

Quedando así, la bestia, la bella y el bello durmiente.

~~~[Fin Del Capítulo]~~~

The Amazing World of P.A.W.S!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora