24

119 9 0
                                    

Especial: Lisandro Martínez x Nicolás Tagliafico

Lisandro amaba incondicionalmente y de manera única a su novio, jamás sería capaz de hacer algo para lastimarlo o que lo ponga incómodo.
Pero así como su deseo por Nicolás era grande, su deseo de tener una familia también lo era...

Se encontraban acostados y abrazados bajo las sábanas mientras se dedicaban caricias suaves sobre la desnuda piel que hace un rato había sido marcada como muestra de tanto amor y tantas ganas de ser perteneciente solamente al otro.

–Amor...– Lisandro habló suave mientras se dedicaba a escuchar los suaves latidos de su novio que acariciaba su espalda y cintura con delicadeza.

–¿Que pasa?– Respondió Nicolás con la voz acaramelada por el sueño, haciendo vibrar su pecho debajo de Lisandro.

–Niki... Sabes que... Hace tiempo vengo pensando y...– Martínez tomo aire mientras trataba de no ponerse nervioso ante la petición que iba a hacer. –Amor... No te parece que estamos listos para dar un... ¿Siguiente paso?– Preguntó con cautela mientras dejaba suaves caricias en el pecho de su novio.

–¿Querés que nos casemos?– Preguntó Nicolás abriendo los ojos grandes tratando de no entrar en pánico.

Nicolás amaba a Lisandro, en serio lo amaba, pero no sé sentía listo, no ahora, no cuando él vive en Francia y su novio en Inglaterra, no siendo una relación dentro de todo reciente, simplemente no.
Le daba miedo, a Nicolás le daba mucho miedo el compromiso, los planes a largo plazo. Pero no lo culpen, no cuando se supone que quienes debían de enseñarle la estabilidad de los planes a largo plazo no cumplieron con esa tarea.
A Nicolás le daba mucho miedo terminar como sus papás, divorciados y peleados, simplemente le causaba escalofríos el solo hecho de pensar en que las cosas con Lisandro, su Lisandro podrían terminar así.

Aunque todo eso se calmó al oír la suave risa de su novio. –Sos un tonto, no te asustes boludo no es nada malo tampoco el casarse.– Su novio lo abrazó para transmitirle seguridad y Nicolás sentía que podía volver a respirar. –Me encantaría casarme con vos, pero no ahora, creo que ninguno de los dos está listo, aparte el tema de la distancia ya es complicado, imagínate si nos casamos.– Lisandro suspiró y descanso su cabeza sobre el pecho de su novio, comenzaba a arrepentirse de confesar su deseo.

Para Lisandro la familia era algo más que importante, era algo vital, como su mayor pilar de vida. Y la idea de poder formar una con alguien a quien ama lo pone feliz en sobremanera.
Aún así, le da mucho miedo confesarlo, sobre todo sabiendo que la historia familiar de su pareja no era lo mejor.
Desde tíos burlones hasta el divorcio de sus padres. Y ¡ay! cómo le dolía al mayor el divorcio de sus papás.

Con las únicas personas que Nicolás había hablado sobre el divorcio de sus papás eran; Lisandro, Emiliano y Alexis. Y no es porque no se pueda confiar en nadie más, sino porque a Tagliafico le costaba mucho abrirse, y peor con algo que le dolió tanto como el divorcio de sus papás, algo que sin duda marcó su adolescencia y el resto de su vida hasta día de hoy.

–Entonces... ¿Cuál sería el siguiente paso?– Lisandro se vio acorralado al sentir como su novio persistía con mantener esa conversación.

–Es que... Me gustaría que vos y yo podamos...– Lisandro tomó aire drásticamente y cerro los ojos tensando su cuerpo, realmente tenía muchos nervios de confesar aquel enorme deseo. –Me gustaría que formemos una familia.– Nicolás se levantó drásticamente de la cama y miro hacia su novio asustado.

–Yo... emm...– El de pelo marrón trato de inventar una buena excusa mientras sus ojos evitaban chocar con los de Lisandro. –Tengo hambre, ahora vuelvo.– Tan pronto como terminó de hablar salió corriendo de la habitación dejando a un Lisandro con una sensación de frío en la piel y dolor en el corazón.

Mí bella arañita (Mac Allister X Julián Álvarez)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora