Alexis y Julián deciden emprender un viaje sin retorno a descubrir lo que para ellos es el verdadero amor, como transmitirlo y con quién compartirlo, quien diría que en medio de esa búsqueda por el significado del amor se encontrarían mutuamente y d...
Ya pasó una fecha desde el partido contra Arabia, y no entiendo porqué pero cada día me siento peor, me siento perdido en mí mismo, me siento hueco, vacío, aburrido, y abrumado, los días son largos y las noches también, no entiendo que me pasa, quizás es el cansancio de la monotonía. Ya saben, el entrenar, comer, ir a la habitación, dormir, levantarme, y así todo el tiempo, quieras o no eso cansa.
Agregado a todo eso Julián ha estado actuando raro, siento que todo lo que hemos avanzado; se tiró a la basura, ya casi no me habla, no se acerca a mí como antes, siempre que entro a una habitación él se levanta y se va. El otro día le pregunté si quería mate, algo tan básico como eso, y me dijo que no con la cabeza, ¡Ni siquiera me miró! Realmente eso me molesta, porque me dio todo para pensar que todos mis sentimientos eran correspondidos cuando aparentemente no es así.
–Bueno gente, me voy a dormir.– Sonreí levemente mientras tomaba mí plato para llevarlo adonde lo lavan.
–¿Tan rápido Ale? No comiste nada.– Dijo Lean mientras me miraba algo preocupado, me encanta como se preocupa por todos siendo que él (y su esposo) tienen muchos más problemas que el resto.
–No tengo mucho hambre.– Levanté los hombros y los que estaban en la mesa me miraron extrañados, últimamente no tengo nada de apetito, y según Taglia se me está notando, supuestamente estoy adelgazando demasiado rápido, pero bueno; ¿Que quieren que haga? No me da hambre.
–¿Te sentís bien Ale?– Preguntó mí capitán mientras me miraba levantando una ceja.
Si tengo que responder con sinceridad... Realmente no, me siento para la mierda emocionalmente, pero no ese "para la mierda" de: "me quiero matar" sino que, este "para la mierda" es distinto, es ese "para la mierda" que significa vacío, es ese sentimiento de nada, de literalmente nada, y al mismo tiempo dolor, dolor raro, dolor lleno de nada.
Pero es obvio que no puedo decir todo eso, así que simplemente respondí con un: –Tranqui, estoy re bien, creo que por eso estoy comiendo menos, mucha emoción.– Fingí una sonrisa y me fui rápidamente antes del interrogatorio que seguramente vendría luego de eso.
Al llegar a la habitación puse la tarjeta y pase sin tocar encontrándome en la situación más bochornosa de mí vida.
–¡GOLPEA LA PUERTA PELOTUDO!– Y ahí estaba mí compañero de habitación tapando su entrepierna con las sábanas y la de su novio con una almohada.
–¡PERDÓN! ¡JURO QUE NO VI NADA!– Me tape los ojos y cerré rápidamente la puerta quedando detrás de esta con el rostro todo enrojecido.
Luego de unos quince minutos (los más vergonzosos y largos de mí vida) abrieron la puerta, y pude ver cómo un avergonzado Lisandro salía rápidamente hacia su habitación que se encontraba en diagonal a la nuestra y cerraba la puerta detrás de él. Mientras que a mí me esperaba un colérico Nicolás con ganas de asesinar.
–Dale, pasa que no te voy a hacer nada.– Sentí que tenía once años de nuevo y que había manchado de tierra las zapatillas nuevas.
Pase prácticamente corriendo pero un golpe en la espalda baja me hizo tirarme rápidamente en mí cama, hace rato no recibía una nalgada. Por lo general me daban de esas cuando me retaban (la misma situación que ahora) o cuando a Cami se le daba por verme mucho el trasero, según ella es esponjoso y adictivo, no sé, cosas lésbicas.
–¡Ayy! ¡¿Que te pasa?!– Me frote mí nalguita derecha mientras él comenzaba a tirar las sábanas y acolchado de su cama al piso.
–¡¿Que me pasa?! ¡Me pasa que estaba teniendo el momento más excitante con mí novio desde hace como tres meses y me interrumpiste! ¡Eso pasa!– Habló enojado mientras buscaba sábanas en el clóset de nuestra habitación, irónico que esté dentro del clóset cuando ya salió hace rato.
–¿Tres meses? ¿Hace tanto que no te rompen el culo? Con razón tan buena defensa la tuya.– Me reí burlón y sentí que me tiraron un almohadón a la cara. –¡NO ME TIRES ESTO! ¡TIENE OLOR A HUEVO!– Lo tiré rápidamente mientras corría al baño a limpiarme la cara, no me interesa tocar algo de esta habitación que haya sido contaminado con cosas sexuales.
Escuché como se tiró en la cama y resoplaba frustrado. –Nunca te pongas de novio.– Al verlo tan frustrado decidí sentarme a su lado en la cama, claramente después de lavarme bien la cara.
–Perdón Nico, te juro que no escuché nada desde afuera, sino los hubiera dejado tranquilos.– Suspiré y acaricie levemente su cabello, por algún motivo mí compañerito de cuarto ha estado bastante irritable últimamente. –¿Que pasa Nico? ¿Por qué andas tan tristoño?– Sonreí suave mientras seguía con los mimos a su pelo, muchos pensarían que somos una pareja re gay, pero no, o sea, si somos gays, pero no pareja, solamente amigos.
–Pasa que...– Suspiro y lo mire cerrar sus ojos con cierta ira, algo que realmente es raro en él –Es difícil tener a alguien a quien amas incondicionalmente y no podes demostrarle lo que sentís, no porque no sea recíproco, sino porque no encontrás el momento indicado para hacerlo, ¿Entendés? Es como que, quiero demostrarle a Lisan que lo amo y que daría todo por él, pero siento que nada es suficiente y mí más pura prueba de amor es... Hacer el amor, o bueno tener sexo, pero con sentimiento. Pero no encuentro el momento, hay veces que yo no tengo ganas y él si, o al revés, o los dos tenemos ganas pero no tenemos tiempo o así. Es como si nunca pudiera terminar de concretar eso que quiero demostrar.– ¿Si lo entiendo? Claro que lo entiendo, y a la perfección.
Taglia es una persona muy segura de sí, y le gusta confiar en quién ama, no solo eso, sino que le gusta demostrar que ama, pero siempre a su manera. Es duro con él y a veces llega a estar muy cansado por explotarse a si mismo. Y considero que hoy es una de esas veces, es una de esas ocasiones en las que no es más, que odia al mundo y que quiere dormir, y lo entiendo, últimamente me ha estado pasando demasiado eso. Más ahora que Julián está así de raro.
Realmente me dí cuenta que no está mal estar agotado, pero que si está mal; hacerte mal por estar agotado, no comer, no dormir bien y sobre pensar las cosas te hace demasiado mal, y eso no es bueno. No es bueno que uno llegue a esos extremos, realmente con todo lo que ha pasado estos días, creo que el amor no es algo tan bueno después de todo. El amor te consume, te mata y destruye, te pone un peso encima que quizás antes no tenías, te hace esforzarte más allá de lo que tu cuerpo puede para "demostrar" a alguien más algo. Algo que quizás esa persona ni siquiera valora.
Realmente hoy comencé a pensar, si vale la pena estar enamorado, si vale la pena amar, porque a este punto, parece que amar solamente está trayendo problemas y confusiones a mí corazón. Y no solo a mí corazón, sino que a mí en general, y eso no me agrada, no me agrada para nada.
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Hola familia, simplemente se me dio la oportunidad de actualizar de manera rápida y además tuve bastante inspiración, así que lo utilice a mí favor.
Espero que les haya gustado el capítulo, dejen comentarios sobre ideas y demás, todo es bien recibido, y sin más que decir, nos leemos pronto bye bye.
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