3| PRESAGIO (Harry Styles)| *Tercera y última parte*

Capitulo 19.

Impulsivamente mi cuerpo me lleva hacia la habitación que le indiqué a la supuesta Olive. Me dirijo corriendo de una manera tan veloz, que los policías quedan boquiabiertos. Rápidamente Bob viene tras mío. Entro a la habitación, y como lo supuse.

La prueba de todo.

Es como si estuviera hecho a propósito.

Arriba de una de las camas se encuentra una peluca con dos trenzas. La misma que llevaba esa muchacha. Encuentro una pequeña caja que contienen lentes de contacto azules. Sus gafas. Su ropa holgada. Y encuentro una pequeña cajuela que contiene maquillaje. Y maquillaje del bueno.

-Maldita sea –farfullo.

La policía comienza a tomar nota y las preguntas nuevamente presentes.

Me niego rotundamente y me dirijo a mi habitación.

No quiero responder ninguna pregunta, no estoy en condiciones de hacerlo. Tampoco quiero dejar todo esto en manos de Bob, pero por un lado sabía que meter a la policía en esto iba a poner muchas trabas.

Necesito pensar en algo ya.

Necesito la ayuda de alguien, pero no quiero meter a nadie en esto.

En "esto". Y si, uso ese término ya que ni yo sé en qué estoy metida. Siento mucha inseguridad, y me siento frustrada, ya que no puedo contar con la persona que más amo. No puedo contar con Harry. Ni tampoco puedo dejarlo solo a él. Siento que hay muchas cosas por descubrir. Harry también forma parte de "esto", pero no estoy segura de que en este preciso momento, esté de mi lado.

No puedo confiar en nadie.

¿O eso creo yo?

Mi madre no está aquí para ayudarme. No puedo, ni quiero meter a Millie en esto. No puedo confiar en Harry. Sólo me queda una persona, pero por un lado tampoco quiero meterla en esto. También tiene sus problemas, y uno más sería una gran carga.

-Mierda, mierda, mierda –mascullo entre dientes, dando un fuerte golpe a la pared.

No estoy segura de lo que está por venir, pero sé que tengo y debo estar preparada.

De repente, mis ojos comienzan a llenarse de lágrimas al no saber qué hacer. Al sentirme por primera vez sola en todo esto.

Al sentirme sola en la vida.

Caigo rendida de rodillas, y en ese instante rompo a llorar.

En cada lágrima descargo toda esta impotencia y bronca que siento. Descargo mi soledad... descargo aquel dolor que siento al estar tan distante de Harry.

Respiro profundo.

Me levanto y clavo mi mirada en la ventana de mi habitación.

Observo tres siluetas masculinas que, en ese instante no logro reconocer.

Un escalofrío recorre todo mi cuerpo.

La figura del medio, entra a mi habitación y en ese instante suspiro aliviada.

-No estás sola –susurra con voz ronca.

Las otras dos figuras se acercan hasta nosotros.

Sin dudarlo me lanzo a sus brazos dándole un fuerte abrazo.

-Gracias... -digo con sencillez. –Gracias Max.

Él me presiona con fuerzas, como si también hubiese necesitado de aquel abrazo.

-Nosotros también estamos contigo Heather –murmura Ryan, mientras apoya su mano en mi hombro.

Al verlo después de tanto tiempo, lo recibo con un cálido abrazo.

-Cuenta con nosotros –susurra Tyler.

-Gracias... -musito para los tres. –Eh, ¿Cómo es que están al tanto de todo? –pregunto, algo impactada.

-Me quedé pensando en algunas cosas –dice Max, mientras que Ryan y Tyler toman asiento en mi cama. –Mi mente es muy exigente y astuta. Y no se calla hasta que consiga tener bunas hipótesis.

Igual a Millie. –pienso.

-¿De qué hablas Max? –pregunto confusa.

-Estando en mi casa, escuché hablar a Millie acerca de una tal Olive, que era la supuesta sobrina de Amber, a quien reemplazaría en su trabajo aquí en tu casa. Dijo cosas muy extrañas, entonces le pedí una breve descripción de esa muchacha. Lo hizo tan bien y detallista que no me quedó una menor duda de qué me estaba hablando en el momento que me describió aquel collar que contenía un indiscutible talismán con forma de estrella. –Max hace una pausa y me mira fijamente. –Me quedé pensando en la manera de cómo te trató Harry, y de esa Rosie de la que me habías hablado. Así que tuve la necesidad de volver a los pabellones, y allí me topé con Harry y Rosie, la mujer que nunca había visto. Y lo primero que noté en ella fue un collar aquella estrella. En ese instante no me quedaron dudas de lo que estaba imaginando.

-Max, por favor necesito que seas más claro. –digo, con agotamiento.

-Dios mío Heather, más claro, échale agua –dice Tyler con obviedad.

Lo miro confusa.

-Concéntrate y piensa todo lo que te he dicho. –Max y yo conectamos las miradas. –Piensa Heather... Concéntrate.

Cierro los ojos y comienzo a analizar cada palabra que me dijo Max.

En ese momento me da una fuerte puntada en el pecho.

Niego con la cabeza.

-No puede ser... -vuelvo a negar con la cabeza al darme cuenta de todo. –Entonces todo esto, quiere decir que Olive y Rosie...

-Son la misma persona... -interviene Max más seguro que nunca.