Gula

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Gula

Hace ya mucho tiempo, conocí a una chica, que por respeto a su nombre, no lo mencionaré (por no encontrarse hoy caminando entre vivos, también). Simplemente la llamaré Gula, como uno de los siete pecados capitales con los que siempre estuvo emparentada.

Gula era una chica obesa. Gorda a más no poder. Alguien que no podía usar vestidos por su gran tamaño, una chica que muchos confundirían con un hombre. Era demasiado sencilla, demasiado descuidada. Era un desastre total.

Esa chica se sentaba en el rincón más oscuro que encontraba todas las tardes a comer. Bloqueaba su puerta para que nadie viera las migajas que se acumulaban en los extremos de su boca. Gastaba sus mesadas en diversos dulces. Se hartaba de comida cuando tenía ocasión. Comía, comía y comía... Aumentaba su peso con cada bocado que daba. Podría decir que ella era como una triste melodía vacía que nadie tenía como favorita. También que evocaba tristeza y lástima, que ella no merecía su situación. Pero lo hacía.

Gula siempre se encerraba, comía, probaba bocado y lo disfrutaba... Nunca se arrepentía.

Gula nunca sufrió de los llamados "trastornos alimenticios", quizás por eso su historia nunca melancólica o popular entre las personas. Les contaré que, esta chica se resignó. Ella nunca sería especial, ni bonita, nunca tendría un cuerpo despampanante y raquítico. Sus senos nunca serían firmes y su cuello jamás se distinguiría de su cara. Porque ella se sintió como un cliché. Y eso era.

Gula no era más que una réplica igual a millones más. Una chica sin nada que aportar al mundo. Alguien que no destacaba más que por su gordura, como muchos más. Todo de ella sobraba. Era la representación del típico "No quiero ser". Gula era todo aquello como lo que no te desearías ver. Gula era como una ofensa a cualquiera. Algo despreciable. Aquella persona que te haría lucir como un modelo ejemplar de belleza y salud. Un ser desigual y marginado.

Nadie respetaba a Gula.

Nadie quería ser como Gula.

Nadie estaba con Gula.

Nadie amaba a Gula.

Nadie más que ella misma.

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