Capítulo 4

286 22 0
                                    


El ensayo había sido increíble, a pesar de quedarse sin vocalista ya que este había salido con la excusa de tener una emergencia; sin embargo, todos sabían que esa emergencia tenía nombre. Quackity. El británico siempre dejaba de hacer sus actividades con tal de complacer a su "amigo" como lo llamaba cada vez que lo molestaban con respecto a su relación.


- ¿Creen que lo quiera? – Etoiles decide romper el silencio del estudio.

- Espero que sí, Quackity y Wilbur hacen una muy linda pareja. – Baghera opina mientras guardaba sus baquetas en su bolso.

- No sé, siempre que lo veo está coqueteando con alguien. – Suelta Slime. – Incluso parece que le gusta Mariana. - Suspira.

- Slime, Mariana es todo tuyo, literally [literalmente] nadie te lo está robando. – Se burla Foolish.

- Claro que no, he liked you and [tú le gustabas y] Roier siempre está con él and he always tries to flirt with him... [y él siempre trata de coquetearle] - Suelta molesto.

- Sólo juegan, mon chéri. [querido] – La rubia lo abraza.

- Yeah, right [sí claro] - Corresponde el abrazo dejándose mimar por su mejor amiga. ¿Lo dices en serio? – La observa buscando una respuesta positiva.

- Por supuesto, Mariana te quiere mucho a ti. – Deja un beso en su cabeza para después separarse y terminar de recoger sus cosas.

Etoiles y Cellbit parecían divertidos ante la actitud del de lentes, pues sabían que no importaba lo que dijeran, este siempre tenía la misma reacción ante el mismo tema.

- Estaba pensando en hacer una fiesta en mi casa para celebrar el comienzo de la gira. – Anuncia el de pelo platinado una vez todos salen del edificio. – Merecen un descanso después de trabajar tanto en el álbum.

- Suena bien por mí. – Sonríe Baghera ganándose un abrazo de su amigo al apoyarlo con la idea.

- Bien, entonces nos vemos el viernes. – Se despide Cellbit antes de subir a su coche y conducir hasta su casa.


Sus pensamientos se veían enredados, las ideas surgían y su casa no estaba tan lejos de su recorrido. Una sonrisa se dibujó en su rostro al pensar en el castaño. Y si...

Antes de poder cambiar de opinión se encontraba redireccionando su vehículo rumbo a su nuevo destino. 


***


El de gorro llegó con una enorme sonrisa a su casa en compañía de Wilbur, detalle que no pasó por alto el castaño, sabía que no tenía nada relacionado con el británico. Sin embargo, le daría el beneficio de la duda, entablaron una conversación sobre la sesión de Ironmouse y lo bien que había salido; todo estaba normal hasta que Wilbur fue a la habitación de Quackity por una sudadera para el chico, Quackity se habría salido con la suya de no ser por Roier, quién mencionó el favor que le había pedido a su mejor amigo aprovechando la ausencia del cantante. La conversación entre Quackity y Roier había pasado a un regaño por parte del menor después de escuchar lo ocurrido en la casa del boxeador.


- ¡Pero tú sí que estás pendejo, Quackity! 

- Baja la voz, mamon. - Le tapa la boca. - Wilbur puede escucharte. 

Tuyo - GuapoDuoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora