Plan inefable

Western

Este es un Ligur x Hastur extraño a este par de tontos juntos.
No es explícito pero hay mención de actos sexuales, leer con discreción

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Notas del autor
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Los demonios no confiaban en otros demonios, esto era por decreto oficial en el infierno. Pero en ocasiones debían de realizar tentaciones en conjunto, dependiendo del esfuerzo o la cantidad de tiempo que estas pudieran requerir.

Alivio no era una palabra que formará parte del vocabulario de un demonio, pero no había forma en la que pudiera explicar lo que sintió al ver llegar al demonio camaleónico. Ligur montaba un caballo grande, color marrón, con manchas negras esparcidas por el cuerpo del animal. 

“¡All hail satán!” Saludaron. 

Ciertamente, Ligur era de los duques más asertivos en el infierno y con el cual podría trabajar mejor. Por fortuna no fue ese estirado de Crawley. 

“Hagamos el recuento de las acciones del día” 

Comenzó con las tentaciones hechas en su camino hasta acá “Yo le dije a un hombre que no le diera nada a una familia pobre que estaba limosneando, pudo ser un filántropo, pero dentro de poco será todo un avaro.” 

La satisfacción al ver como el hombre guardo sus monedas y marcho de ahí fue increíble. 

Ligur prosiguió con su trabajo “Yo le dije a una señorita que otro pastel más no haría la diferencia, veremos como la glotonería la consume.”

Las risas demoníacas inundaron el desértico lugar. Y comenzaron a galopar. 

El nuevo mundo, para la humanidad, porque ellos sabían de su existencia desde antes, se había vuelto muy popular últimamente, así que los enviaron a tentar a los hombres de tales tierras. 

Se encontraron en medio de salvaje oeste, donde se encargarían de esparcir la maldad. Montando a caballo en medio de las llanuras desérticas y el clima seco, miro a su compañero en el crimen y se sintió sumamente confiado. 

El sembrar el caos fue sumamente fácil, iniciaron con un campamento de hombres y los tentaron para que robaran la pequeña aldea situada al pie de la montaña. Fue muy sencillo porque aquellos hombres ya llevaban en su campamento armas y demás cosas. 

Si no supiera que los humanos eran tan tontos y necesitaban el estar constantemente tentados, pensaría que ya estaban preparados para efectuar el robo. 

Había sido unos días muy productivos, cuando se situaron cerca de los cauces de un río, los animales debían tomar agua cuando encontraron un par de humanos muy sospechosos. 

Normalmente, los ignoraría, pero en esta ocasión llamo su atención, su manera de actuar, era un par de hombres corpulentos entre los arbustos. Llamo a Ligur para que o acompañará a investigar. 

El par no se dio cuenta de su presencia, aunque al inicio estaban alertas, mientras su extraño acto continuaba más se olvidaban de vigilar. 

Nunca antes le intereso la forma en la que interactuaban los humanos, pero este acto le llamo mucho la atención, como unían sus cuerpos y los molían contra el otro con fuerza, los gruñidos, jadeos y silbidos salían de los labios de ambos hombres. Sus cuerpos sudorosos por el constante vaivén fisco, parecía que la noche no era tan fría. En un momento dejo de ver a los humanos y observó a su compañero. No sabe como, pero el deseo de tocar y estrecharlo contra su cuerpo nacieron. 

¿Era esto a lo que llamaban lujuria? ¿Este placer? ¿Así era como se sentía esta necesidad que le exigía el pegar y unificar sus cuerpos? 

Tal vez Ligur estaba pensando lo mismo, porque en un momento a otro habían vuelto a su guarida, Ligur lo inmovilizo al suelo. Su cuerpo, cubriéndole por completo, sentía un placer inexplicable, mucho mejor que tentar humanos. 

Aunque no se sentía del todo bien, ¿Tal vez si imitaba sus movimientos? Recordó qué además de eso, sus cuerpos exponían una parte anatómica, nunca había sido consciente de que tal vez su corporación podría poseerla. 

Con un pequeño milagro demoníaco, la situación se emparejó a la de los humanos. El placer era indescriptible, de manera automática y natural comenzó el vaivén de caderas. Ligur lo empujaba fuertemente contra el suelo y él se aferraba con fuerza mientras experimentaba los placeres qué sus corporaciones podrían brindarle. 

Aún se mantenía oscuro, pero los primeros rayos del sol dictaban el comienzo del amanecer. Era el momento de continuar y volver al infierno, después de ese encuentro con Ligur no lo volvieron a hablar, pero siempre tenía una fascinación de trabar con él. 

Un par de siglos después, estaba aquí junto a Ligur, esperando a Crawley. 

“Bien. Sería un viejo mundo divertido si los demonios anduvieran confiando unos en otros. ¿Cómo se hace llamar aquí estos días?” 

Bueno, el mundo entonces era la mejor comedia, porque él confiaba en Ligur. 

“Crawley” 

Bueno, el armagedón no empezaría hasta dentro de 11 largos años, aún tenía tiempo para convivir con Ligur y después de derrotar a los ángeles, tendrían toda una eternidad. 

#AbandonaOctubre2023

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