XIV: Lo siento Rebekah

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Rebekah junto a Jacob y Kaylee se encontraban en la casa de los Leclerc, pues Charlotte los había invitado a cenar ya que los Leclerc no estarían esa noche.

Pero lamentablemente los Leclerc habían cancelado sus planes y si llegarían a casa esa noche, junto a una invitada.

El grupo de amigos estaba terminando de cenar cuando sintieron la puerta abrirse.

—Se supone que los Leclerc no estarían —Rebekah le susurro a Charlotte.

—Se supone —Respondió confundida.

Rebekah y Arthur se volverían a ver después de tantos meses y eso a Rebekah no le gustaba para nada.

Arthur entró a la sala junto a toda su familia... y junto a Carla.

—Rebekah —Murmuró Arthur al verla.

—Pensé que llegaron más tarde —Charlotte se levantó para acercarse a su novio.

—La comida se canceló —Respondió Charles—. Hola chicos.

Rebekah, Jacob y Kaylee devolvieron el saludo.

—Bueno, creo que ya es hora de que nos vayamos —Kaylee se levantó haciendo que Rebekah y Jacob la siguieran.

—No, chicos, no se vayan —Hablo la señora Leclerc.

—Veamos una película —Propuso Carla.

—Buena idea —Charlotte miró a sus amigos—. Después yo los puedo ir a dejar.

—No te preocupes —Contesto Jacob—. Rebe trajo su auto —Pasó su brazo por los hombros de Rebekah.

El grupo de amigos sabía que Jacob había echo eso para molestar a Arthur, y lo logro.

Habían puesto Spider-Man: Lejos de casa, una película en la cual salía Rebekah

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Habían puesto Spider-Man: Lejos de casa, una película en la cual salía Rebekah.

Casi al final de la película Rebekah fue al baño.

Se miró al espejo que había frente al lavamanos, sus mejillas estaba rojas, sus ojos igual.

Mojo sus manos para luego pasarlas por su cabello.

—Respira, respira, respira —Se repetía una y otra vez.

Ver a Arthur con esa chica no le hacía bien.

Se volvió a mojar la cara para luego salir del baño.

Y ahí estaba Arthur, esperándola.

Rebekah intento de pasar por su lado pero Arthur no lo permitió.

—Déjame pasar, Arthur.

—Te ves muy animada con ese chico. ¿Es tu novio?

—No. ¿Esa chica es tu novia? —Devolvió la pregunta.

—No. Me sorprende que no sea tu novio, digo... como siempre están juntos.

—No molestes, Arthur.

Rebekah intentó pasar por su lado, pero nuevamente Arthur no lo permitió.

—Arthur, déjame pasar.

—¿Sabes algo? Me equivoqué cuando te dije que te seguiría hasta el fin del mundo, Bekah.

Los ojos de Rebekah se cristalizaron.

¿En serio le decía eso?

¿Acaso no pensaba?

¿Acaso no tenía corazón?

—Eres una mierda —Rebekah se acercó más a Arthur—. De verdad que eres una mierda. No entiendo como me pude enamorar y entregarme a ti, nunca lo pensé de ti Arthur. Que decepción. Vete bien a la mierda.

Una lagrima bajó por su mejilla pero se la limpió.

Rebekah empujó a Arthur para poder salir del baño.

—No, Bekah. Escúchame —Arthur siguió a Rebekah.

—No me vuelvas a decir Bekah —Rebekah se detuvo para enfrentarlo—. El Arthur que yo conocí hace meses me podía decir así, no está mierda de Arthur.

—Por favor, escúchame, no quise...

—¡¿No quisiste decirlo?! —Interrumpió a Arthur—. Si lo dijiste es porque de verdad lo sientes.

Ambos llegaron a la sala llevándose la atención de todos. Los ojos de Rebekah seguían llorosos y todos se fijaron en eso.

—Yo me voy —Dijo Rebekah agarrando sus cosas—. Nos vemos otro día.

Rebekah camino hacia la salida, escuchando como Arthur la llamaba.

El menor de los Leclerc quería ir detrás de ella, pero Kaylee y Jacob no lo permitieron.

—¿Que le hiciste? —Pregunto Kaylee.

—Nada —Contestó Arthur.

—Ella no llora por nada —Respondió Jacob.

Kaylee agarró las cosas de ambos.

—Bueno, creo que ya es hora de irse —Dijo Kaylee

Se despidieron de todos, menos de Arthur.

—Tu y yo hablaremos —La señora Leclerc apunto a su hijo menor.

—¿Estas bien? —Fue lo primero que Kaylee le pregunto a Rebekah cuando se subieron al auto

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—¿Estas bien? —Fue lo primero que Kaylee le pregunto a Rebekah cuando se subieron al auto.

Rebekah la miró, dejando ver sus ojos rojos y las lágrimas que corrían por su mejilla.

—Mi vida —Kaylee atrajo a Rebekah para abrazarla—. No llores por ese idiota. Ningún hombre merece tus lágrimas.

Nuevo capítulo

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Nuevo capítulo.

Arthur, Arthur, Arthur, haces las cosas tan mal.

Love, Arthur LeclercDonde viven las historias. Descúbrelo ahora