Se sincero

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Los días pasaban con normalidad o eso quisiera decir, lo único que cambió fue las muestras de afectó de Umemiya hacía a mí, ya no le importaba que hubiera otros viéndonos, me abrazaba en cuanto me miraba, besaba mi mejilla y en las reuniones me tomaba de la mano todo eso me hacía casi morir de vergüenza, pero sabía por qué lo hacía, quería saber qué fue lo que les platique a mis compañeros. Se había obsesionado Umemiya con eso, sabía que no me dejaría en paz hasta que le hablara de todo aun cuando él ya lo supiera.-

- Es extraño verte tranquilo Sakura.- dijo Nirei mirándome sentado junto a Umemiya.
- ¿Te rendiste tan rápido?.- dijo Suo con su sonrisa que me hacía enojar.

Mire a Umemiya, el solo se dispuso a sonreír y yo solo suspire.-

- No es eso... Tal vez sí, es imposible hacerlo entender que me suelte.- dije lo más tranquilo que pude.
- Hay forma de que te suelte.- dijo Umemiya.- Dime todo lo que escondes.
- Nunca.- dije molesto.- Quiero derrotarte, si sabes mis debilidades no será una pelea justa.
- Tú sabes todo sobre él.- dijo Nirei.- Y...
- Se conocen cada parte del cuerpo, conocen sus expresiones al momento de tener sexo y estoy seguro de que te ha visto hacer otras expresiones que nosotros no conocemos ¿Que te impide hablar más de ti?- dijo Suo sin dudar como si... Tuviera razón.
- Cierra la boca.- dije molesto.- Si quiero enfrentarlo enserio no quiero que sepa que... Soy débil.
- Nunca pensaría eso y si peleamos por el lugar de líder de Fuurin jamás te faltaría al respeto dándote ventaja.- dijo Umemiya serio, dejo de abrazarme y me miro a los ojos.- Me costó trabajo llegar a donde estoy y quiero que también tu tengas tu momento.- continúo hablando.- Pero quiero que sepas que aun cuando me derrotes o yo gane, seguiré siendo tu novio.
- No tenía... Pensado dejar de serlo.- dije apenado.

Umemiya sonrió y volvió a abrazarme con emoción, beso mi mejilla, parecía que se divertía haciéndome pasar vergüenza frente a esos dos, la hora del almuerzo fue agradable, solo nosotros 4, para Umemiya fue una cita doble.-

- Después de dejar claro todo dime...

- No.- conteste rápido a lo que iba a decir Umemiya.
- Eres cruel y muy injusto.- dijo Nirei.- Deberías hablar con él.
- ¿De qué lado estas?- pregunte.- Deberías a poyarme a mí.
- Está del lado del romántico que sufre por tus frías respuestas.- dijo Suo.- Eres muy cruel.
- Ustedes dos están en serios problemas.- dije esperando que cerraran la boca.- Esta bien.

Me puse de pie y tomé la mano de Umemiya, me despedí de los dos y me llevé a mi novio a la calle, mineras caminábamos solté su mano y comencé a pensar en l que iba a hacer, llegamos a un parque y buscamos donde sentarnos.-

- Aquí me dijiste que me querías.- mientras veía el parque.- Te diré mis miedos, mis debilidades aquí, donde supiste mis sentimientos.
- Harás que este lugar sea aun mas especial.- dijo Umemiya.- Si te da pena, no tienes que mirarme a los ojos.
- Lo se... Por favor escúchame.- dije apenado.

Le dije todo lo que les había dicho a mis amigos, lo que Kaji me hizo darme cuenta, mi corazón se aceleraba, pero seguí hablando, tenía que... Desnudar mi alma como lo había Umemiya antes. Había peleado por mí, se arriesgó a perder su lugar en Fuurin por mí, al terminar cerré los ojos y aprete los puños esperando la respuesta de Umemiya, coloco su mano en mi mejilla y me hizo verlo.-

- Te quiero mucho.- dijo antes de besarme.- Eres increíble.- dijo después de besarme.
- ¿De qué hablas? Te dije algo muy vergonzoso y no es nada genial.- dije aun apenado alejándolo.
- No eres lamentable.- dijo Umemiya.- Eres genial y enserio espero no tener que toparme con la gente que te hizo daño.
- Eso da miedo.- dije al verlo sonreír después de decir eso.- También espero que no los conozcas.
- Gracias por decirme esto.- dijo Umemiya.- Ya no quiero que me escondas nada.
- Tampoco preguntaste antes.- dije apenado.
- Es cierto.- dijo Umemiya.- Perdona por no mostrar más interés.
- Tampoco estabas obligado.
- Aun así, me siento por haber conocido primero tus gemidos antes que tus miedos.- dijo Umemiya tranquilamente.
- ¡Cierra la boca! Arruinas el momento con tus tonterías.- dije poniéndome de pie.- Vamos a casa.
- ¿Para qué?
- Quiero estar contigo, pero no teniendo sexo, solo quiero acostarme sobre tu pecho.- dije apenado.- Me sentí... Solo.

Ahora somos noviosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora