Perdido

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Veía a mi enemigo, pero no podía correr, cuando pasaba por mi cabeza correr o atacar imaginaba el resultado y no estaba a mi favor, aprete los puños y trate de estar concentrado, pero ver a Endou reír me hacía enojar y... Temblar, pero no dejaría que se diera cuenta o estaba acabado.-

— ¿Estas emocionado?- pregunto Endou
— Por romperte la cara.- dije mostrándome seguro.- ¿Qué quieres?
— A ti, entre mis brazos pequeño Sakura.

Luego de decir eso comenzó a reír se me revolvió el estómago de solo oír eso, me aleje despacio esperando tener la oportunidad de correr, pero no distinguía que calle em llevaría a casa o a mi novio, repase que camino tome, pero no perdí el tiempo en eso ya que no estaba prestando atención, reaccione al ver que comenzó a caminar y salí corriendo en dirección opuesta.-

— Debo... Encontrar a Umemiya.- dije mientras corría.

Seguí corriendo hasta ver algo que reconociera o a alguien, pero a quien más quería ver era a mi novio, sentía que llegando a él estaría seguro. Voltee un momento y vi a Endo corriendo, pero no parecía esforzarse mucho, era como si estuviera disfrutando el momento, mi corazón se aceleró y volví la vista al frente._

— ¡Umemiya!- grite mientras seguía corriendo, pero nadie apareció.

Logre esconderme en un callejón para recuperar el aliento, pero sabía que no tendría mucho tiempo, busque rutas, pero no había donde ir, al oír la risa de ese sujeto seguí corriendo hasta que choque con alguien, caí al suelo y espere el próximo ataque.-

— ¿Sakura?- oí frente a mí.

Al abrir los ojos vi una cara conocida, el jefe de Roppo Ichiza, Kanji Nakamura.-

— ¿Qué pasa?- pregunto mientras me ayudaba a ponerme de pie.
— Me... están... persiguiendo.- dije con dificultad.

Me jalo hacia atrás y comenzó a revisar a los alrededores, pero ni él ni yo veíamos algo, pero se escuchó una risa.-

— Ni ellos te salvaran de mi.- dijo Endou sin permitir que lo veamos.- Ríndete y ven conmigo... Prometo que la pasaras bien.
— ¡No digas estupideces!- grito Kanji enojado.- Te lo advierto, pon le una mano encima y te juro que...
— No me hagas reír, no hay algo que puedas hacer.
— No sabes de lo que es capaz uno cuando se trata de proteger a los amigos.

Volteo a verme Kanji y sonrió, me hizo relajare, pero sabía que no bastaría él para derrotar a Endou, ya no se escuchó nada y sin bajar la guardia nos dirigimos al local donde trabajaba, al llegar no pude dar otro paso comencé a ver como se oscurecía todo y en la entrada me desmaye, solo oía la risa Endou. Al despertar vi a Umemiya a mi lado sujetando mi mano, parecía que estaba por caer dormido.-

— Hola- dije al ver que estaba por caerse.
— Hola.- contesto Umemiya sonriendo.- ¿Como te sientes?
— Bien... ¿Estas bien?
— Si, solo no he dormido muy bien.
— ¿Por qué?
— Pues primero, te desmayaste luego de casi recorrer todo Japón corriendo, segundo busqué a Endou por todos lados y no lo encontré.
— Son razones algo tontas para no dormir.
— Pienso que es más tonto perderse y estar expuesto al peligro.
— ¿Estas enojado?
— Si, pero estoy muy cansado como para reclamar.- dijo Umemiya poniéndose de pie.- Dame espacio, me quiero acostar.
— No puedes...
— Por el día de hoy no escuchare objeción alguna a lo que te pida ¿Entendido?

No respondí y solo asentí con la cabeza, le di espacio y se acomodó a mi lado me abrazo y sin decir algo más se quedó dormido, me acosté igual y al ver tan cercas su rostro no pude evitar robarle un beso, acaricié su mejilla y sonreí.-

— Descansa

Fue lo último que le dije antes de quedarme dormido también. Al abrir los ojos vi a los celestiales y a Nirei junto a Suo, me desperté rápido y salí de la cama, pero Umemiya me detuvo antes de que saliera del cuarto.-

Ahora somos noviosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora