CAPITULO 19. EL LLANDO DE UN INFANTE

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¡Déjenme salir!, abran la puerta -gritaba el mas pequeño, golpeando la puerta con sus manitas y sentía voces que se burlaban de el por ser un mortal, pero más por ser un hibrido- ¡AYUDA! SAQUENME DE AQUÍ! -grita-

Bills entra a la habitación de su hijo al escucharlo gritar, y lo sacude no tan fuerte, pero si lo suficiente para despertarlo, el pequeño se levanta de golpe y siente como esta bañado en sudor al igual que las lágrimas brotaban de sus ojitos.

El dios lo observa y le limpia las lágrimas, el pequeño aturdido por la pesadilla noto que estaba en su habitación y que su papá estaba ahí enfrente, sin mas lo abraza y comienza a llorar. Esto sin duda provoco ansiedad e impotencia al no saber que pasaba con su hijo.

Por mas que intentaba hablar con él para que le cuente que ocurre el niño no suelta nada, pero parece que ya estaba listo para decirle, o eso esperaba.

-llorando- ya no quiero ser un híbrido -dice mientras se aferraba mas al pecho de su protector-

Bills miro a wis, quien se encontraba en el marco de la puerta junto al pez oráculo, ambos observaban la escena preocupados por el infante, el dios miro a su ángel guía algo desconcertado, no esperaba que su hijo tomara su origen de esa forma, es más nunca pareció interesarle y por que ahora si le tomaba tanta atención.

Los días se convertían en semanas las semanas en meses y los meses en años, para nuestro pequeño guerrero han transcurrido 2 años, teniendo 7 años, actualmente. La actitud de gohan había cambiado mucho de ser un niño alegre, platicador y seguro, ahora es un niño frio, reservado y muy inseguro.

Bills preocupado por el bienestar de su niño decide hablar con Dai Shinkan pidiéndolo que le diera clases particulares a gohan o que le dirá permiso a wis de ser el quien lo prepare.

El dios de la destrucción le conto el cambio de actitud del niño, el gran sacerdote aprobó la idea con la preocupación de que habría sucedido, ya que si noto cambios en el niño pero jamás dejaba de prestar atención, nuca se mostraba nervioso ni inseguro mientras estaba con él.

El pequeño de 7 años toma sus clases en el planeta de su padre a manos de wis, pero aun así gohan aún seguía comportándose frio y en ocasiones distante. Un día en particular, el joven se encontraba en la sombra de un árbol leyendo sus notas, el gato morado se acercó.

Gohan, necesito hablar contigo -dice tomando asiento a lado del niño- escucha hijo no se que paso hace 2 años, pero de lo que si estoy seguro y puedo notarlo es en el comportamiento que estas presentando, ¿qué paso? ¿Dónde está mi niño travieso? -dijo con dulzura-

El ya no está papá, murió cuando... -se calla al darse cuenta de lo que iba a decir-

¿Cuándo? ¿Qué pasa? Vamos dime, si no me dices me harás tomar medidas extremas -dice Bills tratando de mantener la calma-

No pasa nada -dijo mirando a otro lado-

Gohan... ya han pasado dos años, por favor dime o no confías en mí? -dice mientras toma la barbilla del niño y lo obliga a darle la cara- confías?

El pequeño soltó lágrimas, ha estado guardando ese dolor durante dos largos años, y aunque siempre le rogaba a su padre que ya no lo llevara jamás le dio una razón a esa acción.

Gohan se aferro al pecho de Bills y comenzó a llorar poco a poco subía su intensidad, de ser sollozos ahora eran llanto de dolor y sufrimiento, así como de angustia. Bills los abraza muy fuerte para que sepa que cuenta con él, le acaricia la espalda y su cabello.

Tranquilo mi niño, saca todo lo que tienes, llóralo hasta que ya no duela -dice Bills aun acariciando la pequeña espalda del infante-

Gohan continuo lloran por un rato hasta que sus llantos se convirtieron en sollozos, y tuvo el valor de ver a su papá a la cara, Bills al mirarlo le limpia las mejillas para retirar los rastros de lágrimas.

Papi, ¿es malo ser un hibrido? -pregunto entre sollozos-

No -dice firme- al contrario, es una bendición -dice- sabes shin, así te mando a crear, un niño hibrido, digno y real sucesor del dios de la destrucción. Mitad saiyajin y mitad humano, alguien que es muy fuerte y puro de corazón. Eso es lo que te distingue de los demás sucesores -le pellizca la nariz- yo estoy muy feliz de que estas a mi lado.

Padre e hijo se unen en un gran abrazo fraternal, Bills lo abraza fuerte para que viera que no esta solo y que cuenta con él para todo.

DIAS DESPUES

Wis se encontraba en el jardín regando las plantas cuando escuchó risas, las cueles hicieron que una sonrisa se dibujara en sus labios, sabia y conocía de quien provenía, se acerco al lugar, y vio a un infante al cual le volvía a brillar la carita.

El hibrido y el gato estaban jugando con la pelota, el gato hará lo que estuviera en sus manos para verlo feliz siempre.


Mi hijo híbridoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora