Elena pasó los siguientes días en la casa segura, pensando en su embarazo y en su decisión. No sabía qué hacer. No sabía si tener o no tener al bebé. No sabía si quería o no quería al bebé.
Elena habló con los policías, con su madre, con su abogado. Todos le dieron su opinión, su consejo, su apoyo. Pero ninguno le dio la respuesta. La respuesta tenía que salir de ella.
Elena se hizo muchas preguntas, buscando la respuesta. ¿Qué sentía por el bebé? ¿Qué sentía por Alejandro? ¿Qué quería para su futuro? ¿Qué era lo mejor para el bebé?
Elena no encontraba la respuesta. Solo encontraba más dudas, más miedos, más conflictos.
Elena se miró al espejo y se tocó el vientre. No veía ningún cambio, pero sabía que había uno. Sabía que había una vida dentro de ella.
Y que esa vida iba a cambiar la suya para siempre.
Elena cerró los ojos y respiró hondo. Trató de escuchar a su corazón, a su instinto, a su razón. Trató de encontrar la respuesta.
Y la encontró.
Elena abrió los ojos y sonrió. Había tomado una decisión. Había elegido lo que creía mejor para ella y para el bebé. Había elegido lo que quería hacer.
Elena cogió el teléfono celular y llamó al detective Martínez.
-Hola -dijo el detective Martínez con voz profesional.
-Hola -dijo Elena con voz decidida-. Soy Elena García. Quiero hablar contigo.
-Claro -dijo el detective Martínez con voz atenta-. ¿Qué pasa?
-Ya he tomado una decisión -dijo Elena con voz firme.
-¿Qué decisión? -preguntó el detective Martínez con curiosidad.
-La decisión sobre mi embarazo -dijo Elena con voz clara.
-¿Y qué has decidido? -preguntó el detective Martínez con interés.
-He decidido... -dijo Elena con voz segura.
Y dijo lo que había decidido.
CONTINUARA....
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La fuga de la reina
RomanceElena es una joven mesera que sueña con una vida mejor. Su sueño se convierte en una pesadilla cuando es secuestrada por Alejandro Rossi, el jefe de la mafia italiana, que se ha enamorado de ella. Alejandro la fuerza a casarse con él, sin importarle...