CAPITULO 41

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Entraron al departamento de Martina sin parar de besarse, cuando ella pudo cerrar la puerta, Mateo la alzó en sus brazos, con sus piernas rodeando su cintura, y caminó hacia la habitación.

La recostó en la cama, el quedando arriba de ella, y de acorde el beso iba subiendo la temperatura, la ropa empezaba a sobrar; Martu le sacó la remera para después poder disfrutar mas su espalda, Mateo no tardó mucho en hacer lo mismo con la prenda de la chica, que cuando no la cubría mas, aprovechó a ir bajando por su cuello dejando un camino de besos húmedos, hasta llegar a su corpiño, pasó sus manos por su espalda y se lo desabrochó, y después fue bajando cada tirita sin dejar de besar su cuerpo.

La mano del chico fue paseando por el abdomen de su novia y sin escala metiéndose en su ropa interior, mientras la besaba hacía movimientos con sus dedos para causarle satisfacción, ella le dejaba en claro que lo estaba logrando soltando un par de suspiros y hasta unos leves gemidos. Cuando terminó, Martu pasó a estar entre las piernas del chico, arrodillada en el piso sacándole el pantalón, empezó a jugar con su boca y el miembro del masculino, mientras el le agarraba el pelo y empujaba su cabeza cada tanto; la respiración se escuchaba cada vez más, indicando que la chica estaba haciendo muy bien su trabajo.

Una vez ya los dos sin ropa, Martina se subió encima de Mateo e introdujo el miembro en su cavidad, empezó haciendo unos movimientos lentos, pero cada vez fue aumentando la velocidad, solo se escuchaba el ruido del choque de sus pieles y las respiraciones agitadas de ambos; después se invirtieron los roles, el chico era quién estaba encima de ella, haciendo movimientos mas fuertes que los que habían estado practicando anteriormente, Martu no podía evitar soltar un par de gritos ahogados y eso a Mateo le encantaba y lo motivaba.

Después de una o dos poses más, ambos acabaron y terminaron rendidos en la cama, no hacía falta decir muchas palabras después de ese momento, bastaba con que ella esté acostada en el pecho de su novio mientras miraban tik toks para estar felices. La noche no había terminado ahí, repitieron dos veces más el polvo y después si, se durmieron abrazados.




- buen día hermosa - habló Mateo entre los labios de la chica

- ahí lo tenes al que se hacía el duro - entre risas - que es esto? - mirando a lo que había arriba de la cama

- me desperté con hambre y como mi novia es una morsa que no se despierta para cocinarme, me fui a comprar - volviendo a besarla




Ella estaba acostada, el estaba un poco encima de ella, con sus manos apoyadas en el colchón para sostenerlo.




- *sonríe* está bien, no voy a estar toda la vida para cocinarte




El chico se alejó del beso serio, Martu no lo había dicho con esa intención.




- es una forma de decir - sentándose en la cama

- comé - señalando la bandeja con la merienda - café frío te gustaba a vos, no? - sentándose en frente de ella, con la comida de por medio

- *asiente con la cabeza* vas a evitar el tema?

- que tema? - después de tragar un poco de su café - si vas a estar toda la vida para cocinarme, no hay nada de que hablar




Martu lo miró con ternura, esa negación la solía vivir todos los días con su madre y amigas.




- y si no? - preguntó bajando la mirada

- *suelta un suspiro* Martina

- no Martina no, en serio te pregunto, y si no estoy toda la vida? - suelta una leve carcajada - yo ya me había imaginado la vida de todos los que me rodeaban siguiendo sin mi, pero ahora estás vos, y no se si quiero imaginarme eso

- no te lo imagines porqué no va a pasar nada - siguió negando

- Mateo - larga en un suspiro - tenes que ir preparado para que los médicos digan que no hay muchas esperanzas

- vos te das cuenta lo que me estás pidiendo?

- *asiente con la cabeza* perdón

- me dijiste que no querías vivir lo que te queda preocupada - acostándose en la cama para estar mas cerca de ella - tenes muchísimo por vivir Martu, así que nisiquiera te tenes que preocupar - poniendole un mechón de pelo atrás de la oreja

- te amo - se limitó a decir con una leve sonrisa de lado

- te amo - devolviéndole la sonrisa




Después de un beso los protagonistas siguieron comiendo la merienda, o el desayuno, no se sabe muy bien lo que era.




- vos estás al tanto de que el vuelo es esta noche y vos ni tocaste la valija? - habló Mateo dejando la bandeja en el piso una vez que terminaron

- esta noche!!!? nunca me diste ese detalle - parándose preocupada

- *se ríe y la abraza por la cintura* tenes tiempo total, después la armas - acercándose a sus labios

- nunca me viste armar una valija se ve - alejándose

- no me corras - agarrándola del cuello - dame un beso

- no - respondió forzándose en una carcajada

- no? - preguntó amenazante




Ella negó con la cabeza siguiendo el juego, Mateo la tiró en la cama para hacerle cosquillas, Martina ODIA las cosquillas, así que entre risas intentaba escapar, pero era casi imposible ganarle en fuerza a su novio.




- basta porque me enojo en serio - todavía riéndose

- bisti pirqui mi iniji insiri - le hizo burla dejando de molestarla - te crees que estas en condiciones de amenazarme? - agarrando sus muñecas por sobre su cabeza impidiendo que ella se mueva




Martina estaba acostada en la cama y el arriba de ella.




- no te hagas el malo Palacios

- shhh - besándola - te encanta - sonriendo entre sus labios




La chica no se pudo negar, era verdad, le encantaba que el se muestre tan dominante.




- no te muevas - indicó soltándola para buscar algo




Se dirigió a la bandeja que había dejado en el piso, para buscar un hielo que había sobrado del café de su novia, y después de ponérselo en la boca lo fue pasando por todo el abdomen de la mujer, mientras le subía la remera para al final sacársela por completo; volvió a sostener sus brazos y a pasear el hielo por las tetas de la chica, era imposible que ella no suelte suspiros de satisfacción, le exitaba mucho las acciones de su novio, y la sensación del frío en los pezones le encantaba.

Lamentablemente el hielo no era eterno, así que una vez derretido Mateo volvió a subir a los labios de la chica, para después de un rato volver a bajar, pero esta vez, mucho mas abajo, exactamente a su zona íntima, para allí empezar a practicarle sexo oral; la espalda de Martina se curvaba casi inevitablemente, el chico disfrutaba mucho de verla disfrutar, así que cuando las piernas de la mujer empezaron a temblar mientras ella ahogaba un grito de satisfacción, el se paró para poder sacarse los pantalones y volver a encimarse sobre ella penetrándola.





- anda a hacer la valija ahora - soltó con la voz muy agitada

- *sonríe* hay tiempo




El artista sonrió y la besó haciendo movimientos suaves para satisfacerse a ambos, aunque no pudo mantener la suavidad por mucho tiempo.









QUERIAN QUE DE DETALLES, DOS EN UN CAPÍTULO PARA QUE LES SOBRE 😂😂😂

aunque me duela a mi y a todos saben que no le queda mucho a esta novela 😭 así que necesito que me digan de que otros artistas (de argentina) les gustaría que escriba, yo había pensado hacer la próxima de duki y emilia, pero si no la leen me desmotivo je, así que nose, diganme ustedes 😁

SOLO POR VOS | PARTE 1 y 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora