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El príncipe Yoongi contemplaba el horizonte desde la villa del desierto, sintiendo una mezcla de gratitud y melancolía en su corazón

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El príncipe Yoongi contemplaba el horizonte desde la villa del desierto, sintiendo una mezcla de gratitud y melancolía en su corazón. La hospitalidad de Jimin, lo había salvado en más de un sentido. Se sentía en deuda con aquel extraño amable que le había mostrado bondad en medio del vasto y despiadado desierto.

Decidió partir al día siguiente, sintiéndose compelido a encontrar su camino de regreso a su reino. Sin embargo, cuando le expresó su intención a Jimin, este lo detuvo con una mirada apasionada y una voz suave como el susurro del viento.

"Príncipe Yoongi, entiendo que debas regresar a tus responsabilidades, pero permíteme cuidarte un poco más. Tu presencia ha llenado mi hogar de alegría y calidez. Por primera vez en muchos años, no me siento solo", dijo Jimin, sus ojos grises brillando con emoción sincera.

Yoongi se quedó en silencio, sorprendido por la profundidad de los sentimientos de Jimin. En ese momento, comprendió que no solo era la hospitalidad lo que lo retenía en la villa, sino un lazo emocional que había crecido entre ellos.

"Jimin, no sé cómo agradecerte por todo lo que has hecho por mí. Tu generosidad y amabilidad me han conmovido profundamente", respondió Yoongi, su voz llena de gratitud.

Jimin sonrió con tristeza y tocó suavemente el rostro del príncipe. "No necesitas agradecerme, Yoongi. Solo quiero verte feliz y seguro. Me he enamorado de ti, de tu valentía y nobleza. Estaré agradecido por cada momento que pases aquí conmigo".

El príncipe se estremeció ante las palabras sinceras de Jimin. Se dio cuenta de que también había encontrado algo especial en ese lugar y en ese hombre hermoso que vivía solo en el desierto. Con un suspiro, Yoongi asintió, aceptando la oferta de Jimin.

Así, decidieron quedarse juntos un poco más, permitiendo que el amor floreciera en el corazón del príncipe y en el alma del hombre del desierto. En los días que siguieron, compartieron risas, secretos y sueños, construyendo un vínculo que desafió las barreras del tiempo y del espacio. En la tranquilidad de la villa del desierto, el príncipe Yoongi encontró no solo un refugio, sino también un hogar para su corazón, donde el amor de Jimin le brindaba consuelo y felicidad en medio de la vastedad del desierto y más allá.

























En La Villa Del Desierto [Yoonmin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora