En el tranquilo reino de Egipto, las noticias de la llegada de nuevos visitantes del desierto llegaron a oídos del rey Yoongi. La noticia no le causó demasiada impresión; durante años, pastores y comerciantes del desierto habían llegado ocasionalmente al reino, y él supuso que estos eran simplemente más de los mismos. Su atención se centraba en su esposa, la reina, a quien amaba con una ternura y dedicación que la hacían sentirse afortunada.Una tarde, mientras paseaba por los jardines del palacio, la suave brisa del desierto llevó consigo la voz de un guerrero que clamaba por ser escuchado. Yoongi, con su mirada llena de amor para su esposa, le acarició el rostro con ternura antes de darle permiso para que los visitantes fueran llevados ante él.
Lo que encontró en la sala del trono lo dejó sin aliento. Ante él, de pie, estaban Jimin y un joven que compartía el mismo cabello rubio y los mismos ojos grises que Yoongi reconocia pero su mismo retrato. Era su hijo, Ayari, cuya existencia solo había conocido a través de los recuerdos y los sueños.
Las emociones se estrellaron como una marea en el corazón de Yoongi. La alegría de ver a su familia perdida después de tanto tiempo se mezcló con el dolor de los años de separación. Corrió hacia ellos, sus brazos envolviendo a Jimin y Ayari en un abrazo apretado.
"Jimin, Ayari", susurró, su voz quebrada por la emoción. "Pensé que nunca volvería a verlos. Los he buscado durante tanto tiempo".
Jimin lo miró con ojos llenos de dolor y tristeza. Había visto cómo Yoongi amaba a su esposa, cómo la tocaba con amor y ternura. El corazón de Jimin se llenó de una mezcla de felicidad por encontrar a Yoongi y una aguda punzada de dolor por lo que había perdido.
Sin decir una palabra, Jimin se dio la vuelta y huyó, su corazón roto por la visión de su amado rey abrazando a otra mujer. Ayari lo siguió, confundido y asustado por las lágrimas en los ojos de su padre.
En ese momento, el corazón de Yoongi se rompió en pedazos. Había encontrado a su familia, pero también había perdido a Jimin. El amor y la felicidad se mezclaron con el dolor y la tristeza en su alma, creando una tormenta de emociones insoportable.
Mientras observaba cómo Jimin y Ayari se alejaban, Yoongi cayó de rodillas, sus lágrimas cayendo como la lluvia sobre el suelo de mármol del palacio. El rey de Egipto, que había encontrado la paz en los brazos de su reina, ahora se encontraba atrapado entre dos mundos, dos amores, dos destinos. En ese momento de desesperación, la única certeza que tenía era que, a pesar de todo, su amor por Jimin y Ayari nunca se desvanecería, y ese amor, doloroso y puro, se convertiría en una constante en su vida, una sombra que siempre estaría presente en su corazón.
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En La Villa Del Desierto [Yoonmin]
RomanceEn un mundo devastado por la guerra, el príncipe Yoongi, tras la desaparición, despierta solo en el vasto desierto . En medio de la desolación, encuentra una villa y ahi esta su posible destino su nueva vida, que despierta sentimientos que él creía...