14

3K 353 88
                                    

Best friend.

Best friend

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

.
.
.
.

Jason Grace terminó de preparar las palomitas, las echo en un bol y se dirigió a la sala. Sentado en el sofá de color azul, estaba el gran héroe del Olimpo vistiendo su ridículo piyama de tiburón, en la mesa de café había una docena de refrescos y todo tipo de frituras, listos para iniciar su tarde de películas. Seguramente un maratón de Harry Potter o películas de Barbie.

Sentado en el piso sobre una manta estaba Nico di Angelo quien venía de visita todos los fines de semana (Si no Jason tenía un ataque maternal).

Habían comenzado una pequeña tradición desde que empezaron a vivir en la nueva Roma, se reunían al menos una vez por semana para ver una película, los tres hijos de los tres grandes del Olimpo. Normalmente, intentaban invitar a los demás, pero Hazel y Frank estaban ocupados con la legión, siendo pretores, Leo con los proyectos de mecánica, ( Y cierta rubia no quería a Calipso cerca de su novio)Annabeth estaba colapsando mientras hacía una pequeña maqueta de un edificio que sería pisoteada por su profesor. Y Piper quien tenía una carrera menos demandante, ayudaba a la hija de Atenea a terminar sus maquetas.

Percy y Jason también estaban ocupados con sus carreras, pero normalmente ellos se lo tomaban mucho más a la ligera. Y Nico, pues él seguía en preparatoria, así que no estaba demasiado ocupado.

— ¿Qué vamos a ver hoy?— Pregunto Jason, sentándose en el sofá.

— ¡La trilogía de terminator!— Exclamó Percy emocionado.— Las demás películas no existen, son solo pesadillas colectivas.

— Mjmm… — Nico hizo una expresión de alivio y sorpresa. Era la primera vez que percy escogía una película buena.— Suena mejor que ver Barbie escuela de princesas.— Murmuro.

Percy soltó un pequeño bufido y miro al pelinegro ofendido.

— Te encantó, no finjas.

Nico rodeó los ojos.

Escucharon una puerta abrirse, y todos miraron en la dirección que vino el sonido. La pelirroja cobriza salió de su habitación, y sin verlos siguió su camino a la cocina. Luego volvió a pasar con un baso de agua.

— ¡Oye Kali!— Le llamo Percy en voz alta.—¿Quieres ver una película con nosotros? — Pregunto, levantando el bol de palomitas para enfatizar.

Kali por fin se dignó a mirarlos de reojo, inexpresiva.

— No, gracias.— Murmura.

— Vamos, te gustan las películas que te hacen desconectar el cerebro.— Le insistió su hermano mayor.

Kali hizo una mueca, no le gustaba que le insistieran cuando ya había tomado una decisión, Percy lo sabía.

— Paso.—Se dio media vuelta y se metió en su habitación.

Metanoia |• Nico di Angelo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora