Ramé 🥀 ~Rindou Haitani~

🥀XIII🥀

-🌹☠️-

- Ahhh! No frotes tan fuerte.

- Simplemente lo rocé, deja el drama - siguió en lo suyo, ignorando mis quejas.

- ¡Ay! Ya, sácalo o quítalo, esto me duele mucho - sentía mis lágrimas a punto de salir por mis ojos.

- Ay, ya lo saqué, deja tu drama niña.

Ok, este pequeño diálogo sonó bastante extraño, pero el contexto viene de que en plena práctica de biología se quebró un tubo de ensayo, lo recogieron y todo perfecto ¿no?
Pues no, un pedazo cayó a un lado mío y nadie lo notó. Debido a mi distracción, cayó mi bolígrafo y sin darle mucha importancia, lo intente tomar sin fijarme que sostenía. En cuanto lo tuve en mi mano y lo apreté, sentí como algo se encajaba en mi piel. Mi grito no hizo falta y de inmediato todos giraron, la sangre corría por mi mano y en cuanto abrí mi palma ví ese cristal incrustados y la sangre sin parar de salir. Mierda, demasiada sangre.

Todos me empezaron a rodear y presa del pánico no respondía a nada, solo podía mirar mi mano. Nadie hacía nada, solo preguntaban y preguntaban. Hasta que un brazo me rodeo y me sacó de mi shock.

- Voy a enfermería - dijo con una profunda voz y la profesora no hizo más que asentir.

En los pasillos, podía ver gotas de sangre derramarse en el blanco piso, mi camisa estaba manchada y solo podía seguir viendo mi mano.

- Ya estás muy pálida, deja de ver tan fijamente tu mano.

- Pero, sale demasiada sangre, dios - mis ojos empezaron a sentirse pesados. Rápidamente me tomo por la cintura dándome más soporte para caminar junto a él

- Enserio deja de mirar tu herida, o acaso te gusta ver el dolor por el que estás pasando.

Llegamos finalmente a ese cuarto de enfermería y se movió con gran rapidez a buscar lo necesario para tratar mi herida.

En silencio y con total cara de concentración, tomó mi mano y empezó a examinarla antes de agarrar una gasa con, supongo que alcohol, y pasarla alrededor de mi herida. Tenía aún un pedazo de vidrio en mi mano, y cada vez que rozaba mi herida me creaba un triple de dolor.

Y así llegamos a nuestro hermoso diálogo.

Luego de reprocharle mi dolor, vendó mi mano con una gasa encima del corte y me soltó limpiando los restos de sangre regados por mi brazo.

- Sabes muy bien como tratar una herida - estaba sorprendida con la habilidad que tenía, parecía que tuviera práctica y todo.

- Tuve que aprender a tratarlas.

- ¿A caso quieres estudiar algo relacionado a la medicina y por ello aprendes a tener este nivel de profesionalismo?

- Por si Ran y yo salíamos malheridos, uno de nosotros debe saber curar al otro - se levantó de la silla en que estaba y tomó un frasco de pastillas.

- ¿Qué es eso?

- Tómalo, te va a aliviar que no sientas tanto dolor en la zona - tomé lo que me ofrecía y sirvió de un bebedero un vaso de agua para mí.

Tomé la medicación y decidimos quedarnos un rato allí esperando, casi nadie venía para esta pequeña sala y podíamos perder un poco de esa clase. Yo realmente ya había terminado mi parte del laboratorio por esta semana, así que no tenía preocupación de estar allí. Por su lado Rin, supongo que tampoco quería estar en el aula.

- Oye, ¿tienes algo que hacer hoy? - preguntó Rin, mirándome a los ojos.

- Nop, ¿por qué la pregunta?