"Mi viejo amigo"|| Bkdk

9° ¿Recuerdas lo que te dije?

Bakugo apretó sus puños y gritó algo que Midoriya no pudo entender, estaban lejos uno del otro  por la distracción del peliverde de hace unos minutos.

«¿Eh?... ¿Qué le pasa a Kachaan? Parece molesto»

Miro a un lado y al otro buscando a quien le gritaba cuando vio esa extraña forma familiar... Izuku dio otro paso, su pie no piso bien, se torció,  haciendo que se callera. 

"¡Mierda!" pensó cayendo al suelo. Su cabeza daba algunas vueltas cuando miro que Katsuki camino hacia la figura familiar.

-¿Qué quieres?- dijo el rubio acercándose más.

Midoriya no podía escuchar, estaba bastante lejos tirado en el suelo "Tch... me duele" miró su pierna con esfuerzo.

-Solo... Quería saber donde estaba el lindo chico de allí- sonrió la figura familiar para Izuku. 

-Si te le acercas...-apretó sus puños fuertemente el rubio aun estando lejos de su parecido. 

-No te preocupes, se lo que me harás si me acerco... Lo dejaste muy claro ese día.

-Eso espero.

Bakugo lo miraba molesto sin quitar su mirada de el, sus manos empezaban a doler de lo fuerte que las estaba apretando.

-¿Qué, enserio tanto te molesta que me acerque a el?- se burlo con sarcasmo.

-Bueno, estas en lo correcto, solo que esta vez no seré tan gentil.

Ambos se miraban con molestia, mientras Izuku trataba de comprender que sucedía, el no entendía ni un poco y tampoco lo haría con ese dolor en su pierna. 

Apenas escuchaba de que hablaban cuando Bakugo se acerco mas a la otra acera donde estaba el otro chico. El estaba en medio de la calle, ningún carro pasaba pero eso ponía nervioso al peliverde.

"¿Y si lo atropellan?" Pensó Midoriya temblando un poco. Trato de levantarse y se dio cuenta que su pantalón se había roto, tenia un gran hoyo y bajo de el estaba toda su pierna raspada, le dolía pero, no había otra cosa que le importara a Izuku en ese momento, solo miraba a Bakugo deseando que lo le pasara nada.

—El otro día me diste un susto... Pero ya te reconocí, te cortaste el pelo ¿verdad? digo antes lo tenias mas largo y picudo— se burló el chico, quería provocarlo.

—Bueno, ese día no fui inteligente... Pero, ¿Por qué te pareces a mi? quiero decir... ¡¿Porque parecías un maldito ratón asustado ese día?!

—Ah... Ya veo, entonces nos olvidamos, ¿no?

—¿Olvidarte? Eso suena tan estúpido, no eres nadie irrelevante en mi vida.

—Si claro... Entonces si lo olvidaste.

—¿A que te refieres, idiota?— La ira aun crecía en Bakugo, en este momento el destruiría algo si no tuviera ganas de saber la verdad.

—¿Quieres que te deje con la duda?—el chico sonrió provocativamente.

—Pff, no necesito saber quién eres, solo eres otro extra en esta vida.

Aunque no lo quisiera admitir realmente quería saber la verdad, el no lo recordaba para nada ni un poco por más que trataba.

—Solo te he visto una vez y fue ese día, que te di una plaliza— el rubio soltó una carcajada burlona.

—Si, si, búrlate lo que quieras. Ese día solo me tomaste por sopresa, tenía que guardar las apariencias, ¿Sabes?

Todo este misterio empezaba a matar a Bakugo, quería saber pero porsupuesto no se lo diría al idiota al frente suyo.
Entonces el chico saco de su bolsillo un pequeño collar con un pequeño llavero, a simple vista no lo podía distinguir.

Katsuki quiso mirar de cerca que era pero antes el chico se lo lanzo y el lo atrapo, quedó sorprendido al mirar el collar.
—¿Que...?—hablo la temblorosa voz del rubio.

—Entonces... Quizás así me entiendas.

(...)

Tras unos minutos Izuku finalmente se acerco mientras que Katsuki se alejaba y volvía a su casa. El chico no hizo nada, solo hizo una mueca y volvió al callejón de donde salió.  

—Q-q... ¿qué sucedió? — preguntó Izuku estando frente a Bakugo.

—Nada, solo olvídalo—su tono de voz era completamente frio.

—Kacchan, hablo enserio, ¿Qué paso...?

Bakugo suspiro, pensó por un momento... y tomo la mano de Izuku, su toque fue muy agradable. 

—Tengo que decirte algo... 

El rubio miro al suelo sin soltar la mano de Izuku, se notaba algo desanimado. En cambio el peliverde estaba nervioso y sorprendido que allá tomado su mano. Ambos se miraron, Katsuki tomó aire. 

—Te lo diré dentro, pero... creo que ya se quien es esa persona... Quizás sepa porque te hizo eso.

Los ojos de Izuku se abrieron de golpe, permaneció en silencio, Bakugo empezó a sentir la mano de Izuku temblar, su corazón estaba acelerado.