4. Love Waltz

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Vez como va apareciendo la imagen Azora? -preguntó y sonreí con ilusión-

Es mágico no cree? -comente viendo el proceso de revelación de fotografías-

Lo es. -sonrió- ahora debes darme algo a cambio de enseñarte a revelar fotos Azora. -la mire confundido-

Solo tengo esto madre Colette -respondí, camine hasta la mesa que se mantenía atrás de nosotros y tome con cierto recelo mi libro favorito-

Me parece un maravilloso trueque -sonrió y asentí con algo de melancolía viendo como se llevaba mi libro, siguiéndola con mis pasos y mirada-

¿Sabes por qué pido algo a cambio? -preguntó y negué viendo entre lagrimas que intentaba retener como tiraba ese libro que amaba al fuego, dejándolo arder entre sus llamas- porque cuando uno recibe sin dar algo, da paso a las malas lenguas -contesto a su propia pregunta con una sonrisa, pero yo asentí sin entender muy bien a lo que se refería- ¿ahora yo podre decirte que no hiciste nada para pagarme lo que te enseñe? -pregunto con dulzura secando mis lagrimas con su pulgar mientras yo negué con la cabeza, aunque su mirada me hizo hablar, aquella mirada que había acostumbrado a entender, "tienes boca, úsala y habla"-

No puede decirlo, por que le di a cambio mi libro favorito. -conteste y ella asintió satisfecha con su enseñanza-

Tu y yo podemos dar algo sin recibir entre nosotros, pero la demás gente no es así ¿comprendes? -preguntó y asentí-

Gracias madre Colette. -sonreímos manteniendo nuestros cuerpos junto a la calidez del fuego gozando de nuestra mutua compañía en un lugar tan insulso para mi gusto-















Buenos días -Saludo Bleu y sonreí levantándome de la cama-.

Eran las 7 am y manteníamos ropa deportiva en el inicio del puente de Brooklyn, ya habíamos ido y vuelto.

Odio... salir...a...trotar... -se quejo Bleu sin aire y reí-

-Venga vamos a casa.

caminamos hasta casa, como era habitual siempre manteniendo un tema de conversación al azar. Prontamente llegamos, esta se ducho y yo continúe con la siguiente rutina que mantenía para tener fuerza, en lo que ella se vestía yo prepare el desayuno para ella, esa era nuestra rutina habitual, y ella hacía lo mismo por mí cuando yo tenía turno por las mañanas en el café.

Tomaré una ducha -avise entrando al baño. El agua fría estremecía mi cuerpo, estaba acostumbrado al frío de el agua por las mañanas, pero aún así mi cuerpo reaccionaba de mala manera con el contacto de esta, sequé mi cuerpo y vestí saliendo sin la camisa como era habitual en mi durante las mañanas.- Bleu hoy harás.. -corte mis palabras al ver a Conrad sentado en el suelo frente al baño completamente adormilado, abriendo sus ojos de golpe al verme- Buenos días -hablé rodeándolo para seguir con mi conversación- ¿Bleu, hoy harás algo en la tarde? -pregunté y esta asintió-

Debo ir a una boda a tomar fotos -rasco su nuca- ¿quieres venir? -ofreció y negué secando mi cabello con la toalla dando toques severos-

A que hora vuelves? -pregunté-

Es a las 5, antes de las 8 estoy en casa mono -sonrió tomando un par de cosas antes de salir.- ¡nos vemos! -me despedí moviendo mi mano hasta que su silueta se perdió tras la puerta-

Por que estas sin camisa? -preguntó la castaña saliendo de mi habitación-

No iba a entrar hasta que salieran, ahora puedo vestirme en paz. -conteste de forma agresiva, absurdamente irritado con su presencia. Entre a la habitación buscando una camiseta y un suéter sumido en cierta ira-

Metanoia.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora