Bonito; Hyunin

Dos;

Hyunjin

Jeongin comía su hamburguesa despacio mientras yo lo miraba atento a sus movimientos, Jeongin era muy bonito.

—Oye ¿sabias que él profesor de educación física está saliendo con la de historia? —Dijo distraído sacando la mayoría de las verduras de su hamburguesa, reí llamando su atención.

—¿Porqué pides una hamburguesa si solo te gusta el pan y la carne? —Hablé entre risas haciendo que él ruede los ojos—, Y si, si sabía.

—¿Porqué no me contaste ese chisme? eres un mal mejor amigo —Habló fingiendo que estaba indignado. Le dediqué una sonrisa de labios cerrados como si no me hubiera dolido que solo fuera su mejor amigo.

—¿Quieres ir a mi casa? —Cuestione recogiendo toda la basura de la mesa para tirarla, él asintió levantándose de su asiento tomando su mochila. Nos dirigimos a la salida del lugar, el cual no quedaba tan lejos de mi departamento, de camino a casa, como siempre que caminábamos, Jeongin dudo en entrelazar nuestras manos haciendo que yo lo haga por él. De un momento a otro él soltó mi mano y corrió a un pequeño puesto que había.

—¡Mira Jinnie, venden burbujas! —Exclamó emocionado apuntando el lugar, me acerqué a él con una gran sonrisa dibujada en mis labios al verlo emocionado por unas burbujas, como si de un niño pequeño se tratara.

—¿Quieres que te compre una? —El asintió feliz indicándole al señor que color darle, cuando la obtuvo salió corriendo jugando con ellas.

—¿Ustedes son parejas, joven? —Negué extendiéndole el dinero—.¿Pero te gusta? —Que viejo más metiche, suspire y asentí debido a su mirada tan insistente—. No se lo guarde joven, no le tenga miedo a lo que dirán.

—No me importa lo que digan los demás, me importa lo que diga él—Él señor me dio una sonrisa que solo reflejaba tristeza, suavicé mi mirada y le dediqué una sonrisa mientras le hacía una reverencia y salí corriendo tras jeongin.

Cuando por fin lo alcancé lo alce en brazos y comencé a darle vueltas en aire escuchando su hermosa risa inundar mis oídos.

—Eres muy bonito jeon—Dije sin detenerme a pensar lo que decía haciendo que mi corazón latiera rápido. Él me dedicó una linda sonrisa cuando sus pies volvieron a tocar el suelo.

—Muchas gracias, jinnie —Mis nervios aumentaron cuando entrelazo nuestras manos y comenzó a caminar como si nada, sin embargo, pude ver como una mueca decoró sus labios para luego girarse—. Pero no creo que sea bonito —Susurró, no soy experto leyendo a las personas, pero su tristeza se reflejó hasta en el forma en la que comenzó a caminar.

Y mentiría, sería una gran falacia si dijera que mi corazón no rompió al ver como sus ojos se cristalizaron y como trataba de no soltar ninguna lágrima. Detuve el pazo y lo jale hacía mi para envolverlo en un dulce abrazo que él correspondió apretándome fuerte.

—¿Estás bien? sabes que puedes contarme lo que sea —Él negó y se alejo regalándome el intento de una sonrisa.

—Estoy bien, no te preocupes —Asentí sonriéndole dulcemente y despeinando su hermoso cabello rosado, Jeongin no era muy fan de contar lo que le sucedía y no quería presionarlo a que me contara algo que no se sentía listo de hablar pero me gustaría que él se viera de la misma forma que lo veo yo.

hola, qué tal están???