𝐁𝐎𝐍𝐈𝐓𝐎 › luckity.

once.

No podía conciliar el sueño.

Habían pasado muchas cosas este día, estaba dando vueltas su mente y no lo dejaban en paz.

"Quackity? tú me gustas... y mucho"

Tapó su cabeza con la almohada, en un intento de callar las voces en su cabeza.

“Quackity, necesito que me seas sincero… tú, ¿sientes algo por él?”

¿Sentía algo más que amistad por Luzu?

Bueno, el mayor es atento, cariñoso, compresivo y demás pero, eso es lo que hace un amigo, ¿No?

¿No?

Cerró sus ojos en un intento de dormir, más le fue imposible.

Y porque la alarma había sonado.

…

–Venga, cuéntame, ¿Que paso ayer en el partido?— Preguntó Roier.

—Pasaron muchas cosas….— Soltó una risita.— Rubius me confeso que gusta de mi.—

—¿¡Qué?!— Gritó Roier, llamando la atención de algunos alumnos.

—¡Baja la voz!—

—Lo siento, pero, ¿Estás seguro que lo dijo en serio? ¿No te estará molestando?—

—Sus palabras se oían sinceras…— suspiró.— además, me pregunto si sentía algo por Luzu.—

—Oh, Dios mío… ¿Y que le dijiste?—

—Le dije que no, pero, no sé…—

—¿No sabes qué?—

Iba a responderle pero el sonido del timbre lo detuvo.

—Hablamos después, Roier, nos vemos.— Agarro su mochila y se retiró de la cafetería, en realidad él no iba a clases, no tenía los ánimos de ir a clases, se fue a el árbol a descansar.

No estaban los jugadores, así que sentía bien no verle la cara al capitán.

—Sabia que aquí te iba a encontrar, Quacks.— Hablo Luzu, haciendo sobresaltar al menor.

—¿No deberías estar en clases?—

–Era matemáticas, tú sabes bien que voy bien en esa materia y no tenia nada que hacer ya.– Se sentó junto a él, agarró su mano con delicadeza y entrelazados sus manos.

—¿Estas bien? ¿Haz dormido bien?— Con su mano libre, acarició la cara de el menor, dejando ligeras caricias.

—¿Por qué preguntas?—

—¿Por tus ojeras, se notan mas de lo normal.—

—Bueno, fue una noche difícil, sólo eso.—

—Sabes que puedes contarme cualquier cosa ¿No? ¿Estas seguro que solo fue una mala noche?—

Suspiró, no quería contarle al mayor todo lo que sucedió ayer, tal vez era por la vergüenza que le daba o, sólo no quería.

—Sí, solo eso.— Sonrío.

Luzu dudó, no sabía si le estaba diciendo la verdad, aunque Quackity podía disimular bien, hay algo que ponía inquieto al mayor, pero no sabía que era exactamente.

Tampoco quería obligar al menor a que le contara, era su decisión no contarle así que, no iba a insistir.

Se quedaron en silencio, no era un silencio incómodo, era todo lo contrario, aún con sus manos entrelazadas, estaban ahí, sin decir ni una sola palabra.

Hasta que, ese lindo momento fue interrumpido.

Por la única persona que el menor no quería ver.