TOM KAULITZ-𝐋𝐎𝐒 𝐎𝐉𝐎𝐒 𝐃𝐄 𝐌𝐄𝐋𝐈𝐒𝐒𝐀

𝐂𝐀𝐏𝐈𝐓𝐔𝐋𝐎 𝟔𝟓

La ducha había finalizado,Melissa se sentía mejor y el ardor en su garganta había desaparecido.Tom ayudó a la chica a salir del jacuzzi e inmediatamente le puso la bata de baño.

—Haces demasiado por mí—dijo sonriendo mientras Tom le ayudaba a ponerse la bata—

—Mereces esto y más,¿sabes? —se acercó al rostro de la chica y le dió un cálido beso en los labios—

—Estoy ansiosa por el día de mañana —dijo sonriendo mirando los ojos del alemán—

—Me alegra,yo también estoy demasiado emocionado,es el único lugar que dejé al último porque sabría que algún día te encontraría y te llevaría —sonrió ladino—

—Tú y Bill,irían a Japón ¿no? —frunció el ceño—

—El plan era mencionarlo,y observar si recordabas algo.—guiñó su ojo—

—¡Tom Kaulitz mentiroso! —dijo riendo—

—No pensábamos un viaje,nada de eso —rió— siempre esperé y dejé al último,Japón.—

—Italia,¿también? —sonrió—

—Claro—sonrió y le dió un beso en la frente a Melissa—

Al día siguiente ambos amanecieron abrazados el uno al otro,la noche anterior habían programado la alarma,su vuelo saldría a la 1:20 pm.

Tom fue el primero en escuchar aquella alarma,miró con vista algo borroso y talló sus ojos con sus largos dedos,la desactivó y miró que eran las 7:00 am.Era demasiado temprano pero querían tomarse su tiempo en alistarse,desayunar y revisar si no les faltaba nada así que el alemán comenzó a mover a Melissa para despertarla al comenzar a abrir sus ojos,Tom salió de la cama y se fue directamente hasta el closet donde procedía a sacar su ropa.

—Buenos días,preciosa —dijo mirándola desde a lo lejos— ¿te parece si nos duchamos juntos? —Melissa asintió adormilada—

Ambos entraron al baño y antes de ducharse cepillaron sus dientes y usaron enjuague bucal después entraron a la regadera para comenzar a ducharse,la chica pelinegra aún sentía sueño era como si se hubiese desvelado y en su rostro podía verse que le hacían falta más horas de sueño.El de trenzas se encontraba lleno de energía y se ofreció a untarle shampoo a Melissa,ella accedió y sonrío levemente.

—¿Sucede algo? ¿te sientes bien? casi no me has hablado —preguntó extrañado mientras masajeaba la cabellera de la chica—

Ella quedó en silencio unos segundos y después abrió su boca.

—Tengo sueño —miraba como la espuma del shampoo iba recorriendo su piel— ¿a qué hora dormirnos ayer? siento que no dormí nada —frunció el ceño—

—Aproximadamente a las 11 pm—comenzó a enjuagar su cabello—si nos queda tiempo puedes dormir aunque sea una hora ¿no te parece? —sonrió— la chica estaba de espalda y Tom se encargaba de retirar todo rastro de espuma.—

—Me vendría bien,me conformaría con una media hora —soltó una risa nasal—

—¿Quieres desayunar aquí? ó ¿preferirías ir a desayunar a un restaurante? —preguntó mientras giraba a la chica para que quedaran frente a frente—

—Me parecería bien ir a desayunar fuera —sonrió—

—Entonces iremos a donde tú gustes —dijo sonriendo y le dió un beso en la frente—

Después de terminar con su ducha ambos se cambiaron y bajaron las escaleras para salir de casa y subir al auto de Tom.
El alemán tenía una sonrisa mientras que Melissa buscaba alguna canción para acompañar el pequeño traslado al restaurante.