Nunca se te da un sueño sin que también se te dé el poder de hacerlo realidad. Sin embargo, tendrás que esforzarte. - Richard Bach.
***
Dorian y Melanie
El abogado se había postrado en la barra tras pedir una copa de vodka. No solía beberlo, pero sin quererlo había conmemorado aquel fatídico día en el que había pillado a Enzo y a Kiara en una situación más que comprometida, por lo que aquel trago era su mejor opción.
—¿Puedo invitarte a una copa? —preguntó Melanie resultona postrándose ante él.
Dorian sonrió para instantes después repasar el cuerpo de su mujer. Habían pasado casi tres jodidos años desde que se habían casado y podía jurar y perjurar que, cada día que pasaba, la amaba más.
—Lo siento, pero estoy casado —indicó mientras enseñaba la alianza con orgullo.
—Es una pena…
Melanie dió media vuelta y fingió querer volver a su mesa, porque la realidad era que deseaba quedarse allí, junto a él. Sin embargo, la mano del hombre la dio caza de inmediato, lo que la hizo sonreír victoriosa.
—Puedo hacer una excepción contigo —ronroneó mientras pegaba el cuerpo de la bailarina a la barra para encerrarla contra su cuerpo.
Ella contempló los labios de Dorian que se separaron para tomar una gran bocanada de aire. Sí, debía reconocer que de estar en el club indicado ya hubiera introducido su mano en el interior del pantalón para tocar aquello que la rozaba y que, evidentemente, le pertenecía. Porque si algo había aprendido era que el Moore vivía por y para ella, pero aquel lugar no era el "Destiny", ni el "Zafiro", ni ningún club de esa índole, por lo que se tuvo que conformar con besarlo con impaciencia.
El abogado no solo respondió de buena gana, sino que además, se pegó lo suficientemente a ella como para hacerla entender que la necesitaba. Sin tiempo que perder, la rodeó con sus manos, generando una sensación de bienestar arrolladora.
—¿Qué tantas ganas tienes de permanecer aquí, morbosa?
Ninguna, se respondió así misma de inmediato. Melanie se permitió el lujo de mirar ambos reservados. El de las chicas lucía completamente vacío, mientras que Jhonny e Isabella permanecían haciéndose carantoñas en el de los hombres. Sin embargo, no había ni rastro de la otra pareja que parecía haberse esfumado del pub.
—¿Y si aprovechamos el tiempo en nuestro sótano, soldado?
Dorian gruñó satisfecho por la respuesta obtenida. Era un hecho que ahora, con Gael siendo tan pequeño, apenas podían sacar tiempo para ellos, así que, sin duda, aprovecharía aquella magnífica noche en la que su hijo estaba con los abuelos. Se bebió de un único trago el vodka, mientras observaba como su mujer no dejaba de mirar por todo el recinto.
—¿Qué buscas?
—Tu hermana… —murmuró a la vez que sacudía la cabeza — Ha desaparecido y he de suponer que no lo hizo sola.
El abogado echó un vistazo rápido al reservado para cerciorarse de que el rubio tampoco estaba. Era evidente que se habían ido juntos, por lo que sabía que su hermana, Kiara, estaba en buenas manos.
—Prefiero no pensar en donde andan metidos… —susurró siendo consciente de la mecha tan sumamente corta que tenía Enzo. La misma que tenía él, por supuesto. Por ello sacó con celeridad la cartera para deslizar un billete hasta el centro de la barra — Tenga, quédese el cambio.
Ambos atravesaron el lugar hasta poder refugiarse en el interior del coche. Dorian estaba ansioso, pero Melanie que no dejaba de remangar el largo de su vestido, no lo estaba menos.
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El último baile | Extras Saga Bailando Con... | +18 Completa ✅
RomanceExtras de la Saga "Bailando con..."